Cielo verde y salvador

Capítulo 5

Cuando al día siguiente amaneció desayuné rápidamente, Candela ya había llegado y pondríamos en marcha el plan.
-Solo media hora-me repitió, asentí con la cabeza.
-¡Gracias!-le agradecí cerrando mis ojos, cuando me aparté de ella me mostró la salida por la que ella entraba a trabajar.
Al salir me desorienté, no entendía ni donde estaba parada, había pasado tanto tiempo desde la última vez que estuve sola por la calle.
Supe enseguida que era un barrio de personas de mucha adquisición, eran todas casas grandes y embajadas.
Caminé hacia una plaza y me puse a recorrerla, necesité tomar algo de otro aire, no pude evitar sonreír.
Me recosté en el pasto, amaba hacer eso desde que era chica, Hakim no me dejaba hacerlo, tenía que estar siempre como una chica correcta.
-¿Lali?-Peter me llamó y entré en pánico-¿que haces acá?-elevó sus cejas.
-Digamos que me escapé por unos minutos..-no me salió mentirle.
Él me ofreció su mano para que me pusiera de pie.
-¿Que hacías que no estás en la casa trabajando?-me entró curiosidad, estaba molesta con él, pero la curiosidad me ganó.
-Leía.. Utopia de Tomás Moro-me mostró el libro- pero ahora que te veo puedo cambiar de plan
Me quedé mirándolo desconcertada.
-Peter tengo poco tiempo.. En veinte tengo que volar-quise apartarme de su vista pero se puso enfrente mío, me tomó de la mano y sentí algo parecido a una corriente eléctrica, rápidamente lo solté-¿que querés?-lo miré mal.
-Veinte minutos con mi mejor amiga-suspiró-¿puedo invitarte un helado?
Me quedé mirándolo sin entenderlo, tratándolo de descifrar.
-Esta bien..-terminé aceptando.
Nos pusimos a caminar dejando la casa y el parque atrás.
Llegamos a la puerta de la heladería en completo silencio.
-¿Dulce de leche?-me preguntó, asentí con la cabeza- hay cosas que no cambian-esbozó una pequeña sonrisa mirándome, después entró por la puerta y a los minutos me trajo mi helado-así que te están cubriendo..
-Sí... ¿Vas a decirle a Hakim que ve viste afuera?-elevé mis cejas.
-No seas tonta.. Jamás lo haría-suspiró.
- Yo ya no se.. Yo ya no te conozco-decir esas palabras me dolieron, para escaparme de ls conversación me puse a comer el helado.
-Tenes... Tenes helado hasta en la nariz-Peter agarró un papel y me la limpió, suspiró- soy.. Todavía soy la persona que conociste... Solo un par de cosas cambiaron, pero mi esencia está.. Sigo soñando cada día que pasa.. ¿Vos soñas cosas?
Me quedé mirándolo y negué con la cabeza.
-En mi mundo ya no existe los sueños-suspiré, quise ponerme de pie pero no pude-¡dejemos de jugar Peter! Mejor vuelvo a mi realidad..
-Este momento es real La-Peter levantó mi cara con una de sus manos- somos reales.. Soy real, no soy más un recuerdo, ahora estamos juntos
Él me hizo una caricia en la cara, caricia que hizo que me estremeciera, ¿que había acabado de pasar?
Tal vez solo fue porque hace mucho nadie hace eso conmigo, hace mucho nadie tiene un gesto cariñoso, menos un hombre.
La respiración se me aceleró al notar nuestra cercanía, entonces me escapé como la mejor.
Le pegué el conito de helado en la frente, vi en sus ojos que me quería matar.
-¡Lali!-me retó y me puse de pie dispuesta a salir corriendo, Peter me persiguió por toda la cuadra, me abrazó por atrás y otra vez la sentí, a la electricidad que se hacía presente cada vez que una parte de mi cuerpo tocaba a Peter, me sentí desconcertada.
-Voy a limpiarme este desastre-me anunció.
Él se fue y me quedé mirando los autos pasar, a las palomas que buscaban migas de algo, Peter volvió a los minutos.
-Tengo.. Tengo que volver..-se me formó un nudo en el estómago-otra vez a mi vida.. Pero fue lindo.. Fue lindo por un momento ser una chica como cualquier otra pidiendo un helado en la heladería
Se me escapó una pequeña sonrisa, Peter acarició la comisura de mi boca y metió su dedo en la suya.
-¿Comiste vos o toda tu cara?-se rió, ese gesto me hizo pensar en otras cosas-vamos...
Estábamos casi por llegar a la casa cuando paramos de caminar en el medio del parque.
-Ahora hagamos como si nada-le di esa indicación.
