Capitulo Treintaiseis

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Se cumplieron 2 semanas desde que WanYin no despertaba, Wei Ying sentía tanto dolor que solo podía beber, realmente no había nada que se pudiera hacer, ya que pareciera que el joven loto, no quería despertar, era de esperarse, el dolor que le habí...

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Se cumplieron 2 semanas desde que WanYin no despertaba, Wei Ying sentía tanto dolor que solo podía beber, realmente no había nada que se pudiera hacer, ya que pareciera que el joven loto, no quería despertar, era de esperarse, el dolor que le habían causado no era cualquier cosa y eso atormentaba a su hermano mayor, quien solo se decia asi mismo: "es mi culpa".

Claro que no era su culpa, ni la víctima, ni la familia, es la culpable de que una persona pueda dañar a otra, nadie podía adivinar la crueldad de esa persona.

Camino en la calle con una botella en la mano, quería olvidar todo, solo por un instante quería dejar de sentirse como un inútil, que solo pensaba en sí mismo.

Se tropezó pero una mano lo tomó de la cintura, alzó la mirada para encontrarse con el rostro tranquilo de Lan Zhan ,sonrió para tocar su piel.

—Estás ebrio, te llevaré a casa. 

Wei Ying negó con la cabeza.

—Vamos a tu casa, no quiero ir a ese lugar, quiero por un día ser un cobarde, no quiero enfrentarme con el hecho de que mi hermano se niega a despertar

El corazón de Lan Zhan le dolía al ver a su amado de esa manera, tan herido.

Sin dudarlo lo llevó a su carro, donde le ayudó a subir y le colocó el cinturón. El joven loto solo se quedó en silencio, abrió la ventana para sentir el aire tocar su rostro, por lo cual pudo sentir cómo su cuerpo ebrio estaba relajado para quedarse profundamente dormido.

Después de varios minutos, pudo sentir como era tomado en brazos, la manera que Lan Zhan lo trataba era tan especial, era tan gentil y amable, que incluso era a cierto punto doloroso, porque él era una persona que se había acostado con varias personas, mientras le no importaba mucho el amor, ahora estaba enamorado de alguien que no solo era fuerte e inteligente, si no gentil, era una persona que sin necesidad de decir palabras dulces, podría demostrarte lo mucho que le importabas, como en ese momento donde era llevado en brazos, sin importar lo que pudieran decir de él.

Wei Ying fingió estar dormido, para sentir como el mayor luchaba para abrir la casa, pero aun quería ser egoísta una vez más, quería sentir el calor de su cuerpo, cuando lo abrazaba, como si fuera el objeto más hermoso sobre la tierra, su corazón se sentía dolido por todo que estaba pasando con su hermano, pero si pudiera solo pedir solo una noche, solo un momento de egoísmo, lo haría sin dudarlo.

Lan Zhan cerro la puerta tras de ellos y entro a su habitación donde dejo a Wei Ying, quito sus zapatos, fue por una toalla y un balde de agua tibia y limpio el rostro de el joven loto con delicadeza, mientras este fingía estar dormido, 

—Yo viví con odio y rencor —pronunció con voz baja mientras limpia ahora sus brazos —tanto que olvidé que era ser feliz, lo que era amar, hasta que te conocí, fue como si el destino se burlara de mí, estaba amando a quien debía odiar, pero aún así lo acepte, por lo que —sigue limpiando y su voz es casi un susurro en los oídos de Wei Ying que ahora estaba lúcido —por favor no llenes tu corazón de odio, se que amas a tu familia, pero el odio solo nublara tu corazón y no podrás ver más allá del odio.

EL CASO DEL LOTO MORADO ✔︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora