Tales of Cadah |#4| © TERMINADA

ESPECIAL

Como soy esa chica loca obsesionada con MARVEL, se me ocurrió hacer un especial llamado:

What If...?

¿Qué pasaría si Ale recibiera el trasplante antes de su muerte?

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Durante la noche, el príncipe Nathaniel tuvo un ataque, está vez más fuerte que antes. Azura salió corriendo mientras gritaba por ayuda hasta que los guardias especializados y un par de doctores entraron en la habitación.

—Azura ¿Qué pasa? –preguntó la reina Sylvia al llegar a la Estancia.

—Ale tuvo otro ataque... –justo en ese momento el doctor Brown salió de la habitación y fue directamente hacia ellas.

—El príncipe se encuentra en estado crítico. Debe ser trasladado al hospital del reino lo más pronto posible.

Ambas mujeres se miraron a los ojos debatiéndose en tomar la decisión, finalmente la mayor se irguió y asintió.

—Adelante.

Una alerta comenzó a sonar y los empleados prepararon todo lo necesario para trasladar al joven príncipe al hospital del reino.

—Zuri ¿Qué es lo que...?

—Estamos yendo al hospital con Ale, Mark –el pelinegro asintió y corrió a cambiarse la pijama al igual que la princesa.

En cuanto Ale llegó al hospital fue inmediatamente atendido por los especialistas e internado en una habitación especializada. Mientras tanto, en la sala de espera, la reina Sylvia estaba aparentemente impasible sentada en uno de los sillones con la espada recta, Azura estaba a su lado agitando levemente su pierna pero Mark caminaba de un lado a otro con nerviosismo hasta que el doctor apareció.

—Majestad... Logramos estabilizar al príncipe, pero su estado aún es muy delicado. Si no realizamos el trasplante, morirá en las próximas horas.

Azura dejó correr sus lágrimas pero Mark se colocó aun lado de ella para consolarla.

—Mi nieto fue bastante claro en no dejar que algún paciente muera para salvarlo.

—Reina Sylvia... Hay un paciente con muerte cerebral que puede donar su corazón –los jóvenes dieron un paso al frente.

—¿Qué? ¿Pueden salvar a Ale?

—Un joven tuvo un accidente automovilístico, tiene muerte cerebral. Su familia estaba aquí cuando el príncipe llegó y ellos propusieron donar el corazón del joven para salvar al príncipe Nathaniel. Solo si ustedes lo autorizan.

—Hágalo.

—Azura, espera. Ale dijo que...

—Nada de espera, Mark. Ale no tiene tiempo para que esperemo, debemos salvarlo –Azura lo miró seriamente, pero inmediatamente giró su vista al doctor –. Soy su esposa y yo autorizo que realicen la operación.

—Si, majestad –hizo una reverencia y salió de la sala de espera.

—Azura, a Ale no le va a gustar esto.

—Reina Sylvia, existe la posibilidad de salvarlo sin tener que sacrificar a nadie más ¿Por qué no aprovecharla?

De pronto, Mark se alejó de ella y caminó hacia la ventana donde se quedó mirando hacia afuera por el resto del tiempo de espera.

Horas más tarde, el joven abrió sus ojos un poco extrañado y confundido. Estaba en una habitación de hospital. Evaluó el lugar hasta detenerse en la máquina que detectaba los latidos de su corazón.