Capítulo Venticuatro

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Jiang Cheng no preguntó nada, podía desconfiar del mundo entero pero menos de su familia, así que jamás dudó en protegerlo, como Lan Xichen hacia con su hermano

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Jiang Cheng no preguntó nada, podía desconfiar del mundo entero pero menos de su familia, así que jamás dudó en protegerlo, como Lan Xichen hacia con su hermano.

La tensión se podía notar en el aire.

—¿Mi hermana? —preguntó

—No estaba, al parecer sabían que vendrían, había indicios de que alguien había estado ahí, pero que lo habían sacado antes de que llegáramos, no se si era tu hermana. —respondió Lan Zhan ante la mirada profunda de Wei Ying.

Wei Ying no hizo ningún gesto, los segundos parecían pasar más lentos de lo normal, entonces hizo un movimiento con su espada, a lo cual Lan Xichen no dudó en disparar.

Bam.

El sonido fue como un eco que retumba los sentidos de todos.

La sangre caía hasta el suelo, sonado en cada gota que era derramada.

Un silencio se produjo y la escena fue expuesta.

Cuando Lan Xichen disparó, Jiang Cheng se atravesó protegiendo el cuerpo de su hermano mayor, recibiendo el impacto de la bala en su brazo.

Wei Ying quien había movido la espada solo se quedó en silencio, la espada no tocó el cuerpo de Lan Zhan solo le había dejado una pequeña marca donde el filo había tocado su piel.

Lan Xichen miro todo, su mano temblaba, miró a su hermano menor quien no estaba herido, mientras que Jiang Cheng tomaba su brazo intentando que la sangre no fuera derramada.

—¿Lo vez ahora?

—No te entiendo —dijo Lan Zhan, quien aún seguía sin moverse

—No importa que seamos, no importa cuanto tiempo nos conozcamos, seguimos siendo los hijos de los clanes de la mafia, tu hermano no dudó en protegerte, no lo culpo, pero eso demuestra que incluso el pensó que yo te atacaría, a un hombre sin armas

—Creo que estas equivocado, no se que haya pasado a dentro...

—Toma —saco la foto de sus padres —Él es el hombre que le cortó el cuello a tus padres y ella es la mujer a la que tus padres abatieron, dándole 5 disparos, cuando protegía a una mujer sin armas —colocó en su funda la espada y se la dio a Lan Zhan —esta es el arma homicida

—Lo que ellos hicieron, no nos corresponde, solo fuimos víctimas de las circunstancias

—Por supuesto, por eso tu estabas en un bar perteneciente a los clanes, como aparecer a las orillas de mi clan, como tu hermano se acercó a Jiang Cheng, ¿por qué lo hicieron?, ¿para ser nuestros amigos?

—Tienes razón, lo hicimos para saber del clan pero lo que pasó después...

—No pasó nada Lan Zhan, solo te diste cuenta que el enemigo que perseguías, era tu rencor y a tu venganza, el hombre a quien querías matar, era el odio que tenías en tu corazón, bien te resuelvo el caso, mi padre y mi madre están muertos, el asesino de tus padres no es el líder, es el hombre en la foto y el arma es esa espada, fin del caso

EL CASO DEL LOTO MORADO ✔︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora