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Dos meses después
Pasaron dos meses en los que hemos intentado encontrar pruebas, pero no hemos conseguido nada.
Estuvimos cerca varias veces, pero siempre algo salía mal.
Todo este tiempo tuve que hacer mi papel de novia perfecta, aunque un par de veces se me salió de las manos, pero Gregory fue una gran ayuda para soportarlo, no me imagino que habría pasado sin él.
Con Asher y Aron todo se congeló después de esa noche, Hemos hablado muy poco y todo se siente tan mal.
De vez en cuando los atrapaba viéndome y compartimos una sonrisa que tenía miles de palabras atrapadas. Nadie decía nada, pero para mi eso era lo que mejoraba todo y me daba energía para continuar.
Ahora estoy en la casa de Gregory con mi mamá porque mi cumpleaños es en una semana y queremos hacer una fiesta.
Una cosa llevó a la otra y como he estado pasando demasiado tiempo con Gregory, su mamá se ofreció a organizarla junto a la mía.
- ¿Tú crees que sea necesaria una fiesta? – le pregunto divertida a Gregory.
- No ¿Qué tal si nosotros la planificamos y la volvemos una fiesta de pizza? – se endereza en el sofá.
- Me parece perfecto, ven vamos. – lo tomó del brazo para irnos.
- Los dos siéntense y no piensen en ninguna fiesta de pizza. – sentencia mi mamá y nosotros nos reímos porque llevamos rato jugando a sacar de quicio a nuestras mamás.
- Entonces la fiesta será en el jardín de la casa Waldorf. – comenta Paola tomando referencias de decoración y mirándolas como si fueran la cura del cáncer.
- Si, pero preferiría que fuera solo con mis amigos.
- ¿No estamos invitadas? – cuestiona mi mamá.
- Yo me encargaré de que todo salga bien, además ya son dieciocho años. - Gregory se adelanta y mi mamá lo mira como si fuera un sol.
- Me destroza el corazón ver como crecen. Pero un día antes iremos a cenar para celebrar. – accede mi mamá.
- Y claramente tenemos que celebrar junto a ustedes. – le tomo la mano a Paola.
- Me causa mucha ilusión. – responde complacida.
- Entonces todo está solucionado. - sonríe Gregory.
Ambos nos levantamos y dejamos a nuestras mamás seguir organizándose.
Me toma la mano y me guía a su cuarto.
- Greg, estoy tan cansada de esto. - me tumbo sobre su cama y él hace lo mismo.
- Ya estamos cerca.
- Lo hemos estado por más veces de las que puedo recordar y seguimos en el mismo punto.
