Amarte de Nuevo (Saga Destino #1)

Capitulo 11🌻(Edit)

Al llegar al restaurante del hotel donde me hospedó, tomo una de las mesas que está desocupada y pido mi desayunó.

Al terminar, comienzo mi camino hasta la salida del restaurante cuando mi teléfono vibra en mi mano, bajo la mirada hasta el, es un mensaje de Anny preguntando cómo la estoy pasando; cuando estoy por responder chocó con una persona haciendo que mi teléfono caiga al piso y se desarmé ‹‹Mierda».

—Lo siento, lo siento de verdad no te Vi —Una voz muy masculina hace que Levante La mirada—fue mi culpa venía entretenido hablando con mi amigo y no te Vi.

—Tranquilo, no pasa nada también fue mi culpa, estaba mirando mi teléfono.

Le respondo, para luego tomar las partes de mi teléfono y levantarme del suelo, el chico me tiende una mano y la acepto sin más, ya tengo mucha vergüenza por caer en pleno restaurante como para hacerme la indignada además reconozco que también fue mi culpa por no fijarme.

Coloco mi mirada  en el chico frente a mi, su cara está sonrojada hasta sus orejas y se nota muy apenado, el otro chico que está junto a él que su pongo es su amigo está que se orina de la risa por lo sucedido.

Carraspeó haciendo que el otro chico deje de reír como foca epiléptica, armó mi teléfono lo más rápido que puedo y lo prendo. Respiro más tranquila al ver que no le ha pasado nada, creo que me hubiera dado un infarto si se daña, aquí tengo todo lo relacionado con mi trabajo y si lo pierdo Erick me revive del infarto y luego me vuelve a matar por ser tan descuidada.

Saliendo de mis pensamientos, vuelvo la mirada hacia los chicos frente a mi, y ambos están mirándome fijamente y eso hace que me sienta incómoda, así que sacudiendo mi mano a modo de despedida y una pequeña sonrisa, paso por el medio de ambos haciendo que el chico que me tumbó me tomé del brazo haciendome detener, Lo miro arqueando una ceja.

—¿Sucede algo? —Pregunto mirándolo a la cara, para luego mirar el agarre en mi brazo.

Él parece darse cuenta por qué me suelta lentamente y se sonrojan de nuevo, lo que me parece muy tierno de su parte.

—Y-yo bueno — Se rasca la nuca nervioso—quisiera saber tu nombre e invitarte a cenar como una disculpa por lo de tu celular — lo señala con una de sus manos—Si tú quieres claro —dice rápidamente al ver mi cara de asombroso.

—Me llamo Evangelin pero mis amigos me dicen Eva y sobre la cena pues —Me hago la pensativa : Pues bue....

—Si no quieres, está bien. —Me interrumpe — Ya hicistes mucho disculpándome y diciéndome tu nombre.

&Esta bien no pasa nada, ¿cuando y donde?— Pregunto sin más.

—Eh bueno te parece si me das tu número y yo te aviso.—

Enarco una ceja y suelto una risita, vaya el chico no pierde una. Le dictó mi número de teléfono y me doy la vuelta de nuevo y comienzo a salir del restaurante

—Por cierto me llamo Jackson —Es lo último que escucho, y niego con la cabeza con una pequeña sonrisa.

Al llegar a la playa tomo un pequeño paseo por la orilla de la arena, haciendo que el agua se cuele entre mis pies.

Estar en este lugar me relaja tanto, el mar, la brisa, ver a las personas divertirse con sus familias y los niños la emoción de venir por primera vez.

Aún recuerdo cuando mis padres me  llevaron por primeras vez a la playa, estaba tan emocionada que no podía esperar bajar del auto y meterme al agua,  también recuerdo que mi mamá nunca se separó de mí, porque era tanta mi emoción que sabía que podía llegar a meterme al agua sin esperarlos, río un poco si desde pequeña he sido muy loca e impulsiva, y eso me ha hecho aprender de los errores que he cometido a través de eso.

Fueron tiempos maravillosos, y se que si tuviera oportunidad de regresar el tiempo lo haría sin pensarlo mucho y volvería disfrutar de su presencia, extraño a mis padres. Siempre lo hago pero hay días en los que siento que ya no puedo más, y es ahí donde pienso que si estuvieran ya me hubieran dado uno de sus sabios consejos y me apoyarían.

Uno de esos días fue cuando Bruno me traicionó, se que si ellos hubieran estado mi madre estuviera consolandome y mi padre bueno, él es un caso aparte ya hubiera salido a buscar a Bruno y darle una merecida paliza.

El siempre me repetía una frase "si alguien no te valora, sufre lo que tengas que sufrir. Pero jamás olvides quien eres y sobre todo amate a ti primero".

Para mí padre siempre fui su mayor tesoro, el regalo más preciado que Dios le otorgó, sus palabras nos las mías, siempre me consintió en todo lo que quería. Pero también me enseñó las cosas buenas, las no tan buenas y las malas. Mi madre por otro lado siempre fue cariñosa conmigo me aconsejaba cuando no sabía que hacer, cuando comencé mi relación con Bruno. Incluso cuando aprobe la beca de la universidad y no estaba segura de estudiar la carrera, ella estuvo ahí apoyándome.

A pesar de que ella siempre me dió su confianza y estuvo para mí, reconozco que siempre fui más apegada a mi padre, cuando hacía una travesura él me cubría, para que mi madre no me regañara. Al final mamá nos daba el sermón a los dos, y  terminabamos riendo como dos locos y al poco tiempo ella se unia a nosotros.

Respiro profundo al sentir las lágrimas querer salir de mis ojos, pongo mi vista al cielo y pienso, que si ellos no hubieran salido esa noche lluviosa aún siguieran con vida, aún siguieran conmigo por más años.

Todos los recuerdos llegan a mi mente de  una manera atropellada, la primera lágrima se desliza por mi mejilla y la limpio rápidamente. Siento que de alguna manera fue mi culpa, el que hayan tenido ese accidente. Si no los hubiera llamando esa noche todo seguiría igual como antes y ellos junto a mi.

Me levanto de la arena mirando el mar y despidiéndome de mis padres como siempre lo hago cada vez que los recuerdo.

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Primero que nada Feliz Día del Padre acá en Venezuela 🇻🇪 a todos esos padres y abuelos que dan lo mejor por sus hijos para verlos feliz. Y para aquellos que ya no están pero igual nos cuidan desde el cielo🌌

Este capítulo va dedicado a todos ellos, espero les guste este capítulo.

Con amor Ros 🌺