Entré a la cafetería y estaba sentado, me acerqué a él y me senté, quedamos frente a frente.
- ¡oh darling!, sabía que ibas a venir-dijo con una sonrisa en sus labios.
-no me digas darling Matt, ¿de qué quieres que hablemos? -mencioné de forma cortante.
-podríamos hablar de nosotros, ya sabes, lo que pasó algunos años- y volvió a esbozar aquella sonrisa que hace años me volvía loca, pero que ahora me causaba repulsión.
-pues anda, habla- y desvié la mirada a través del vidrio para ver afuera.
-pues, nosotros la última vez que nos vimos quedamos mal, pero quería decirte que en este tiempo me he dado cuenta lo mal e inmaduro que fui al tratarte mal y dejarte ir, quiero que volvamos a empezar de cero, tú y yo, que olvidemos todo y seas capaz de perdonarme, que estemos juntos una vez más, uno al lado del otro, ¿recuerdas darling? - finalizó de hablar.
-la verdad Matt, yo creo que no podremos volver a ser algo, tener una relación amorosa, yo te olvidé hace años cuando me hiciste tanto daño, ¿tienes idea acaso de todas las noches que lloré por lo que me hiciste?, ¿todas las noches en las que me juzgué cómo persona? Que era una estúpida por confiar en ti, ¿todas las noches en las que me comía el cerebro pensando en cómo pude ser tan inocente?,¿todas las miradas asquerosas de los chicos del instituto que pensaban que podían coger conmigo?, ¿todos los rumores que divulgaban las chicas acerca de lo zorra que era?, ¡¿tienes una mínima idea de eso?¡- mencioné lo último elevando la voz y con las lágrimas amenazando por salir de mis ojos.
-yo, lo siento mucho Zoe, no tenía idea la verdad- dijo con notoria vergüenza.
-creo que esta conversación terminó- y me paré para salir de aquel lugar.
Matt me siguió, lo sentía caminar detrás de mí y confirmé eso cuando escuché que me estaba llamando.
- ¡Zoe!, ¡Zoe por favor! - vociferaba, detuve mi caminar y me di vuelta para encararlo con las lágrimas ya resbalando por mis mejillas.
- ¿qué quieres Matt?, ¿quieres seguir humillándome? - mencioné con la voz quebrada.
-por supuesto que no, por favor, volvamos a ser amigos, perdóname por todo, yo no me iré de aquí hasta que por lo menos seamos amigos o me hayas perdonado- hablaba mirándome fijamente.
-está bien- y limpié mis lágrimas- te perdono- y mostró una sonrisa- pero no volveremos a ser amigos nunca, es mejor que te vayas Matt- cuando pronuncié lo último su sonrisa decayó y decidí volver a caminar, esta vez no me siguió.
Llegué a mi departamento y me recosté en el sillón, comencé a pensar en todo lo que ha pasado estos últimos días y no puedo creer cómo ha cambiado mi vida en tan poco tiempo, de tanto pensar me quedé dormida. A la mañana siguiente, me vestí y cuando estaba buscando algo de comer antes de irme al instituto, alguien golpeó mi puerta.