Una Jinchuriki en Akatsuki, Hinata Hyuga

Capítulo 16: Un plan ya no tan secreto.

Narra omnisciente

—Vaya, esto sí es impresionante. Nunca creí que el divertido y tonto Tobi sería el verdadero líder de Akatsuki. —dijo Tahina con sarcasmo.

—Nadie se lo cree, señorita Tahina, pero dígame, ¿qué hará ahora que sabe mi secreto? —preguntó Obito, ya sin su máscara, pues esta se encontraba rota en el suelo.

—Nada, por ahora; guardaré tu secreto y el de Zetsu a cambio de que tú no digas el nuestro, ¿qué te parece?

—Me parece perfecto, señorita Tahina. Usted y sus amigos no dirán nada acerca de mi plan y yo no hablaré nada de ese "lugar". —dijo tranquilamente sin bajar la guardia, porque tener a alguien como Tahina cerca no era algo muy bonito, ni seguro.

Tahina asintió a lo dicho por el Uchiha para dirigirse a la salida de la habitación en la que se encontraban. Luego, se dirigió a la habitación de Hinata, hallando a esta durmiendo, inmediatamente volvió a ser parte de ella metiéndose en su alma y cuerpo. Cuando llego a su espacio se puso a meditar un poco con su compañera de batalla.

—¿Quién lo diría? Obito está vivo y en busca de un mundo donde pueda estar junto a su amada, ay, que lamentable. —mencionó la kiken con una pena falsa y sarcástica— ¿Intentaremos algo para que no logré su cometido? —preguntó a la bijuu de 20 colas.

—Siendo sincera, no sé, veremos como sigue esto y si llega a afectarnos de cierta manera haremos algo. —respondió pensativa.

—Bien, como tú digas, compañera mía. —dijo con una gran sonrisa.

Narra Hinata

Me encuentro patrullando alrededor de la guarida que se fue asignada este semestre, viendo que no haya nada fuera de lo común. 

—Oye, Hinata, siento que algo malo está sucediendo en el pequeño pueblo del sur. —me informó Hany.

—¿Podrías ser mas precisa? Por favor, Hany. 

—Claro, ¿recuerdas al alcalde del lugar? 

—Sí. Ese hombre no me dio buena espina cuando lo vi. 

—Al parecer está a cargo de una venta que se dedica al tráfico de personas, por supuesto, todo esto a ocultas del pueblo. Y a empeorado la cantidad de secuestro estas semanas. Escucho claramente las oraciones y pedidos de ayuda tanto de las víctimas como del pueblo. —dijo volteando en dirección hacia donde se encuentra el pueblo. 

Al escuchar aquello no dude en cambiar de dirección yendo al pueblo. Cuando llegue a la entrada logré observar a Izumi, una joven de mi edad con la que había hablado unas veces al encontrarnos en el mercado. Rápidamente me quite la capa y me dirigí a ella. 

—Buenos días, Izumi. 

—Buenos días, Hinata. Es bueno verte de nuevo. —dijo sonriendo. 

—Lo mismo digo. —dije de la misma manera para luego cambiar mi temperamento a uno más serio— Disculpa, tengo unas preguntas acerca de los sucesos que han estado ocurriendo estas ultimas semanas. ¿Me harías el favor de respondérmelas?

—Claro, no hay problema. Después de todo, también tienes que estar enterada porque es principalmente a las mujeres a quienes mas se las secuestran. 

—¿Así que mayormente son mujeres? Bien, eso me servirá. ¿Hace cuánto inicio esto de los secuestro? 

—Desde inicios de febrero, pero aumentaron cuando el señor Yakuza tomo el puesto de alcalde. Muchos creen que él tiene al que ver con todo esto, entre esos yo, pero no tenemos suficientes pruebas para confirmarlo.