Amanece, el rayo de sol que traspasa la ventana me pega justo en el rostro. Zack esta despierto, me abraza por detrás mientras acaricia mi hombro.
¿Podría estar tan feliz como para olvidarme de todo? Podría ser, pero, no era lo correcto. Además, jamás podría olvidar a Dylan.
Me levantó—Iré a despertar a Daniel—Le digo, interrumpiendo el instante.
El asiente y se queda acostado, lo mejor era descansar un poco, ante un día que sería una completa pesadilla.
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—Tenemos que irnos—sus palabras quedan al aire, bosteza y luego me observa.
Me he levantado temprano, ya estaba listo para cualquier cosa.
—Me impresionas—susurra y vuelve a bostezar. Luego, se va.
Pasan diez minutos, aún sigue siendo una mujer rápida.
—¿A dónde vamos?—Le preguntó. Tiene grandes ojeras.
Suspira—Debemos perseguir a Annie, Salvatore asegura que algo trama—Susurra, aún tiene sueño.
Asiento y reviso mi celular, ha llegado el mensaje, ha llegado la hora. Aún así, Annie era más importante.
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Llevó la cámara en mi cuello. Estamos listos luego de que Daniel decidiera colaborar y levantarse. Mónica nos ha prestado su auto de lujo, nos ha deseado mucha suerte, aseguró que íbamos a necesitarla.
—¿Es una sonrisa lo qué veo?—Me dirijo a Zack. Envidiaba de una forma positiva que estuviese recuperando su brillo, yo solo fingía el mio, lo cual iba a desgastarme poco a poco. No negaba que podía llegar a ser feliz, pero, solo por instantes.
Asiente ante mi pregunta. Me alegra volver a verlo sonreír, aún así, sentía inseguridad de que algo malo pudiese acabar con esa alegría.
Se estaciona en un lago francés con estructuras, es una zona turística, lo recuerdo de niña, de las pocas cosas. Hay un grupo de dos familias paseando en los pequeños barquitos. Daniel está emocionado, descubrir cosas diferentes despierta su alegría.
Zack le compra golosinas antes de subir, agradece diciendo su nombre, no se atreve a decirle papá. Aún así, Zack lo acepta, solo le importa ganarse su amor poco a poco.
El viaje en el agua es tranquilo, desearía que nos llevará a otro país, lejos del sufrimiento y la maldad. Zack me da un tierno beso en la mejilla. Le he prestado mi cámara a Daniel, captura el momento exacto del beso. Agradecía tener recuerdos de esta vida, del ahora, solo porque la vida sigue, solo porque los recuerdos son los que quedan, después se todo.
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Annie Jones.
Mystery / ThrillerNo es justo que tu corazón se destrocé por una persona que tiene el corazón completó sin ti. Ha sido uno de los consejos más sabios que me acompañan en el recorrido de la vida, apenas la he comenzado. Después de conocernos tanto, volvemos a ser extr...