Esto debe ser una broma. No es posible que Aron, específicamente Aron, quiera esto.
¿Los busco buscando indicios de que fuera una broma, pero no hay nada solo intensidad.
¿Cómo Aron podría?
Ya lo entendí.
- Asher, él no quiere esto. Solo quiere apropiarse de mí.
Es lógico.
Me declaro como suya después de un beso y ayer golpeó a Asher.
Asher no logra decir nada porque Aron me sorprende levantándome en su hombro.
¿Qué le pasa?
- Aron bajala. - lo encara Asher y yo me empiezo a mover para que me suelte, pero sus brazos son fuertes.
- Necesito hablar con ella. - Aron me deja en el asiento de copiloto.
Cuando por fin lo veo a la cara lo fulmino.
Maldito Aron. No soy capaz de quejarme, porque gustó estar en sus brazos, pero no es algo que voy a decir nunca en voz alta.
Aron da la vuelta entrando al carro y Asher me mira buscando alguna respuesta, solo asiento y levantó la mano despidiéndome.
Aron arranca el carro y volteo a verlo molesta.
- ¿Esto era necesario? - me cruzo de brazos.
- Solo quiero hablar contigo, te llevaré a casa.
- ¿Y era necesario traerme así?
- No te lo pienso negar, lo disfruto.
- ¿De qué quieres hablar? - hablo cortante.
- ¿Tienes algo con el rubio? - supongo que habla de Gregory.
- No entiendo porque dices eso.
- No soy idiota, él te trata como si fueras su novia. - murmura con molestia.
- Al parecer si lo eres. - murmuró. - ¿No te das cuenta de que estoy molesta porque dijiste que no valgo la pena?
- ¿Fue por esa tontería?
¿Tontería? Me dolió lo que dijo, pero no lo culpo. Después de todo creo que tiene razón.
- Si, claro. - ruedo los ojos.
- Te acostaste con Asher ¿Que querías? ¿Que los felicitara? - pregunta estacionandose porque ya hemos llegado a mi casa.
Ni loca voy a seguir acá con este idiota, me bajo del carro y él me sigue.
- Ya déjame en paz, si no valgo la pena no entiendo porque te tomas tantas molestias. - entro a casa, pero él se mete detrás mío y cierra la puerta.
Antes de que pueda decir algo me atrapa contra la pared.
- Jamás diría eso en serio. - se acerca tanto a mi que siento su respiración
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Sin Conocernos
Roman pour AdolescentsAparecieron en mi vida, y la pusieron de cabeza. Más de lo que ya lo estaba. Asher y Aron, mi jodida perdición.