-Lali... ¿Lali podemos volver a hacer esto? Vos escaparte por media hora y recorrer lugares del barrio.. No se, para que te despejes, puedo hacer de guía-me lo sugirió.
-No lo se.. No se si va a poder ser-le dije con sinceridad.
Estaba por irme cuando Peter me tomó del brazo acercándome a su cuerpo, finalmente después de muchos años hizo lo que toda mi vida sospeché, algo que tiene que ver con lo que siempre quiso decirme y no pudo hacerlo porque yo siempre me escapaba.
Su mirada fue a mis labios y después a mis ojos, estaba conteniéndose, mentiras tanto yo estaba aturdida.
-¡Tengo que irme Peter!-lo apuré y él me soltó-gracias..
Acobardada huí, como lo hice desde siempre.
Una vez ya en la casa me escondí otra vez en la biblioteca, no se porqué sentí que necesitaba refugiarme para poder llorar tranquila, ¿que había pasado?
¿Fue lo que imaginé?
Eso me trajo más dolor y desconcierto, entonces.. ¿Porque no había venido a buscarme?
-Lali-me llamó Eugenia, se acercó hasta donde estaba-supuse que estarías acá, ¿como fue la salida?
La miré con mis ojitos brillosos.
-Salí y me encontré a Peter..-empecé-¿porque no me vino a buscar Chinita? Algo me dice que todo esto sería muy distinto.. Que tal vez no estaríamos acá..
Mi amiga se agachó y besó mi mejilla.
-No lo se.. A veces el destino nos hace pasar por cosas que.. Cosas que no tienen explicación, pero yo creo en que si pueden haber finales felices-me miró a los ojos- o tal vez un buen comienzo, desde donde mires la cosa.. Ahora, ¿eso es todo lo que te pasa?
-Yo.... Recién ahora lo vi... Bueno, me negué a verlo en el pasado... Creo.. Creo que en algún momento de la vida le gusté a Peter-soltar eso hizo que me pusiera nerviosa-¡que tontería dije!
-Ey.. No es imposible La.. Siempre me contaste lo bien que te trataba, que eran muy unidos, a veces eso pasa, uno de los dos amigos se enamora del otro..
-¿Quién habló de amor Euge?-suspiré- seguro fue algo de chicos, ya.. Ya somos dos personas completamente distintas, y lo nuestro nunca podría ser, yo me quedo con el bruto de mierda este y él con la hija del político-suspiré-fin
-Hervís en celos Lali-Eugenia se me rió en la cara-te importa Peter, más de lo que crees, si bien él te decepcionó, en tu corazón sigue siento tu Peter.. El que siempre estuvo para vos, el que te protegió en el colegio tanto como en la calle.. Ey, te brillan los ojitos cuando lo mencionas, aún cuando lo mencionas enojada
Cerré mis ojos fastidiada.
-¿Podemos dejar de hablar de esto?-le pedí-voy donde están todas..-me puse de pie.
Cuando llegué al jardín Candela me miró con una sonrisa.
-¿Todo bien? ¿Hubo algún problema?
-Ninguno-Candela negó con la cabeza- me voy a cocinar..
-Gracias-volví a decirle, ella me guiñó un ojo con simpatía.
-¿Y? ¿Que onda?-quizo saber Gimena.
-Fui a tomar un helado..-decidí obviar un detalle, detalle que Eugenia sacó a la luz.
-Con Peter-agregó ella, las chicas me miraron más interesadas- Lali tuvo una cita con él
-Dejá de decir estupideces, solo me invitó un helado-suspiré- en fin, lo pasé lindo
-Como para no pasarlo lindo con semejante hombre-Gimena elevó sus cejas.
-Estúpida-me reí.
Después de un rato Candela nos llamó para almorzar.
Hakim saló de su oficina mientras hablaba animadamente con Peter, ambos se sentaron en la mesa con nosotras.
-Dos platos más-me pidió a mi- traelos
Me puse de pie, les puse los platos y volví a sentarme.
Cuando la comida llegó casi no pude comer, Peter cuando podía me miraba a los ojos desde la otra punta de la mesa.
Me puse de pie agarrando a mi hija en brazos porque se puso a llorar.
-¡Callá a esa criatura!-Hakim me lo ordenó, intenté hacerlo pero Amira se había asustado más con el grito, no paraba de llorar.
-Yo la calmo-Peter se puso de pie sin pedirle permiso a Hakim y cargó a Amira que se lo quedó mirando, era un extraño, era el primer hombre que la cargaba, eso la dejó sorprendida, su manito empezó a tirar de una cadena, era la llave, eso me sorprendió, Amira otra vez intentó comérsela, entonces la cargué nuevamente yo.
-Gracias..
Me alejé de todos para seguir acunando a mi hija, le canté algo hasta que se durmió.
¿Porque Peter Lanzani había vuelvo a usar su cadenita?