Capítulo 5

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Fleur caminaba por las calles del Londres muggle, haciendo turismo para saber en que calles podía aparecer o no, sería mucho descaro el no saber ni siquiera donde demonios vivía, y a parte de eso le servía practicar su inglés al escuchar a las personas hablar, había un lugar al que quería visitar el cuál Dani le había dicho que tenía que ir y era el río Támesis, por lo que sabía no estaba tan lejos así que podía caminar y colocaba en orden sus pensamientos, y la persona que más rondaba en ellos era un pelirrojo, muy malhumorado, la trataba como si ella fuera la culpable de algo, no se sacaba de la cabeza el trato recibido por parte de él en el banco, oye sabía que había llegado tarde, pero no por eso era una malcriada, y tratarla como si fuera una inepta eso era pasarse, bien que se había esforzado para graduarse con honores, como si graduarse del colegio mágico en Francia fuera cocer y cantar, pero no se extrañaba, él no era ni el primero ni el último en pensar eso de ella, la pregunta que se hacía era ¿Por qué le importaba tanto la opinión de él si antes eso le daba igual?, no sabía la respuesta y en el fondo ella no quería saber la verdad. No veía la hora en que Daniel llegara a Inglaterra, ya que le había prometido vivir con ella, por que al igual que Fleur estaba buscando libertad, tenía ganas de verla y poder contarle todo para que la ayudará, y en eso estaba pensando que ni cuenta se dio que había llegado a su destino, cuando chocó con alguien.
~Espero que en el trabajo no sea así de distraída señorita Delacour, ya que no durará ni 1 mes~ le dijo con un tono de reproche su nuevo jefe William Wesley~ como ya le dije antes yo no permito malcriadeses de nadie.
~No se pgeocupe jefe, no va a teneg pgoblema, ya que a lo contgagio de lo que ud piensa, no soy ninguna idiota ni mucho menos una malcgiada~ contestó con desafío ella.
~No me lo diga demuestrelo, sin pruebas para mí ud es una niña rica caprichosa~ contraatacó.
~Y dale con lo mismo, ud no me conoce así que evite sus comentagios venenosos, e insultos hacía mí, vea que ud es un patán y no voy restgegándoselo cada 5 minutos~ le dijo con superioridad, andaba molesta ya se estaba pasando con sus comentarios.
~Si le duele lo que le digo es porque estoy diciendo la verdad, nunca cambiaré mi opinión hacía ud, y no me sorprendería que ud esté en el banco por haber hecho cosas mal vistas moralmente ya que dudo que su cerebro funcione correctamente.
Eso sí que Fleur no lo permitiría, ni a él ni a nadie, y sin darse cuenta de sus acciones la palma de su mano, chocó con la mejilla del contrario.
~Escucheme bien, no se lo voy a gepetig esta va ser la primera y última vez que ud toma la decisión de insultagme, no sé que tipo de educación gecibió en su familia, pero a mí JAMÁS me vuelve a faltag el gespeto y el como yo loggé teneg el puesto no es asunto suyo, jefe~ cada palabra la dijo con rabia e impotencia, con ganas de lanzarle un hechizo pero no lo hizo ya que habían muggles alrededor y lo menos que quería era tener problemas con el ministerio~ así que háganos un favog a ambos no se meta conmigo ni yo lo hagé con ud, y llevemos la fiesta en paz ya que le guste o no, vamos a tgabajag juntos, piense en eso, buenas tagdes~ y con eso se fue dejando sólo a ese hombre, ya le iba a demostrar ella quién era Fleur Delacour.

Nunca digas nunca: Bill y FleurDonde viven las historias. Descúbrelo ahora