25

2.5K 314 131
                                    

📌 ADVERTENCIA: este capítulo puede contener lenguaje o contenido no apto para menores de 16 años.

Era un estúpido. Se sentía como un estúpido y podía sentir como todo su cuerpo temblaba. Había hecho tanto daño a Jisung que entendería si en ese preciso momento salía corriendo o lo agarraba a golpes.
No entendía como había pasado, solamente pasó ¿así era el amor, no? Solo que este era extraño y nuevo para él, puesto que jamás había sentido algo así por un chico. Pero Jisung era diferente a cualquier otro ser humano.

Era inteligente, amigable, tierno, inclusive era guapo, muy guapo. Pero no era el físico lo que había captado la atención de Minho, solamente era él y su forma de ser.

— Esa es una muy buena broma — dijo Jisung riendo nervioso, ocultando que por dentro estaba hecho un mar de emociones ¿había escuchado bien? Eso no podía ser posible. Minho había sido realmente rudo con él en el pasado, además había tenido amoríos con muchas chicas de la universidad muy diferentes a él ¿por que habría de creerle?

— N-no, yo... — Minho cerró sus ojos suspirando y aclarándose la garganta.— Yo no miento Jisung. Realmente estoy enamorado de ti.

El menor quedó completamente perplejo. Jamás había escuchado aquel tono realmente serio en él, parecía un sueño, uno que ocurrió día con día en su mente durante meses y años y que ahora estaba haciéndose real.

— ¿Por qué habría de creerte? — susurró Jisung más para el mismo.— durante años me has tratado mal, me has humillado. Sé que las personas cambian, hoy nos llevamos mejor que nunca ¿pero por qué habría de creerte?

Sin poder retenerlas más tiempo sintió como su vista se nublaba debido a las lágrimas que comenzaban a salir de sus ojos. Se sentía inseguro, con miedo de todo aquello. Una parte de él quería gritarle a Minho cuanto lo amaba, sin importarle más.

— Sé todo eso, estoy consiente. Pero en estos meses me he dado cuenta de lo asombroso y lindo que eres. Eres inteligente, tienes un corazón tan noble y lleno de amor que no pude evitar enamorarme de ti.

Jisung no tuvo tiempo de hablar o decir algo cuando sintiendo las manos cálidas del mayor sobre sus mejillas, trazando sus lágrimas que no terminaban de salir. Estaba avergonzado de actuar así frente a Minho, sin embargo ya no tenía miedo de nada. Estaba enamorado de él y no podía negarlo.

Apenado levantó su vista hacia los ojos obscuros de Minho los cuales lo miraban como siempre había anhelado, tenían aquel brillo que lo había cautivado y sin pensarlo más Minho acortó la distancia entre ellos tocando los labios del menor con los suyos, tan cálidos como inconscientemente imaginó. Con vergüenza, sintió como los pequeños labios de Jisung se movían junto a los suyos. Había besado a muchas chicas antes, sin embargo esto se sentía completamente diferente.

Por otro lado, Jisung estaba temblando por dentro. Jamás había besado a nadie y tenía tanto miedo de hacer algo mal al estar así con Minho pero al sentir que sus labios comenzaron a sincronizarse como si estuviesen hechos para estar juntos su miedo se fue.

— Minho... —. Susurró el menor contra sus labios con sus ojos cerrados — también estoy enamorado de ti.

˚✧

Entre risas ambos caminaron hacia el pequeño hotel de paso en donde se encontraban. Subieron las escaleras hacia su habitación mientras entrelazaban su mano hasta cerrar la puerta.

Jisung rodeó el cuello de Minho con sus brazos mientras reía contra sus labios. En aquel momento todo era felicidad para ellos.
Sus lágrimas se habían ido, no tenia porque seguir llorando o reprimiéndose por todo lo que sentía .

