Tales of Cadah |#4| © TERMINADA

DS. Preferencias

«17 años»

A pesar de sentarse junto a él desde que iniciaron la preparatoria, eran pocas veces las que Patrick podía conversar con Xia Yuan, de hecho no hablaban más que un saludo cortés de buenos días por parte del chino. Desde hacía tiempo que Patrick se sentía extraño al tener el mínimo contacto con él y por eso prefería alejarse.

—¡Patrick! Ya publicaron las listas de los mejores de las clases.

—Ajá –dijo sin interés. Phoenix lo miró preocupada –¿Qué pasa?

—Estás en segundo lugar.

—¿Qué? –preguntó confundido.

No es que le molestara, al contrario, no le importaba pero era extraño que nadie lo hubiese rebasado hasta ese momento.

—En primer lugar está... –se detuvo al ver a alguien entrar al salón, la chica castaña siguió a la persona con la mirada hasta detenerse justo detrás de él, entonces Patrick se giró para ver a Xia Yuan quien le sonrió cómo siempre.

—Buenos días, Patrick. Hola de nuevo, Phoenix.

—¿Pero quién te crees tú qué eres? –Bramó Jocelyn entrando al salón. Caminó hacia el joven que la miró imperturbable –. Nadie puede superar a Patrick, él es el mejor de toda la escuela ¿Cómo te atreves a quitarle el primer lugar?

—Jocy, basta –dijo Evangelyn a estirándola del suéter del uniforme, pero la chica seguía insultando a chico qué cada vez se encogía un poco y bajaba la mirada con tristeza.

—Jocelyn –todos miraron a Patrick –. Es suficiente, déjalo en paz.

—Pero él...

—Dije que es suficiente –sentenció, algunas chicas suspiraron enamoradas ante la seriedad, elegancia y autoridad que pocas veces utilizaba. Se levantó y se colocó a un lado del chino –. Felicidades por obtener el primer lugar, Xia Yuan. Sé que es algo difícil de conseguir, no te preocupes por lo que los demás puedan decirte, te lo mereces –le sonrió con amabilidad y sinceridad, dio la vuelta y tomó a su amiga del brazo para sacarla del salón.

—¿Qué diablos acaba de...? Espera... Gabriel está... ¿Sonrojado? –al escuchar eso, el joven inmediatamente se sentó y bajó la mirada a su cuaderno, pero los murmullos continuaron. Respiró profundo e intento ignorarlos lo mejor que pudo.

Patrick soltó a su amiga en un pasillo alejado del salón.

—¿Serías tan amable de explicarme qué rayos te sucede? ¿Cómo pudiste ir a gritarle así?

—Patrick, ¿no lo entiendes? Tu mereces ese primer lugar, eres el más inteligente. No puedes dejar que un maldito chino venga y te arrebate ese puesto.

—En primera, no lo llames así. En segunda a mi jamás me ha importado ese lugar, es más, hasta he rogado por no tenerlo –ella lo miró como si hubiera dicho que le gustará la carne de extraterrestre – ¿Porqué te molesta tanto?

—Te está robando popularidad.

—¿Y eso qué tiene que ver? Él es listo, alto, atractivo, es amable y se nota que puedes confiar en él.

—Alto. ¿Acabas de decir que Gabriel Ryong es atractivo? –Patrick se extrañó y el color rojo se apoderó levemente de sus mejillas.

—¿Yo? Claro que... Claro que no... ¿O si?

—Eso creo, la verdad no te escuché muy bien –Patrick movió una mano para restarle importancia.

—El punto es que a mí no me importa si él es popular o si obtiene el primer lugar de la generación. Y si a mi no me importa, a ti tampoco debería importarte.