Desde el momento en que supe que el tal "Ale" que había abandonado a Azura a su suerte hace años, era el actual príncipe heredo, lo odié. Aun más por haber hecho que Azura me dejará a mi, y eso me ocasionó una de las peores recaídas que he tenido. Sin embargo, una noche el vino a verme.
—Me gustaría hablar con ustedes. Si lo desean así, claro.
Siempre me había contrariado la forma de hablar de los ingleses, ahora este tan propio y elegante solo hacia que me diera vueltas la cabeza. Jack asintió.
—Podemos hablar a fuera, alteza –dijo y los tres salimos de la casa.
—Bien, ¿de qué se trata? –Bajé los escalones hasta estar frente a él pero me sorprendió que Jack se quedara recargado en la puerta con los brazos cruzados.
—Me imagino que tu lo sabes, Jack ¿No es así?
—Azura me lo dijo cuando estuvo aquí, pero Mark debe saberlo –los miré totalmente confundido.
—Mark, debo explicarte porqué le pedí a Azura ser mi esposa.
—Te escucho –el príncipe respiró profundo y aunque hizo una sutil mueca de dolor se irguió.
—Hace muchos años fui diagnosticado con una rara enfermedad que me ha impedido hacer muchas cosas a lo largo de toda mi vida. Cuando conocí a Azura en la primaria y me di cuenta su situación económica y de desprecio por el reino, quise ayudarla, quería que no volviera a preocuparse por eso jamás. Los directivos la iban a expulsar por el simple hecho de llamarse "Azura". Así que hablé con mis padres y pagamos la educación completa de primaria, secundaria y preparatoria de ella –lo miré sorprendido –. Ella tomaría mi lugar en la escuela para poder seguir estudiando, mientras yo... debía viajar a España para el tratamiento adecuado de mi enfermedad. Sabía que aunque volviera, la situación con ella y su familia, no cambiaría, a menos que ella fuera una princesa. Mark, desde que te conocí, yo en verdad no esperaba que ella fuera aceptar.
—Pero lo hizo... –murmuré.
—Si. Y en verdad me siento mal por ti, Mark.
—No tienes que hacerlo, fue decisión de ella. Sé que tu le diste también la opción de no aceptar.
—Lo hice –suspiró –. Mencioné que padezco una enfermedad –asentí –. Es una enfermedad terminal, me quedan solo unas semanas de vida.
Mi mandíbula casi cae hasta el suelo al escuchar eso, pero rápidamente comprendí porque Azura se veía tan mal y triste. Sonreí un poco.
—Ahora entiendo porque eres tan amable –él se sorprendió, pero también sonrió.
—No hay que estar a punto de morir para serlo, pero admito que ha influenciado gran parte de mi vida –reímos un poco –. Mark, mi muerte es inevitable y eso no es algo que me preocupe, estoy preparado para ello. Pero... Necesito un heredero y creo que tu serías un excelente príncipe y rey.
—¿Qué? Pero, Azura es tu esposa y princesa ¿no debería ser ella quien tome el trono?
—Aun leyes que prohíben que una mujer sea reina sin tener un esposo y creo que tu podrías tomar mi lugar.
—Pero, yo no sé absolutamente nada sobre ser siquiera ser elegante y eso Jack te lo puede confirmar –vi que mi mejor amigo asintió –. ¿Por que yo? ¿Qué no hay otros príncipes en la línea?
—Los hay, duques y príncipes de otros reinos, pero ninguno eres tu. Mark, nadie conoce y ama a Azura como tú lo haces. Yo la aparté de ti, ahora quiero compensarte y que vuelvas a estar con ella –bajé la mirada y estruje mis manos.
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Tales of Cadah |#4| © TERMINADA
Teen FictionUn libro de cuentos o pequeñas historias sobre los personajes de la saga "¿Princesa?" ANTES, DURANTE y DESPUÉS de la saga. ADVERTENCIA: Si no has leído los primero tres libros, no leas este. Puedes hacerte spoiler. ORDEN DE LA SAGA: 1. ¿Princesa? 2...