Minho tampoco tenía más miedo y confusiones pues ya no tenía más tiempo para ello. Estaba enfermo y no sabía por cuánto tiempo más, tenía miedo de todo lo que se avecinaba en su vida. Nadie sabe cuánto tiempo estará en esta vida, en este mundo, pero Minho iba a disfrutar cada segundo, viviendo con felicidad y amor al lado de quien mas quería.

Entre pequeños besos, abrazos y caricias, el amor entre ambos  fue saliendo más a la luz. Las pequeñas manitas de Jisung acariciaban el cabello obscuro de Minho, colocándose de puntillas para besar los labios de este.
Caminaron de espaldas hasta topar con una de las camas de la pequeña habitación haciendo que ambos se separaran.

— Y-yo... Minho... Y-yo no sé hacerlo — susurró el menor contra sus labios, sabía lo que estaba por ocurrir. Se desconocía pero algo dentro de él deseaba a Minho como jamás lo imaginó.

— Tranquilo Hanie — susurró el mayor mientras poco a poco entre besos se recostaba con el menor en aquella cama — quiero  adorarte, adorarte hasta el final de mis días.

Poco a poco aquellos besos inocentes fueron tornándose más intensos haciendo ruido con sus labios. Suspiros, te quieros y el nombre de de ambos en toda la habitación.
Pronto sus manos comenzaron a acariciar el cuerpo ajeno  y  una por una las prendas fueron quedando esparcidas en el suelo.

Un leve sonrojo se apoderó de las mejillas de Minho al ver la suave piel de Jisung bajo la luz tenue y amarillenta de la lamprita entre ambas camas. Cada centímetro del menor era perfecto a media que sus manos lo tocaban, descubriendo poco a poco sus puntos más débiles escuchando como su pequeño amado se derretía entre sus brazos con cada jadeo que salía de aquellos labios tan dulces que había probado.

Jisung no se quedó atrás y de forma dulce y tierna recorrió el cuerpo de Minho notando lo varonil que era, lo suave que su pálida piel era, sonrojándose aún más cuando sus ojos marrones vieron algo que jamás había visto antes. Quería complacer a Minho, quería hacer todo lo que jamás se imaginó con él.
Sus pequeñas manitas tocaron con cuidado aquella parte sensible en el cuerpo del mayor mientras que la mano de este fue a donde mismo. No había prisa, solo tiempo para disfrutarse el uno al otro.

Aquella noche Jisung supo lo que era estar en el cielo, lo que era realmente estar vivo. Sus gemidos resonaban en toda la habitación a medida que Minho invadía su cuerpo con movimientos lentos y precisos.
La espalda de Minho estaba adornada con bonitas marcas de las uñas de Jisung a medida que sus cuerpos se movían en sincronía y rapidez tocando el punto más dulce de Jisung el cual ya tenía los ojos llenos de lágrimas del placer y dolor que sentía al tener a Minho de to de él.
Ambos gimiendo, sudando, disfrutando los labios del otro además del calor que emanaban las pieles expuestas de ambos, aquel momento quedaría grabado en la mente de los dos.

Pronto llegaron al clímax de aquel momento cayendo exhaustos en un abrazo mientras trataban de recuperar su respiración. Jisung no pudo evitar soltar una risa nerviosa escondiendo el rostro en el cuello del chico de sus sueños, respirando aquel aroma que le daba tanta paz y seguridad.

— Te quiero quiero tanto Lee Minho.

El mayor sonrió ante aquello mientras su mano recorría la espalda desnuda de Jisung.

— Y yo a ti, Han Jisung.

˚✧

fue un mal capitulo :( no salió como lo tenía en mente pero apenas hoy terminé mi semestre y mi mente ya no dió para más , pero con cuidado porque ya casi se acerca el final ¡gracias por su apoyo! 💗

además hoy nuestros chicos ganaron en kingdom así que con más razón les daré caps más bonitos 💗

﹆ adore you | minsung Donde viven las historias. Descúbrelo ahora