La noticia le cayo como un balde de agua fría, pensó tanto que la cabeza iba a estallarle pero simplemente decidió desconectarse y aislarse, Sanji quedo extrañado por su comportamiento, por lo menos pensó que se emocionaría, que diría estupideces y así calmarlo, pero fue lo contrario.
-Déjalo, quiere estar solo- Mihawk mostraba una postura tranquila e incluso preparo café. Con el niño en brazos y la culpa a flor no podía evitar pensar ¿Qué hizo mal? El pequeño estaba tranquilo y no había perturbado la paz de esta casa -viniendo de ti Roronoa, me sorprende-
¿Estaba siquiera sorprendido? Tenia la misma cara de siempre.
De golpe tuvo un chispazo -se llama Aoi- se lo mostro -¿le gustaria?-
Miro al niño tan fijamente que lo puso nervioso -no es mala idea, pero preferiría no hacerlo- no comprendió sus palabras y la mano de Zoro en su hombro le hizo entender que se estaba metiendo en un terreno lodoso.
-Supongo que vivirán juntos y lo criaran ¿verdad?-Waaa, lo supo en un segundo y por alguna razón se sentía avergonzado -Roronoa ¿Qué has decidido hacer?-
Sabia a donde iba el punto -Sanji trabajara y estudiara, yo lo cuidare-
Sonaba tan patético, del más temido a un simple niñero, el amor le hizo caer tan bajo que no se podría mirar, un amor demasiado fuerte que reconocía -entiendo-
Nunca recriminaría sus acciones, porque eso lo llevo a ser quien es y aunque le sea dificil de admitir lo apreciaba en demasía, era como su hijo y Shanks sentía lo mismo, pero ver esto ah sido un golpe muy duro para el pelirrojo.
-Iré a la cocina- necesitaba algo de alcohol.
Apenas el peliverde desapareció de su vista una duda lo rondaba e hizo ameno de levantarse e ir tras el pelirrojo, quería hablarle y saber, no quería guardar silencio.
-No lo hagas- miro el fondo de su taza -sera peor-
-Pero…-
Suspiro, aquellas palabras volvían a su mente, la resignación y humillación del pelirrojo lo golpeaba como bofetadas -el me ama, pero se culpa por no haberme dado un hijo- sus cachetes se sonrojaron, desconocía el anhelo de un niño -cuando nos comprometimos…-
Oh dios, en un principio todo era miel sobre hojuelas, tan maravilloso que no pensó en los obstáculos, pensó que todo brillaría siempre, el amor lo hizo ingenuo.
-No puedo seguir contigo- le entrego el anillo sin comprender, fue algo tan duro de escuchar -perdóname-
¿Perdonar? ¿lo estaba dejando a razón de que? Estaban rompiendo algo de tantos años y tanto entusiasmo, nunca insistía, pero esto no podía dejarlo pasar, era inaudito que viniera con un rompimiento de golpe
-No te iras hasta que me des una explicación-
Dolía, que lo sujete de esa manera tan desesperada -no me satisfaces- si quería que se alejara solo necesitaba dañar su hombría, a todos les afectaba -ah sido aburrido últimamente ¿Por qué debería de gastar mi tiempo contigo?-
-Porque eres malo mintiendo-
-¡¿Yo miento?! ¡¿tanto te cuesta oír la verdad?!-
-¿Porque te cuesta decirla?-
Sabia que seria en vano tratar de idear el rompiendo porque era imposible, amaba tanto a este hombre, lo amaba desde que eran unos mocosos, tanto que dolía este momento, lo era todo pero no podía quitarle su sueño -eres terco, tan terco que te odio-
-Tu también eres terco- quiso zafarse de tal fuerza pero era imposible -pero aun así te amo más que mi vida, Shanks…- acuno su mejilla -¿Qué pasa?-
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Vidas enlazadas
RomanceEl grupo suicida era reconocido como el más temido del ejercito, Zoro quien integraba uno de los cargos se retiro llevando una enorme carga. Sanji es un completo descarriado que solo mira su propio ombligo y no se preocupa por nadie. Ambos se cruzan...