Capítulo 2 | El beso

6K 472 33
                                    

Me gustaría decir que después de oír su nombre hablamos mucho o que le pedí su número, pero conmigo nada sale como yo quiero

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me gustaría decir que después de oír su nombre hablamos mucho o que le pedí su número, pero conmigo nada sale como yo quiero.

De la nada mi mamá llegó para irnos, apenas pude despedirme con la mano y él se me quedó viendo sin entender nada.

Nos fuimos e intenté olvidarlo, porque estaba segura de que no volvería a verlo.

***

Al sentir como un rayo de sol quemaba mis ojos supe que ya era hora de levantarme, tomé una ducha rápida y me vestí rápidamente con jeans, camiseta blanca, chaqueta de cuero por si hacía frío.

Mientras estoy arreglándome en el baño escucho el llamado de mi mamá.

- Dakota, llegarás tarde.

- Estoy lista - hablo bajando a la primera planta de mi casa.

- Yo te llevaré, tengo que ir a una reunión. - vale, eso significa que no habrá desayuno.

- ¿Y el descanso? - enarco la ceja un poco preocupada.

- No te preocupes por eso cariño - acaricia mi rostro de una manera tierna y salimos hacia la cochera.

De camino me dediqué a poner música y las dos cantábamos los coros.

Al llegar a la escuela me despido con una sonrisa y evito decir algo sobre el trabajo.

Mi escuela es bastante normal, grandes pasillos, varias plantas, casilleros. No tiene nada interesante.

Intento mantener mi vista en mi teléfono de camino a mi clase, no quiero ver a alguien.

Estoy ignorando a mi novio hace unos días.

¿Por qué?

Quiero terminar con él, pero no se como hacerlo y tampoco tengo una razón muy convincente.

Me alegro al ver que mi clase aun no comienza y voy en busca de mi mejor amiga.

Pero me quedo en blanco al notar la presencia de alguien en mi sitio.

Oh mierda.

- Asher. - suelto atónita.

Al verme levanta sus cejas con sorpresa, pero sonríe como si fuera su amiga.

- Dakota.

- Espera ¿Se conocen? - pregunta Alicia mi mejor amiga, que está al lado mirándome con el ceño fruncido.

- Si nos conocimos ayer. - Asher habla tranquilo.

- No, no nos conocemos - tomó asiento a su lado porque las mesas son compartidas - Sólo sabemos nuestros nombres. - aclaro.

- Por supuesto desconocida - me susurra muy cerca y rápidamente vuelve a apoyarse en su lugar - Alicia, me decías que tienes ascendencia Italiana - continúa hablando con mi amiga.

- Si toda mi familia materna es de ahí - mi amiga animada le habla. Yo tomo mi teléfono un poco nerviosa.

- Debe ser alucinante, pero ¿Y tu acento?

Ok es imposible no prestarles atención.

- No lo tengo porque aprendí italiano después, pero tengo un primo que si lo aprendió primero y habla un poco gracioso. - me remuevo un poco incomoda al sentir la mirada de mi mejor amiga sobre mi.

- Dakota. - llama mi atención Asher y lo vuelvo a ver - ¿Tu si eres local?

- Prácticamente. Nací en Suiza, pero crecí acá.

- ¿Sabes otro idio... - Asher no termina porque nuestro profesor entra y todos se enderezan.

- Bueno alumnos hoy tenemos un nuevo estudiante. - Asher se para y por fin puedo detallarlo.

Asher va vestido muy simple con unos jeans y una camiseta blanca.

- Él es Asher Vandervild, se acaba de transferir de otra ciudad y espero que lo hagan sentirse bienvenido. - Asher solo sonríe.

Con eso las clases continúan como si nada, ayudó a Asher con lo que no entiende porque ya estamos a medio año y no pasa nada interesante hasta que el profesor se va.

- Ahí viene tu novio - murmura Alicia volteando a verme y no me da tiempo ni de escapar porque Noah ya está al frente mío.

- Dakota, ayer te llame ¿Todo bien? - Noah sonríe y se agacha un poco para verme

- Hola Noah. - saludo tratando de evadir la respuesta. No le puedo decir que lo estoy ignorando.

Noah es mi novio desde hace un mes, al principio la idea me gusto mucho, pero a la semana ya estaba arrepentida. Él es uno de mis mejores amigos, fue un error comenzar la relación.

Lo quiero mucho, no lo quiero lastimar y mucho menos perderlo.

- Solo quería cerciorarme de que te encontrabas bien, ahora tengo entrenamiento.

No puedo continuar porque Alicia lo interrumpe.

- ¿Podemos ir a ver como entrenan? - me pide Alicia, ya que vive enamorada de Marco, uno de los chicos del equipo.

Noah se aleja y me da una sonrisa que transmite un: Te veo ahí.

Desvío la mirada y centro toda mi atención en Alicia.

- Alicia siempre vamos y cuando Marco se te acerca te echas para atrás, no es por ofender, pero tu táctica de coqueteo tiene fallas.

Alicia se ríe un poco, pero se levanta esperándome.

- ¿Las puedo acompañar? - al parecer Asher está bastante atento a lo que hacemos.

-  Ay si Asher, nos puedes acompañar y me ayudaras a darle celos a Marco ¿Qué te parece?

- No creo que eso funcione. - murmuro con gracia.

- No importa. Asher viene con nosotras, me cae bien y a ver si un amigo más nos ayuda a encontrar las palabras para que termines con Noah. Por el bien de tu salud mental. - ruedo los ojos y Alicia se aferra al brazo de Asher llevándolo al entrenamiento. Todo el camino le cuenta con lujo de detalles mi relación con Noah y un poco nerviosa los sigo, ignorando lo que ella dice.

Al llegar veo a Noah hablando con el entrenador y cuando me ve simplemente me da una sonrisa.

Nos sentamos en las gradas y continúan hablando, pero dejó de prestar atención.

- Dakota ¿Qué opinas? - Alicia llama mi atención, pero no tengo idea de que hablaban.

- ¿Sobre qué?

- Viste, es normal que esté distraída. No te asustes, si es una persona normal .

- Lo tendré en cuenta. - dice divertido Asher.

- Bueno voy a hablar con Marco, está descansando. - veo alejarse a mi amiga con dirección al chico sudado.

Se forma un silencio incómodo entre Asher y yo, así que empiezo a jugar con mis manos.

- ¿Y por qué no terminas con él?

Maldita Alicia.

- No sé cómo hacerlo y llevo más de un mes intentándolo, pero no llega el momento indicado.

- Momento indicado .- suspira y lo miro un poco confundida - El momento es hoy.

- ¿A qué te refie... - no me deja terminar porque se acerca rápidamente y toma mi mejilla acercándome más.

Y junta nuestros labios.

¡Maldita sea, me está besando! ¡Y me está gustando!

Sin ConocernosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora