Capítulo 12

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POV RYAN

Me levanté del sillón observando a Alisson y mi amigo y me dirigí a la barra, una vez allí cogí mi móvil para llamar a la policía.
Al primer tono después de varios segundos contestaron.

—Hola buenas noches, aquí el agente Parker, ¿En qué puedo ayudarle o ayudarla?

—Hola buenas, disculpe las horas pero necesito que vengan a la discoteca Pinkus calle santiago de santo primer edificio, es una urgencia.

—¿Y cuál es el problema señor...?

—Ryan,me llamo Ryan, un chico acaba de drogar una chica y se la está llevando a una habitación, es un hombre peligroso que trabaja en los campos ilegales de marihuana a las afueras de California.

—Vale gracias caballero, enseguida estamos allí, no se preocupe y vigila de que no se la llevan a otro lugar— dijo el agente Parker y colgó la llamada.

Ahora debo avisar a Alisson de que ya viene la policía así que tendrá que entretener a Brian por un tiempo.

Joder lo siento mucho Alisson

Alissonシ︎

—La policía viene en camino pero debes aguantar unos minutos por favor.

POV ALISSON

Llegamos a una habitación grande con un baño, las paredes eran grises, hay varias estanterías con cosas antiguas, parecía un trastero,también hay un baño el cual Brian entró y justo me llegó un mensaje al móvil, era de Ryan diciéndome que aguantara que la policía llegaría ya.

Supongo que aguantar sería seguir coqueteando con él y hasta besarlo, yo solo espero que lleguen pronto para no hacer ninguna de esas opciones.

Brian salió de la puerta del baño y se dirigió a mí con una sonrisa malvada de esas películas que el asesino se acerca a su víctima, pues en esa situación estoy yo pero no exactamente.

Al estar enfrente de mí le sonrío falsamente y este me empuja a la pared de atrás mía obligándome a poner mis brazos a cada lado de mi cabeza y este las sujetaba con una mano, empieza a besar lentamente mi cuello saboreandolo y oliendolo, yo solo estaba inmóvil rezando para que vinieran ya a "rescatarme" de este ser repugnante.

Brian aún besándome el cuello, empezó a tocar mi piel con su otra mano libre bajandola hasta por debajo de mi falda, una lágrima se desliza por mis mejillas y cada vez iba a peor.

Estaba apunto del llanto hasta que escuché varios pasos detrás de la puerta por el pasillo. Brian seguía a lo suyo pero se paró al notar que le cayó una lágrima mía en su cuerpo,dejó mi cuello para mirarme y quitó su mano de abajo de mi falda para llevarla hasta mis mejillas para limpiar las gotas que tenía.

—No llores bonita, no te va a pasar nada, solo vamos a jugar y mañana se te olvidará— sonrío de lado.

¿A jugar?  Se puede ser más gilipollas

De pronto se escuchó varias voces más detrás de la puerta,esta cayó al suelo gracias a la patada de un hombre de unos cuarenta años, alto, moreno, fuerte, con un brazo entero tatuado,tenía una placa de policía en su ropa y abajo había una chapa con un nombre: parker, llevaba en sus manos una pistola apuntándonos, atrás de él se encontraban cuatro hombres más y al fondo localicé a Ryan, sonreí tristemente para mi misma al verle ahí paralizado con cara de asustado.

—Manos arriba y suelta a la chica— dijo el tal Parker.

Brian le hizo caso y retrocedió varios pasos mientras maldecía cosas en voz baja, una vez lejos de él, fui corriendo a Ryan, pasé la puerta apartando a los policías y al verle le abracé fuertemente, este se tensó por cinco segundos por mi repentino gesto pero después me correspondió el abrazo rodeandome con sus brazos.

—Lo siento mucho, marquesita, yo no quería esto...— susurró en mí oído mientras acariciaba mi pelo con su mano.

Lo miré sonriendo con una mirada de "no pasa nada" y volví a mirar aquel trastero. Los policías entraron todos a la habitación y registraron al pervertido y el lugar por si encontraba más cosas allí.

Al parecer tenía varios kilos de éxtasis, marihuana y cocaína, todas ellas metidas en unas bolsitas que se encontraban en sus bolsillos del pantalón.

Brian dijo que no eran suyas que eran de su amigo Ryan, increíble ¿no?, obviamente no les creyó porque Ryan fue quien los llamó. El agente Parker le empujó contra la pared y le puso las esposas, una vez puestas hizo la famosa frase de las películas.

—Tiene derecho a permanecer en silencio. Cualquier cosa que diga podrá ser utilizada en su contra en un tribunal. Tiene a la asistencia de un abogado durante su interrogatorio. Si no puede pagarlo, se le asignará uno de oficio—le explicó llevando a Brian a la salida, cuando vio a Ryan le dio una mirada de asesino y siguió con su camino. Un policía se giró a mi y me habló.

—¿Estás bien señorita?—preguntó

—Sí, estoy bien, un poco cansada y asustada pero gracias por preguntar— le respondí intentando sonreir.

—No hay problema, joven— se volteó a Ryan—¿la lleva usted o nosotros?

—No se preocupe señor agente, yo la llevo a su casa sin ningún problema— puso su mano en mi hombro.

—Esta bien, buenas noches—levantó y bajó su gorra antes de darse la vuelta e irse.

Volví mi vista a mi vecino, el cual al mirarme vi un destello de brillo en sus ojos.

—¿Podemos irnos?—le hice un puchero—estoy cansada.

—Vale, pero no vuelvas a hacer eso— sonrió de lado.

No se que me pasaba con Ryan pero a veces es un Ángel y otras un Demonio, es como si tuviera dos caras totalmente distintas, una es un chico amable, agradable,que me hace reír y otras veces insoportable, idiota, imbecil y egocéntrico.

Salimos del edificio y pude ver como el coche de policía se iba alejando, la calle estaba igual que cuando llegamos pero hacía más frío y los árboles parecía que iban a salir volando en cualquier momento gracias al viento. Divisé la moto de Ryan a lo lejos y nos dirigimos a ella.

(...)

Cuando por fin llegamos a la calle de nuestras casas nos bajamos del vehículo, nos despedimos y cada uno se fue a su casa.

Al abrir la puerta pude ver que mis padres habían llegado del viaje ya que tenían sus maletas en la entrada y más cosas pero supongo que las han dejado allí para recogerlas por la mañana porque las luces estan todas apagadas.

Subí las escaleras,me dirigí a mi habitación y después al baño, una vez duchada y limpia me puse una camisa larga sin nada más porque hacía calor en mi casa y me fui a mi cama no sin antes saludar de lejos a Ryan que estaba en su habitación pero me metí rápidamente en mi cama al recordar como voy vestida...

Al tumbarme me dormí profundamente soñando que era millonaria y tenia una mansión y un marido cachas y dos niñas preciosas.

Ojalá se hiciera realidad...

Capítulo editado

Mi Idiota Vecino✔️[COMPLETA] (EN EDICIÓN) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora