21.

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Capítulo 21: Un silencioso adiós.

SKYLER.

Me levanto temprano el día siguiente de mi cumpleaños; decido irme en mi moto para no tener que ir con Bella. No estoy enojada, pero tampoco tengo ganas de hablar con ella justo ahora.

Mis ansias por ir a La Push son inmensas, mas no puedo permitirme faltar a clases.

No espero por Bella, me subo a mi motocicleta con rapidez y la enciendo para irme hacia...

Existen momentos donde no hacen falta las palabras para saber que algo anda mal.

No necesito que me diga nada; sus ojos tristes hablan por él. Frunzo el ceño con duda antes de apagar la moto e ir a su encuentro al filo del bosque. Formo una sonrisa amable y...

Él me abraza.

—Hola a ti también, Jazz. —Con mi mano libre acaricio su espalda; la otra sostiene mi casco—. ¿Cómo estás?

—Feliz cumpleaños.

—Oh, gracias.

—Lo lamento. —Se separa del abrazo, mirando hacia otro lado con pena. Admito que fue inesperado, pero no me disgustó—. Yo... vine para...

—¿Sucede algo, Jazz? —Parpadea varias veces, negando con la cabeza—. ¿Tú quieres pasar o...?

—No. —Estira su mano para acomodar mi cabello y sonríe con tristeza—. Vine a despedirme, Ann.

¿Qué?

Entreabro los labios y sé que la incredulidad se puede notar en mis ojos. Retrocedo sin creerlo... Eso es demasiado... No entiendo.

—¿Te irás? —susurro.

—Sí —mira el suelo—, yo me iré a Cornell a estudiar... y no creo que regrese pronto.

—Oh...

Aprieto los labios.

Yo pensé... pensé que podía...

—Me habría gustado quedarme más tiempo, pero...

—¿Me escribirás? —pregunto esperanzada—. Vas a llamar, ¿verdad? De seguro vas a venir a visitar a tu familia y...

Él suspira. —Temo que hacerlo es avivar nuestras esperanzas —musita, dudoso—. Espero que tengas una bonita vida al lado de tu familia, Ann.

Se da media vuelta, listo para adentrarse al bosque y dejarme con todas mis ilusiones rotas.

No es algo de lo que pueda culparlo; nunca especificamos nuestras intenciones. Se siente como una ruptura, sin embargo. No hay nada y no debería sentirme así, pero...

Yo no me entiendo.

No comprendo por qué las cosas comienzan a salir mal cuando creo que vamos bien y yo... Necesito una pausa.

Necesito evitar perderme en la duda.

—No te permito esto —menciono con seguridad, soltando mi casco y tomando su mano—. Yo no te permito que te vayas así.

𝗦𝗞𝗬𝗟𝗘𝗥: 𝗦𝗲𝗰𝗿𝗲𝘁𝗼𝘀 𝗱𝗲𝗹 𝗠𝗮𝗿.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora