DIME "TE AMO" (editando)

Estoy de regreso

Ana se recostó en la cama que antes era de Nicole, su cuarto aún tenía su aroma. Puso la canción favorita de Nico y con la preciosa vista que tenía ese cuarto ahí se quedó. Casualmente todas las canciones que salían las escuchaba Nico y la ponían exageradamente feliz. Ana se quedó dormida ahí, después de llorar.
Eran las 8 ¼ de la mañana y tocaron su puerta de una manera muy insistente.
«¿Quién era y por qué tan temprano?», Se preguntaba.
Abrió la puerta y ¡Pum! Un joven moreno, con barba, alto y... Bueno se veía que buscaba a alguien con urgencia.
— ¿Hola?-
— ¿Licenciada Rodríguez?- sonrió.
—No, aquí no es, creo que es la del 202, no lo sé.-
— ¿enserio? Perdóneme señorita, lo siento.-

Ana cerró la puerta, fue a la cocina y tomo un vaso de agua. Mientras estaba ahí, sentada en el banco del desayunador vio como cous hacia popo. —ahora si viene lo chido. —Cous, al patio.- se preparó el desayuno y prendió la tele para no sentirse tan sola. Desayuno, le sirvió el desayuno a cous y justo cuando comenzó a lavar los trates de nuevo tocaron la puerta.
— ¡Y ahora QUeeee!- abrió la puerta.
De nuevo el chico de barba.
—Hola, de nuevo yo, pero esta vez no me equivoqué.- sonrió. Creo que su sonrisa le daba seguridad, por qué además de perfecta es brillante.
— ¿Aja...?.-
—Si no te molesta y estás disponible, me gustaría invitarte a cenar esta noche.  Quizá piensas que soy un intenso o que quizá soy un desconocido, pero pues para eso es la cena, para que me conozcas.- sonrió y guiño un ojo.
—Mira efectivamente no te conozco y no estoy pasando por buenos días, prefiero no salir. Gracias.- intento cerrar la puerta y justo el chico de la barba la detuvo.
—okey entiendo. Me presento soy Ernesto.- estiró la mano. —Ahora sí, ya no somos desconocidos.-
—No, enserio no quiero nada ahorita, es más preferiría que te fueras... Ernesto.- sonrió hipócritamente.
—Bueno, lo respeto. Quizá luego nos volvamos a ver, vivo cerca de aquí.- se fue.
Ana cerró la puerta y por miedo puso el sillón como una especie de barrera y les costará más si intentaban abrir la puerta a la fuerza.

Terminó de recoger la casa y pidió comida a domicilio.

Mientras comía una hamburguesa con alitas de mango súper enchilosas, jugaba fornite.

Y así los primeros días. Solo estaba ahí, en el departamento, no salía para nada, todo lo pedía a domicilio. Al parecer la pasaba bien y disfrutaba su soledad. Un día de esos se puso borracha ella sola, escuchando a
Del río- Ed Maverick
Llorando por Ale, y por su relación que no pudo ser y que más bien se enamoró de las expectativas de algo que no era.
Le timbró el celular, era Nico.
—Hola cariño, ¿cómo te trata mi casita?-
—Holaaa, bien, esto de estar sola me está empezando a gustar.-
—Que bien, me da gusto. Espera pero que has estado haciendo, tienes unas ojeras del demonio, ¿Te has estado desvelando?
—uff, si demasiado, como que pierdo la noción del tiempo y cuando me da sueño ya son las 4 o las 5 am. Te cuento que hace unos días vino un muchacho.-
—Uyy... ¿guapo?-
—Sí, un poco, pero me asusto más que gustarme.-
—mamita, al paso que vas se te va a secar allá abajo. Ya empieza a pasarla bien, disfruta tu juventud.-
—Sisi, pero tú, bueno cuéntame cómo te va en tu vida de gringa.-
—Voy muy bien, encontré un trabajo acá en una constructora y la estoy pasando muy bien, ya hay varios detrás de mis huesitos pero na', ahorita todo lo que hago y haré es por mí y para mí.-
—Uy mira, yo si me debo dar la oportunidad y tú no. Anímate, cásate allá y consigue los papeles, ¿Dónde entregas neni?- soltó una carcajada. —No te creas. Bueno, me alegra que la estés pasando bien allá. Yo seguiré acá con vida de tercer mundo.-
—Ha, deberías de ponerte a grabar, mantente entretenida. No quería ser yo quien te lo dijera, pero te ves....- lo dijo con cara de disgusto. —Hermosa, como siempre.- lo dijo con una sonrisa.
Terminaron esa video llamada, y Ana se paró, se vio al espejo y si, si se veía mal, además tenía 4 días sin bañarse, y eso era raro por qué ella nunca duraba más de dos días sin bañarse a menos que se enfermara. Se paró, se vio al espejo y después de verse se fue al baño, tomo una ducha relajante y salió renovada al mil por ciento. Acomodo la sala, puso el tipié, la cámara y comenzó a grabar un vídeo para su canal. Estoy de regreso ¿qué me pasó?
En ese vídeo hablo de todo, contó lo que paso con Alejandra, pero solo por encimita, no contó los detalles, también dijo que estaba en un momento de su vida donde no sabía que era lo que quería y mucho menos si estaba en depresión o no, pero que igual ella haría cosas para mejorar y que todo estuviera e igual de activo y energético como siempre. Iría al psicólogo, buscaría una actividad recreativa y sería más constante en su canal.
Después de que lo editó y lo publicó, Alejandra le mando un dm por Instagram.
Hola, me alegra que hayas vuelto a hacer lo que te gusta, te deseo toda la suerte del mundo, y que todo que "malo" que dices que estás pasando lo puedas superar. Ah y gracias por no hablar de lo nuestro, y de nuevo perdón.
Ana solo vio e intento no contestar, dejarlo así. Dejo el celular por ahí y lo ignoro el resto del día.
Puso Netflix y con cous en brazos se puso a ver una película. Esto como despedida de sus malos hábitos, por qué iniciaría con su nueva vida.