Puse de inmediato mi mano en el ojo afectado, no podía creer que lo había vuelto a hacer, sentí que todo pasaba en cámara lenta, alguien me tomó y me guio lejos de allí, mientras que a Matt lo tomaban entre muchas personas, deteniéndolo de que pueda volver a hacerme daño.
Cuando volví en sí, me di cuenta que estaba en la cafetería y estaban llamando a la policía. Estaba en shock, no sabía qué hacer, me trajeron un poco de hielo, pero por sus caras, mi ojo debe verse realmente mal, de pronto siento una mano en mi hombro y cuando volteo era Quetzal.
-te llevaré al hospital para que te revisen, eso se ve muy mal- dijo preocupado.
Me tomó de la mano y me dejé llevar, salimos de la cafetería, vi que ya se encontraba la policía allí, debido a que la cafetería está en pleno centro, ya tenían a Matt esposado y lo subieron al vehículo policial, doblamos por una calle y Quetzal me abrió la puerta de su auto, me subí como pude, la verdad en todo el momento sentía tanto dolor en el lado derecho de mi cara, que solo quería que me curaran para ya no sentir más este dolor, porque no solo era un dolor físico, sino que también un dolor en el alma.
Llegamos al hospital y él habló en el mesón, me atendieron dentro de poco tiempo, me curaron, lo cual me dolió mucho, y dijeron que me quedaría un par de horas en observación, la policía llegó al poco rato a tomarme declaraciones, y finalmente lo hice, dije que él había sido, que es mi ex, vino a esta ciudad a buscarme y que antes me maltrataba también. Me encontraba recostada en la habitación y Quetzal estaba sentado en una silla cerca de mí.
Me tomó la mano mientras le daba pequeñas caricias, como tenía calmantes puestos, me sentía bien, no sentía dolor, y además con Quetzal a mi lado me sentía protegida, de a poco fui cayendo en un sueño, pero un ruido abrupto de la puerta me hizo salir de mi trance, era Paris con Jade e Itzan, se veía en sus caras la preocupación.
- ¡Zoe! - dijo Paris, Quetzal en ese momento me soltó la mano y se alejó de mí, ella se acercó a mí- lo siento mucho, esto fue mi culpa- y comenzó a llorar.
-tranquila, no es culpa de nadie, solo de Matt- dije yo tratando de sentarme, me dolía un poco la cabeza y sentía mareada.
-si no fuera porque yo le avisé, él no estaría aquí- y continúo llorando.
-cálmate Paris, si no hay problema, estaré bien- dije sonriendo y sentándome.
-no deberías sentarte Zoe, el médico dijo que es mejor que estés recostada- mencionó Quetzal.
-está bien- y me volví a recostar.
-lo bueno es que estás mejor- habló esta vez Jade.
-sí, me pondré mejor dentro de unos días- y sonreí.
-creo que mejor te vienes a mi casa, así te cuido y estarás segura- pronunció Paris.
-no quiero molestar a nadie la verdad, estaré bien en mi departamento- y levanté mis pulgares en señal de que todo estaría bien.
- ¡por favor Zoe!, déjame recompensarte lo que hice con eso, ¿sí? - sabía que seguiría insistiendo si digo que no.
-está bien Paris, me iré a tu casa- me resigné a ir.
-yo las llevó- intervino Quetzal.
Un par de horas más tarde llegó el médico y dijo que me podía ir, me dio una pomada y unos calmantes para el dolor, dijo que lo más probable es que tenga morado por una semana, pero que hinchazón bajará en un par de días. Agradecí a todos por su preocupación y Quetzal nos fue a dejar a la casa de Paris.