Capítulo 33

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Todos los presentes en la boda de Bill y Fleur, estaban inquietos, no había rastro de ninguno de los dos, y entre los presentes empezaron a correr el rumor de que la boda había sido anulada, por dudas de ambos, pero nada había sido confirmado, al rato llegaron los novios con caras serias, todos se esperaban lo peor hasta que una sonrisa apareció el rostro de ambos.
—Disculpen la tardanza, ya nos vamos a casar—, dijo Bill con una sonrisa.
Él rápidamente se ubicó en su lugar, y Fleur se colgó en el brazo de su padre con una sonrisa resplandeciente, hizo su caminata al altar de una manera elegante, ella no se veía hermosa con el vestido, el vestido se veía hermoso en ella, las madrinas se veían muy lindas, era un cuadro balanceado de belleza y perfección, la chica llegó al altar y le dio un beso a su padre, para posicionarse enfrente de su futuro esposo.
—Estamos reunidos para celebrar la unión entre William Arthur Weasley y Fleur Isabelle Delacour—, dijo el ministro dando inicio a la ceremonia.
La ceremonia transcurrió en un discurso sobre el amor verdadero, y el gran compromiso del matrimonio, hasta que llegó el momento de los votos.
Cada uno dijo los votos repitiendo lo que decía el ministro, estar con el otro en la enfermedad, la salud, la pobreza, la riqueza, la vida y la muerte hasta que la muerte los separara, ambos se veían tan inmersos en su mundo donde no había otra persona sólo su pareja, que si les hubieran propuesto ser mortifagos ellos habrían aceptado, los dos enamorados afirmaron su deseo de cumplir cabalmente sus votos.
—Ahora sus promesas—, dijo el ministro.
Bill empezó primero.
—Et non deriliquam vos permanet in manu mea manu: ego semper tecum, quia melior est tecum ¹.—con una sonrisa colocó el anillo y unos lazos color plata salieron para enrollarse en las manos de ambos.
Fue el turno de la rubia.
— Je promets de t'aimer et de te désirer, je promets de t'embrasser passionnément et je promets de te tenir sans jamais t'oublier, je promets de te caresser et de te remplir de mille baisers, je promets de ne jamais te quitter et de toujours te porter dedans mon coeur.²
Y sucedió lo mismo que con Bill, los lazos salieron y se enrollaron en sus manos y desaparecieron quedando sellada ambas promesas.
Los presentes quedaron confundidos ya que ninguno entendió lo que ambos habían dicho, Bill quiso decir su promesa en latín ya que era un idioma con el que estaba familiarizado, y Fleur lo hizo francés ya que es el idioma del amor y su idioma natal, para que sus padres entendieran que su amor era de verdad, y sobretodo esas promesas se hicieron en diferentes idiomas para que solo esa persona lo entendiera y fuera más íntimo.
—Los declaro marido y mujer, puede besar a la novia.
Ese beso transmitía ternura, amor, más de uno se derritió con ese gesto y aplaudió con alegría a la pareja de recién casados.
Pasó un buen rato en que la gente comía y reía, hasta que anunciaron el baile de los recién casados.
—Con Uds el Señor y la señora Weasley.
La canción empezó a sonar, esa canción calzaba perfectamente en la pareja, y ambos lo sabían.

°•°


I found a love for me
Darling, just dive right in and follow my lead
Well, I found a girl, beautiful and sweet
Oh, I never knew you were
The someone waiting for me
Because we were just kids
When we fell in love Not knowing what it was
I will not give you up this time
But darling, just kiss me slow
Your heart is all I own
And in your eyes you're holding mine
        
Cada palabra la bailaban con una sonrisa, Bill la pegó a su cuerpo, susurrandole cada palabra al oído.
—No pienso renunciar a ti, tu corazón es mío y mío es tuyo, siempre lo será.

Nunca digas nunca: Bill y FleurDonde viven las historias. Descúbrelo ahora