|| 24 ||

624 84 77
                                    

Emilio
8:00 am, CDMX

*Estábamos totalmente a obscuras, mis manos recorrían su hermosa figura, subían por su cuerpo hasta entrelazarse con sus delicadas y tersas manos, su aliento en mi nuca me hacía querer más el, me hacía desearlo más de lo que ya lo hacía*

〰️〰️〰️〰️
Los labios de Joaquín se sentían tan cálidos, tan blandos, tan deliciosos, el beso no tuvo vergüenza, la ferocidad estuvo presente en todo momento, mi lengua pidió acceso a su boca dejándome embriagar por el exquisito sabor de la piel. Mis labios abrieron los suyos mordiendo el carnoso labio inferior obteniendo un pequeño gemido, mis manos se posaron en su cintura que al tacto se erizo.

Provocando una tormenta de arena en mi cabeza, la falta de respiración fue la culpable de la separación de nuestras bocas, en cuanto esto sucedido la mirada de Joaquín se veía horrorizada, perpleja, confundida, ¿arrepentida?. Oh no eso no podía ser posible. Antes de poder siquiera hablar, el cuerpo de Joaquín ya se encontraba atravesando la puerta de salida, limpie mis labios saboreando los retos de su bálsamo permanecientes en mi boca. Un sabor único y diferente a otros.

.....

Ha pasado una semana desde que mis labios se encontraron con los de Joaquín, aún puedo sentir la humedad de ellos, el sabor a fresa que desprendían aquellos carnosos y sedosos labios sobre mi boca.

Atena: ¿Así que vas a estar en New York estos días? - me pregunta Atena frente al escritorio de cristal

- Si, quedarás a cargo mientras tanto - la compañía de New York está teniendo problemas por los incompetentes ejecutivos que la manejan, es una de nuestras principales fuentes de inversión por ende no puedo permitir que se venga abajo, serán millones de dólares perdidos. Y no estoy dispuesto a perder todo por lo que he trabajado.

Atena: Bien - Atena es la única persona en la que confío totalmente para dejar a cargo en mi ausencia - ¿Cuándo te vas? - pregunta la rizada frente a mi

-El viernes por la mañana - contesto sin despegar la mirada de mi computador

Atena: Ok - el silencio se instala inundando a su vez todo el lugar, algo sumamente desconcertante, tengo a una parlanchina Atena frente a mí y el silencio aún sigue presente, algo que solo dura unos escasos minutos, por desgracia

Atena: Emilio estoy preocupada por ti - suelta aquello dejándome totalmente desconcertado- sé que aborreces hablar de tu vida privada, y se lo que dirás "Atena no te crees historias donde no las hay"- dice esto último en un vago intento de imitar mi voz consiguiendo mi total atención a sus palabras

- Es que no las hay Atena, mi vida personal es solo mía no le debo explicaciones a nadie eso te incluye a ti - sigo sin entender a qué viene todo esto, son hechos absolutamente absurdos; mis palabras logran obtener en respuesta una mueca de dolor por parte de la rizada

Atena: Por dios Emilio deja de ser un imbécil por un maldito día - mi paciencia está llegando a su límite - Puedes contarle toda a esa mierda a cualquiera, pero no a mí, te conozco más que tú mismo así que no me vengas con idioteces - Atena se levanta de la silla totalmente furiosa, hace años que no le veía en este estado - Emilio a ti te pasa algo, de verdad si necesitas alg.... - le interrumpo

-Ya es suficiente, no tengo absolutamente nada, ahora te pido que dejes de hacer esta escena y vuelvas a trabajar - los ojos de Atena se cristalizan amenazando con brindar lagrimas saladas a sus mejillas

Atena: Entendido jefe - toma los documentos desordenados en el escritorio pegándolos a su cuerpo, mientras este atraviesa la puerta

🔥Sienteme🔥|| Emiliaco [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora