Cap. 29: Derrota

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Cap. 29: Derrota.

(*) Quiero romper este hechizo que has creado

Eres algo hermoso, una contradicción

Saga no habló durante las siguientes horas, la almohada húmeda por su cabello mojado hacía resentir sus hombros entumidos, igual no había poder humano que le hiciera levantarse o moverse, en primer lugar, por el dolor en sus costillas y también, por la vergüenza de haber sido visto en aquellas condiciones.

Mu..., aquel nombre se le clavaba en la cabeza, sus recuerdos cada vez eran más vagos pero ese nombre retumbaba en su cabeza. ¿Ese chico era Mu? Sentía no equivocarse. No le parecía descabellado y, al contrario, se sentía cómodo con aquello.

¿Pero el recuerdo del accidente? ¿Importaba demasiado si no había sido real?

En algún momento de la noche, escuchó un móvil sonar... él no tenía el suyo, y Mu le había dicho antes que no tenía uno, sin embargo, desde la mesita de noche que ambos compartían, se veía una luz y se sentía una vibración.

— Tú teléfono está sonando. — Dijo, alzando la voz, la poca luz en la habitación no le permitió observar si "Mu" estaba dormido, le llamó varias veces y ante la falta de respuesta, intentó estirar el brazo para alcanzar el móvil. ¿Podría tratarse de Camus?

La llamada intensa que no se terminaba, dejaba de sonar unos segundos para volver a resonar y en todos aquellos intentos de Saga, Mu no hizo movimiento alguno en respuesta.

Entonces Saga alcanzó por fin el móvil, observó en la pantalla. "Shaka".

Serás la muerte para mí; no te dejaré enterrarlo

No te dejaré sofocarlo, no te dejaré asesinarlo

— Buenas noches...Shaka, ahora Mu no puede responderte, está dormido. ¿Deseas dejar algún recado?

— ¿Quién habla?

— Soy amigo de Mu, me llamo Saga... tu nombre me es familiar, ¿Me conoces? — Corrigió inmediatamente. — ¿Nos conocemos?

.*.

Mirar por el cristal, en el asiento trasero, empezaba a hacer frío, era tarde, el corazón se le estrujaba, muy internamente había esperado aquello, se lo merecía todo y aún no pagaba la cuota de sus errores.

El conductor le indicó que habían llegado. Camus viró un poco el rostro; agradeció, tomo sus cosas y caminó en dirección a la entrada.

Tal vez, sólo tal vez si rogaba demasiado podría haber algo de indulgencia aquella noche. Abrió la puerta y empujó con cautela, las luces apagadas le tranquilizaron y caminó un poco más deprisa, subió las escaleras de mármol, caminó hasta el pasillo de fondo y suspiró antes de entrar a su habitación.

— ¿En dónde estuviste hoy? — Entraba a la habitación completamente iluminada. Su padre descansaba la espalda en el respaldo de la silla de madera, a pesar de la hora, lucía impecable, con su cabello oscuro relamido hacia atrás y el cuerpo enorme cubierto con telas impecables. — Habla, maldita sea... no tengo a ningún mudo aquí.

Quería libertad, limitada y restringida

traté de renunciar a ti, pero soy adicto.

— Salí con unos amigos.

— No tienes amigos. — Respondió con ironía. — ¿Con quién mierda estabas?

De los males el peor; de las víctimas, la que menos importa.

— Con Saga, tuvo algunos problemas y me llamó para que le ayudara, una pelea callejera, creo.

— ¿Y ahora eres altruista? — Observó a su padre negar furioso, levantarse de la silla y abalanzarse sobre él. Le hizo caer al suelo y su cuerpo, no vio más, tomó una posición fetal para protegerse lo más que pudo. — Un idiota, es lo que eres.

"Sí de todas formas ibas a regresar con el idiota de tu padre, pudimos habernos evitado todo esto"

.*.

Dita observó a Shaka tirar el móvil al piso, estaba petrificado.

— ¿Qué te ha dicho? ¿Respondió Mu? — El rubio asintió, en su mirada azul un cumulo de dolor, aturdido estaba, no soportó mirar a Dita tanto tiempo a los ojos, rechazó su contacto y se recargó en la pared, para dejarse deslizar hacia abajo. — Me estás asustando, Shaka. ¿Mu está bien?

— Respondió Saga, está con Mu y Mu dijo que no le hablemos más. Que está arreglando las cosas con Saga y que le dejemos un tiempo tranquilo.

— Y Camus lo sabía. — Aseguró. Tenía mucho más sentido eso y todos los otros secretos que contar. — Tenemos que encontrar a Mu, ya sabes como es... seguro está metido en problemas y...

No puedes detenerlo gritando

¿Cómo se llegó a esto? Acabarás con mi vida.

— No... Dita. Esto se acabó.

¿Terminar? Por supuesto que no.

¿Por qué Shaka estaba tan afectado?

¿Por qué Camus les ocultaba tanto?

¿Qué había dicho Mu?

Shaka, necesito por favor que no marques por ahora, estoy haciendo algo diferente, quiero estar aquí, Saga me necesita y... voy a quedarme con él por un tiempo. Por favor..., déjame hacer lo correcto esta vez.

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|¤°.¸¸. ·'¯'» Doki Amare Peccavi «'¯'·.¸¸. °¤|

(*) Muse - Time is running out

Acaricia mi alma |BL| SAINT SEIYADonde viven las historias. Descúbrelo ahora