Babi Store | Minsung

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Ya iba de vuelta a casa.

Le recetaron tan solo dos medicamentos e indicaron cómo debía cuidar la herida para que sanase rápido, evitando que se infecte.

Ahora estaba en el auto de Changbin, este conduciendo mientras Seungmin y Jeongin dormían profundamente en la parte de atrás.

—¿Irás a clases mañana?— Preguntó el menor a su lado de pronto.

—Sí, tan solo tengo salud dos horas, así que podré volver luego sin problemas

Seo asistió y pronto bajó la velocidad del carro cuando estuvieron fuera de la casa del mayor, parando por unos segundos y Minho despidiéndose solo de él, porque los otros dos, seguramente, ya iban en el quinto sueño.

Introdujo las llaves en la reja principal y luego se aseguró de cerrar bien, haciendo lo mismo luego con la puerta. Y apenas sacó sus zapatos, pudo notar al pequeño rubio parado frente a él, jugando con sus manitas, no muy seguro de acercarse.

Pero dejó esa ansiedad de lado cuando el más alto colgó todas sus cosas en el perchero , yendo hasta él para tomar su cintura y abrazarlo suavemente, sintiendo sus bracitos rodear su cuello.

Sí, quizás sólo había sido un día, pero Jisung aún dependía mucho de Lee, no podían culparlo por extrañarlo como si hubiesen pasado dos meses.

—¿Está mal que lo haya echado tanto de menos?— Susurró el menor en su pecho.

—No lo creo— Sonrió, alejándose tan solo un poco, sin dejar de estar unidos.

Y Minho se tomó el atrevimiento de poner sus dedos en la barbilla ajena, acercándolo y depositando un dulce beso en sus labios.

Se alegró todavía más cuando, al separarse, pudo notar como las mejillas impropias se habían sonrojado por completo, incluyendo la punta de sus orejitas.

—Iugh, cursis

—Habla el que el otro día subió un video casi tragando la lengua de Jeongin— Molestó Minho.

—Es distinto, no somos cómo ustedes— Alegó, cruzando sus brazos.

—Cómo digas

Al cabo de unos minutos, Hyunjin ya se había devuelto a su casa, y ahora el castaño estaba recostado en el sofá grande con el menor encima suya, tan solo abrazándose y robándose pequeños besitos de vez en cuando.

Jisung se sentía en paz cada vez que estaba con él.

—Estás al tanto de que mi papá vendrá el domingo, ¿cierto?— Preguntó entonces, Han asintiendo ante ello— Bien, uhm... hablé con él ayer y me dijo que mi mamá también quiere venir otro día acá... junto con mi hermana

Han perdió la expresión en su rostro.

No hace mucho habían hablado de lo mal que ella trataba a Minho, de lo pésimo que le hizo sentir al rechazarlo con tantas malas palabras cuando se enteró que era bisexual. Ella no era una buena persona, ¿por qué tenía que venir? No quería ver a su Hyung de mal humor por su culpa.

—Pero ella...

—Sí, ella no está de acuerdo con mis gustos ni mi forma de vida, créeme que no podría importarme menos— Dijo con sinceridad—. Voy a hablar con mamá para hacerle entender que no quiero ver a Seohee

—¿Qué pasa si no lo logra?

—Hyunjin dijo que siempre va a tener espacio para ti cuando lo necesites, ¿de acuerdo?

—Pero yo quiero estar con usted...

"No quiero volver a alejarme de la persona que me salvó".