Una Jinchuriki en Akatsuki, Hinata Hyuga

Capítulo 21: Cambios drásticos tras una pérdida dolorosa.

Narra Hany

Definitivamente no podré con ello. —pensé con pesadez y furiosa. 

Hinata y yo veíamos con autentica rabia a Obito. Se preguntarán: ¡¿Pero qué ha pasado?! Pues para responder debemos volver una hora atrás. 

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Hace una hora...

Estábamos realizando una de las tantas tareas-misiones que nos dio el Uchiha friendzoneado, cuando sentimos un fuerte dolor en el pecho y cabeza. 

—¡Chicas! ¡Esto es terrible! ¡Obito asesinó a la señorita Konan! —gritó Tahy. 

Ambas nos quedamos completamente quietas ante la noticia. Ahora comprendo cual es el problema que mencionaba Obito y el porqué de las misiones: el problema era Konan quién protegía el cuerpo de Nagato, el cual poseía dos poderosos Rinnegans, y las misiones eran una distracción para que nosotras y mis hermanos no interfiriéramos.  

Luego de unos minutos reaccionamos y no dudamos en dirigirnos a la guarida en busca de Obito, con una ira y tristeza acumulados que nos harían "explotar". 

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Creí que íbamos a ser capaces de soportar otra perdida como esta, pero estaba completamente equivocada. Nos habíamos acumulado muchos sentimientos, ahora saldrán de una manera desenfrenada y Obito sería con quien nos desquitemos. 

Como muy pocas veces ocurre, Hinata y yo nos unimos en cuerpo y alma para luchar y darle su merecido al desgraciado que había matado a nuestra amiga. Obito no mostró mucho temor, estaba totalmente dispuesto a luchar. Bien, tenemos hasta que alguien venga y nos detenga, debemos aprovechar cada segundo. 

—Deberías pensar mejor en elegir a tus oponentes, Hinata, porque yo te venceré. 

—Primero, no soy sólo Hinata, también soy Hany; y segundo, más bien seré yo quién te venza o te mate, una de dos.  

—Eso ya lo veremos. —dijo tomando pose defensiva. 

Nos lanzamos directamente a el para iniciar una pelea de taijutsu en un principio, pero conforme avanzaba el tiempo agregábamos ataques de ninjutsu o genjustu. La batalla estaba siendo liderada por nosotras que nos lanzábamos veloz y furiosamente, ya sea con un golpe, un jutsu de hielo o una ataque de katana. 

—Nada mal, chicas, pero debo decir que esta pelea se detiene, por ahora. 

—¡¿Por qué lo dices?! —gritamos furiosas, este desgraciado cree que lo dejaremos escapar.

—Por eso. —dijo apuntando y mirando detrás nuestro. Volteamos encontrándonos con Tahina y Tahy. Estas nos tumbaron para después pararse encima nuestro, dejando que el Uchiha escapar. 

—Es suficiente, Hinata, Hany. Ya se libraron de esos sentimientos, ahora, ¿qué piensan hacer? 

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—¿Cómo es que nadie sabe el porqué los citaron a este lugar? ¿Entonces quién nos cito? —preguntó furioso el Tsuchikage. 

—No tenemos idea, como la carta decía que era una urgencia vinimos lo más rápido que pudimos pensando que era alguno de los Kages. —respondió Gaara.