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Emilio
7:00 am, CDMX

*Estamos demasiado cerca de las estrellas, nunca había conocido a alguien como tú, alguien cayendo igual de duro prefiero perderte que usar te, y tal vez solo seas una bendición disfrazada, un espejismo de lo que realmente necesito*

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Estaba en la oscuridad el frío ahí era incesante, el sonido de las ambulancia cada vez se hacía más fuerte mis manos estaban llenas de aquel rojo escarlata, el pánico se había apoderado de mí cuerpo y mente, vi su cuerpo, frío, sin vida, extremadamente pálido más de lo que ya era, el nudo se formó en mi interior y las ganas de gritar y desgarrar me la garganta se habían intensificado, pero no podía me estaba ahogando ahí.

Emilio...

Emilio...

Emilio...

¡¡RESPONDE!!

No, no, no, no esto no es real, no podía, tenía que ser una maldita broma de pésimo gusto, no.

¡¡ESTO ES UNA MALDITA PESADILLA!!, quería que me mirara, que me despertarse y al abrir los ojos ahí estuviera me diera un fuerte abrazo, y yo simplemente me quedara con el mal sabor de boca por un pésimo sueño.

Sentí sus bracitos rodearme la espalda, el calor me embargo el corazón aun veía sus manos rodeándome el torso, me volteé, le vi, me sonrío colocando su tacto en mi mejilla, provocando que ladeara mi cabeza como si fue un gatito buscando calor humano, su tacto se esfumo al mismo tiempo que su presencia como la nada dejándome solo, hundido en este poso sin salida y larga caída.

¿Por qué? ... murmuré ... ¡¡POR QUE!!... sentía mi garganta arder... mis cuerdas vocales estaban dolidas, mi alma quebrada y me mente shockeada. ¿Por qué?, ¿Por qué debía sufrir de esta manera tan cruel?.

De pronto todo se volvió negro y una voz me susurro.

Despierta... Emilio... Despierta.

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Abrí los ojos levantándome de la cama con un brinco abrupto, la respiración se encontraba agitada tanto que me costaba respirar, mi cuerpo entero temblaba el nudo en mi garganta seguía presente, gota tras gota de sudor resbalaban por mi sien.

Mi cuerpo ardía, cansado y débil no podía controlar mi maldito cuerpo, en un acto de desesperación entre al baño, abrí la llave de la regada y sin siquiera quitarme los calzoncillos me metí dentro, la lluvia artificial acariciaba mi cuerpo el agua me estaba dándome el control que había perdido hace un par de minutos atrás mi cuerpo se relajo, mi respiración se regulo, pero mi mente se perdió en aquel maldito recuerdo, aquel con el que creí ya haber pagado mi condena, inclusive una auto impuesta el recuerdo de aquella fatídica noche estaba tomando venganza de mí, me estaba sentenciando por mi promesa aun no cumplida.

Rendido salí de la ducha, me quité los calzoncillos empapados colocando una toalla en mí cadera, me dirigí al vestidor en mi habitación tome un conjunto deportivo y me lo coloque, la manera menos psicópata de sacar mis frustraciones era ejercitándome y hace un par de días que no lo hacía, coloque el conjunto en mi cuerpo que no consistía más que en unos pans color grises flojos, y una playera normal de tirantes ajustada a mi cuerpo. Salí de la habitación para posteriormente dirigirme al gimnasio que mantenía en casa.

Me desahogaría con el costal para box.

Cuarenta minutos después regresé de nuevo a mi habitación, retire la ropa sudada de mi cuerpo para darme una ducha rápida he irme a la oficina.

🔥Sienteme🔥|| Emiliaco [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora