Mierda, mierda, mierda.
Todo esto es un desastre, tengo tantas emociones encontradas que me estoy volviendo loco.
Por un lado, mi orgullo me pide de rodillas seguir con mi vida, pero también esta mi cabeza, que trata de buscar respuestas y por último mi estúpido corazón, que se sigue volviendo loco de solo verla.
No puedo entender que mi hermano la haya vuelto a meter en nuestras vidas ¿Se le olvidaron las noches que la esperábamos en su casa? ¿Cada llamada que hicimos sin recibir respuesta? ¿Estos años?
No lo puedo entender, eso no suena como algo que él haría. No es algo que Aron haría.
Y justo en ese momento mi mente divaga en una posibilidad que agarra fuerza y no lo dudo.
Él sabe algo más, algo me está ocultando ese imbécil.
Mi mente se llena de posibilidades ¿Se vieron a escondidas antes? ¿Mantuvieron comunicación? ¿Me engaña...
Siento el sonido de mi celular lo cual me saca de mis pensamientos.
Suspiro al ver la pantalla, es una videollamada de mi padre.
Deslizo la pantalla y mi padre aparece. Un hombre de cincuenta años que aún se conserva como alguien de treinta y algo. Conectó con sus ojos de diferente color.
- Hola hijo – sonríe.
- Hola papá ¿Cómo va todo?
- Espectacular – sonríe – Estoy pensando comprar alguna propiedad por acá, quiero venir más seguido a Ibiza.
- Claro obviamente solo con fines de bienes raíces. - ruedo los ojos.
- Te llamaba para confirmar tu presencia en la fiesta de hoy. Es la fiesta benéfica de la empresa y necesito a mis dos hijos bien parados en representación de su padre.
- Si claro, por si se te olvida yo vi lo de la organización. – ruedo los ojos.
- ¿Sí? – pregunta despreocupado – No importa, los quiero ahí como el rostro de la empresa.
- Si claro, no te preocupes.
- Hablando de eso quería pedirles por favor. - pongo mala cara al instante. - Consigan alguna pareja, esto de que sean los solteros más codiciados es bueno, pero tanto tiempo ya es extraño.
- Papá. - intento hablar, pero me corta al instante.
- Nada de papá, quiero ser abuelo en algún futuro y ustedes ni una novia me han presentado hasta ahora, ninguno de los dos.
- Seguramente Aron te sorprende con una novia un día de estos – suelto sin pensar y la sola idea me nubla la cabeza con mucha envidia.
- ¿De verdad? ¿Te ha contado algo? – mi padre se emociona – Por dios Asher no te quedes callado y cuéntame lo que sabes.
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Sin Conocernos
Novela JuvenilAparecieron en mi vida, y la pusieron de cabeza. Más de lo que ya lo estaba. Asher y Aron, mi jodida perdición.