Sin compromiso (Libro I) Terminado

Te quiero

—Bien—sonrío.

Asiente y me mira.

—Enric nunca nos había presentado una amiga tan guapa.

Sonrió.

—¿Y tu qué tal la estas pasando? digo es tu día.

—Bien porque ahora tengo a una chica hermosa a mi lado.

Siento que me sonrojo.

Joder que pena.

Sonrió tímida.

Enric voltea a vernos y está serio lo ignoro y volteo con Abraham.

Trato de sonreír coqueta.

—¿Qué estás tomando?—Le pregunto a Abraham.

—whisky ¿Quieres uno?

—Si.—respondo aunque no muy segura porque ya me siento un poco mareada.

—Ahorita te lo traigo.—se levanta y va hacia la barra.

Volteo con Enric y me está mirando, tiene a Esmeralda muy pegada a él, ella le dice cosas en el oído y el sonríe asintiendo.

Carajo no quiero ver cómo se coquetean. Me levanto y voy al baño, entro y hago mis necesidades, después de unos minutos salgo para lavarme las manos y me encuentro con Esmeralda recargada en la puerta con los brazos cruzados.

Me mira y sonríe, le sonrió hipócrita y me lavó las manos.

—¿Sabes? Le hemos conocido a muchas amiguitas a Enric, así que ya sabemos de que tipo eres.

No respondo y sigo con lo mío.

>>Espero no termines llorando cuando te deje por mi, por qué ya que termina de divertirse con sus amiguitas, siempre vuelve conmigo.

—Pues que poca dignidad tienes.—volteo a verla.

Sonríe.

—Yo solo disfruto del placer que me da Enric cuando se mete entre mis piernas.

Zorra.

>>Y te doy un concejo, no te enamores de el porque jamás estaría con alguien como tú.

Auch.

Maldición no quiero seguir escuchándola. Trato de salir pero se interpone.

>>Escucha lo mejor será que te vallas, Enric está conmigo no necesita de tu compañía o dime ¿Qué le puedes ofrecer, que yo no le haya ofrecido ha?

Mierda no lo sé, ella es muy bonita y tiene buen cuerpo y sobre todo es rubia y yo morena.

No respondo y ríe.

>>Eso pensé.—dice saliendo de los baños.

Me quedo parada mirándome al espejo y comparándome con ella.

No me voy a ir. Pienso y salgo del baño decidida a no demostrarle que me hizo sentir mal.

Me voy acercando a los chicos y veo a Enric besando a Esmeralda.

Carajo.

Siento tristeza y celos. Porque carajos la besa, ella tiene razón yo no le puedo ofrecer nada que no le haya ofrecido ella. Mis lágrimas quieren salir pero no me permito llorar.

Camino hacia ellos y tomo mi bolso decidida a irme.

Abraham me mira y trata de decirme algo pero no hago caso.

Al parecer Enric se da cuenta y se separa de Esmeralda.

—¿A dónde vas?—pregunta pero no le hago caso y comienzo a caminar en dirección a la salida.