Cacería.

18.

Su fiel halcón nunca le fallaba y esta vez no fue la excepción, el ave dio dos vueltas en el cielo confirmando que encontró a sus objetivos, ahora solo debía seguirlo y encontraría a Milo junto a ese vampiro. Sabia que al utilizar a Kokuto le estaría prácticamente gritando a Lemur  que se escapo de la celda en la que lo quería "proteger" 

Sera su hermano mayor pero ya no cree que tenga la capacidad de proteger a nadie.   Mucha gente del pueblo desapareció sin dejar rastro, los casos de ataques de vampiros aumentaban en vez de disminuir, su propio gemelo murió frente a sus ojos sin que pudiera hacer nada, y su pareja protegiendo a su hermano menor de si mismo, se supone que a ellos también los tenia que cuidar. Fallo en su tarea más importante. Seguía sin entender como la gente del pueblo aún creía en él.

Ya apenas recordaba la ultima vez que fue feliz, la ultima vez que pudo estar con Kanon y Aioros al mismo tiempo.

"La ultima vez que los tuvo a ambos en el mismo lugar fue hace 11 años, cuando recién presentaba a  Aioros antes sus hermanos como su pareja. Lemur le dio una mirada de odio primero para despues simplemente suspirar y aceptar que sus hermanitos estaban creciendo, tal vez  mucho más rápido de lo que a él le gustaría. Kanon en cambio, lo miro de pies a cabeza, casi parecía que se lo quería comer vivo.

Cuando el mayor de los tres los dejo solos por una urgencia en la Iglesia no tardo nada en ponerse en  modo "gemelo celoso"

-¡Escúchame, caballo con torso de persona!- lo tenia tomado de la camisa, acercandolo a su rostro para intimidarlo.

- ¡Kanon! ¿Que te pasa?

- No te metas Saga, déjame pasar tiempo de calidad con mi cuñado.- le sonrió.

Era esa sonrisa que decía "te acercas y te muerdo"  retrocedió un paso, no quería ser atacado por su gemelo ese día. Aioros lo vio con sorpresa. Quiso reírse.

- Escuchame mocoso. Sé que parece que no me preocupa lo que le pase a mi hermano pero es todo lo contrario. Pobre de ti si lo veo llorar por tu culpa.

Lo soltó de golpe, dándole una ultima mirada amenazadora, para luego sonreírle con burla, logro justo lo que quería.

- ¿Recuerdame a quien saliste tan salvaje?

- ¡A mamá! "

Quien iba a pensar que extrañaría tanto sus estupideces, esos momentos que se preocupaba tanto por cualquier cosa que le pasara, Kanon parecía el mayor y no al revés.

Kokuto pasándose en su hombro lo saco de sus pensamientos. Por mucho que los extrañara debía concentrarse en la cacería que ahora se estaba realizando. Ya tenia la ubicación de su presa, ahora solo debía encontrarla y evitar a su hermano mayor en el camino.

" Se avecina una masacre..."

Rió despacio mientras echaba a volar a su mascota de nuevo, la que entendió el mensaje y lo guió entre el bosque.

~•~

El bosque nunca fue un lugar seguro y ahora lo era mucho menos, Saga y Lemur le pisaban los talones. Tenía el presentimiento de que se los encontrarían  en cualquier momento y la cabaña que les serviría de refugio estaba muy lejos aún.

Los cuatro pensaban una manera de escapar o esconderse, incluso en una forma de distraer a los cazadores para que los demás pudieran escapar y volver a reunirse más tarde. Milo sabia que lo buscaban a él y a Camus, Kardia y Dégel no tenían nada que ver en esa persecución y solo se ponían en peligro al acompañarlos. Debía encontrar una forma de ponerlos a salvo a los tres.

¿A los tres?

Recién se daba cuenta, ¿En que momento ese par de vampiros dejaron de representar una amenaza como para pensar en protegerlos? Negó no tenia tiempo de pensar en eso. Se detuvo de repente viendo a los tres más decidido que nunca.

- Escuchen.- quito el peso extra que traía- el sacerdote me busca a mi, cree que soy un traidor por liberar a un vampiro, tal vez lo sea pero ese no es el punto; yo lo distraere,  ustedes vayan a la cabaña lo más rápido que puedan, prometo verlos ahí.

No les dio tiempo a responder, de hecho solo escucho su nombre salir de la boca de Kardia con un tono preocupado. Era mejor así, solo uno debía arriesgarse.

Alguien tomándolo de la mano y aferrándose a su espalda lo detuvo. Creyó que seria su hermano pero vio su error cuando se topo con los cabellos rojos. A los lejos sus hermanos los veían sin saber que hacer. Se quito su abrigo para darselo a Camus y evitar que el sol le llegara.

- ¿Que crees que haces? ¡Vuelve!

- ¡No, ¿Tu que haces!?- lo vio directo a los ojos. Ese par de ojitos rojos lo miraban con una preocupación genuina, sintió algo en el pecho.- ¡Nos buscan a los dos ¿o se te olvida!? Si te vas a arriesgar a lo loco ¡Yo también! Escape gracias a ti. Estoy aquí aun por ti ¡Ahora te aguantas!

Esa nueva faceta que descubrió lo sorprendió. ¿Hace cuanto lo conocía?, casi un mes o puede que menos, pero debía admitirlo; de alguna u otra forma el odio inicial que sintió por él se estaba yendo y siendo reemplazado por otro más que no sabia como identificar.

Bufo molesto. ¡Quería protegerlos y él se arriesgaba solo!

- Pueden matarte.- volvió a decir tratando de converselo.

- A ti también. Y no lo intentes, no me harás cambiar de opinión.

Camus tomo fuerte el abrigo que lo protegía del sol para acomodar la capucha sobre su cabeza. Si ese cazador lo creía una persona incapaz de arriesgar su vida  estaba loco. Ademas algo dentro suyo le decia que si lo dejaba ir solo algo muy malo pasaría.

Le hizo una seña con la mano a sus hermanos. Dégel entendió que nada los haría cambiar de opinión, solo podía esperar que todo saliera bien.

🔥

¿No sienten como que algo malo va a pasar? 😓

ScorpioNoMilo.💕