40.

413 68 206
                                    

"No lo mires a los ojos"

Esa advertencia por parte de Lemur en un comienzo le pareció estúpida; a un enemigo siempre hay que mirarlo a la cara especialmente a los ojos, para tener alguna pista de lo que piensa hacer, como piensa moverse, como va a hacerlo. Fue muy tonto de su parte creer que esta pelea seria como alguna otra que haya tenido antes, ese vampiro es poseedor de una fuerza abrumadora, de una agilidad a la que casi no podían seguirle el paso.

Para empeorar las cosas ni él o Aioria están  seguro si los mas de viente vampiros que tiene en frente son reales o solo producto del poder extraño de ese tipo de cabellos negros. Bien le advirtió su hermano y no lo abedecio, cuando debía hacerlo de verdad lo ignoro por completo.

- ¿Que sucede con ustedes? Me dijeron que dos cazadores venían tras mi cabeza por estar involucrado en la muerte de un sucio humano. ¿Saben? Por primera vez en años, desde que ese maldito niño me arranco un ojo, creí que tendría una buena batalla.

Mientras hablaba Hades daba vueltas, viéndolos con burla, disfrutando de su confusión al no poder diferenciar la ilusión de la realidad.

- Pero, solo estoy viendo a un par de mocosos asustados a lo que matare sin que se de cuenta. ¿Que tal si, ponemos las cosas más interesantes? Quiero jugar con ustedes dos un poco más.

Antes de que hiciera cualquier cosa Saga se aseguro se pegar su espalda con la de Aioria,  para estar preparados en caso de cualquier ataque cobarde. Aunque ninguno de los dos estuvo preparado para lo que les tocaría experimentar.

En un segundo el castaño tras suyo desapareció, y se vio rodeado por una infinita oscuridad, una que de alguna forma no se le hacia aterradora pero si le advertía que algo malo pasaría ahí.

- Aioria, ¿Donde demonios estas?

Daba vueltas tratando de encontrar al que fue su cuñado, también buscado alguna pista de Kokuto, a su querido halcón no lo veía desde hace mucho, rogaba porque este bien. De repente un voz que creyó jamas volver a escuchar se oyó detrás suyo.

- Tiempo si vernos, hermano.

Sintió que su cuerpo se paralizo en un instante. No quería girarse, sabia que de hacerlo correría a abrazar a su gemelo con fuerza, ¡Sin importarle que fuera una maldita ilusión! Con tal de tenerlo consigo de nuevo.

- Saga, ¿En verdad vas a ignorarme? - sintió la voz más cerca- Después de tanto tiempo ¿Y solo eso vas a hacer?, ¿Estas... enojado conmigo?

Su pobre corazón se oprimió cuando escucho el tono lastimero salir de su boca. Kanon rara vez hacia eso, era su ultimo recurso para que lo perdonara de cualquier estupidez que le haya hecho, y escucharla ahora de producto de una ilusión logro enojarlo mas que otra cosa.

-Saga, ven conmigo.

~•~

Aioria estaba en una situación similar solo que él repetía una y otra vez el momento en la que tuvo que acabar con la vida de su hermano, ver de una esa sonrisa de alivio, ver de nuevo como se le iba el único familiar que le quedaba. Lloro muchas veces, hasta que la ilusión cambio. Aioros ahora lo culpaba de su muerte.

- Si  no te hubieras alejado seguiria con vida,  no me habrías matado, y ahora mismo estaría en casa tal vez ya casado con Saga.

-Callate.

-¿Que sucede, no te gusta ver los errores que cometiste? De no ser por ti...

Cacería.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora