-George, tú sabes que quedó muy en claro que esta salida sería solo como amigos y nada más, no puedes decirme eso aquí y justo en este momento- dije indignada.
- ¿y cuándo querías que lo dijera?, ¡es lo que siento Zoe!, no puedo ocultarlo más y tú lo sabes de sobra- esto se estaba volviendo incómodo para los dos y me estaba entrando un enojo, pero debía estar tranquila y no desquitarme con él.
-está bien George, pero hablemos esto en otro momento, cuando estemos los dos solos y no esté Paris, ni Quetzal, ni nadie, ¿entendiste? - mencioné observándolo fijamente.
-totalmente- dijo de modo resignado.
-bien, volvamos y que no se hable más del tema por hoy- pronuncié para volver a entrar al restaurante, me di cuenta que los chicos ya no estaban en la mesa, sino que estaban pagando, me acerqué a ellos y dije que podía ayudar a pagar pero se negaron, salimos los cuatro de aquel lugar y Paris mencionó que se iría con Quetzal a su casa, que terminarían de pasar la tarde allí, dije solo un "está bien", me dispuse a irme al departamento cuando George me detuvo y dijo que hablemos ahora que estaremos solos.
-Zoe yo, te quiero y mucho, y de verdad quisiera tener una oportunidad contigo- dijo mientras nos sentábamos en una banca del parque.
-George, yo, no quiero herirte, es mejor que estemos solos, que cada quién vaya por su lado, yo no quiero una relación en este momento, quizás más adelante, no lo sé, pero yo aún no sé qué pasará conmigo más adelante, y necesito tener la certeza de que cuando esté con alguien, esté bien para entregarle lo mismo que esa persona me dé, lo siento, pero ya tomé una decisión- mencioné con la mirada cabizbaja.
-al menos, ¿podemos ser amigos? - dijo de manera triste.
-por supuesto que sí, podemos ser amigos- y le entregué una sonrisa.
- ¿te acompaño a tu departamento?, claro, si no te incomoda- y se levantó de la banca.
-me parece bien- y me paré para comenzar a caminar.
Caminamos en silencio uno al lado del otro hasta que llegamos al edificio residencial donde vivo, le agradecí por todo y George se volvió a disculpar por lo que había hecho, pero le dije que no había problema alguno, nos despedimos y me dijo que nos vemos el lunes en el instituto. Cerré la puerta de mi departamento y me entró una llamada a mi móvil, era una llamada grupal de Jade y Paris, y ya sabía de qué se trataba.
-Zoe, dime ¿qué le dijiste a George? - dijo Paris.
-vamos Zoe, dinos qué hablaste con él- ahora habló Jade.
-pues nada, solo le dije que no era el momento ni el lugar para decirlo- la verdad no tenía ganas de hablar con nadie, solo quería que cortaran y me dejaran en paz.
- ¿nada más?, cuéntanos, somos tus amigas- insistía Paris.
-chicas, lo siento, pero yo tomé una decisión, y no quiero estar con nadie por ahora, y ya se lo informé a George, la verdad ya no quiero hablar más, adiós- corté la llamada y me senté en el sillón a fumarme un cigarrillo para relajarme un poco de todo lo que había pasado esta tarde.