Tuve que empacar mis pocas cosas, entre ellas mi cajita de la infancia, donde tenía la carta que nunca le di a Peter y mi collar con mi llave, me la puse y la besé deseando que todo cambie para bien.
Cuando el día llegó nos pasó a buscar una limusina, antes Candela me hizo llegar un celular, lo escondí en la valija y por suerte pasó desapercibido.
Subí al avión sin poder creer el tener que estar abandonando nuevamente mi país, me agarró mucha angustia, llevé mi mano a mi panza y mi chiquito se movió, no paró de moverse en las 16 horas y media.
Nos pasó a buscar otra limusina y vi caminar a las personas libres, siguiendo sus rutinas, disfrutando simplemente del vivir.
Al llegar a la nueva casa fui corriendo hacia el baño, me agarró nauseas.
-Éste es nuestro nuevo hogar, los problemas de Buenos Aires quedaron en Buenos Aires, éste es nuestro nuevo comienzo como familia, todo está en orden, estoy feliz que se hayan desecho de sus críos, de ahora en más solo van a ustedes y yo-Hakim elevó sus cejas, estaba realmente alegre mientras que nosotras estábamos destruidas por dentro- y el crío que Mariana tiene en la panza, por cierto quiere verte a vos sola en mi nueva oficina, y ya que estoy les recuerdo que hoy en la noche pienso hacer una fiesta para conocer a mis futuros clientes
Las chicas tuvieron que irse y me quedé a solas con Hakim en su oficina.
-Nunca me respondiste, el crío.. ¿Es mío?-me miró firmemente a los ojos, eso me intimidó, deseé el que me salga bien mentir.
-Sí.. ¿De quién más puede ser?-me encogí de hombros.
-Creí por un momento que tenías una aventura con Peter Lanzani, que por algo te cuidó a vos y a mis otras esposas, pero es imposible, él ama a Manuela y van a tener un hijo-en cada cosa que dijo Hakim había algo cierto e incierto.
-Yo.. ¿Puedo irme ya?-se lo pedí prácticamente suplicándose.
-Hace mucho no tenemos un momento para los dos solos, mamá y papá tienen que tener un tiempo para ellos-le habló a mi panza que se me puso dura, me paralicé, él se rió- sé que seguro me extrañaste, lo que yo siento por vos sí que es amor verdadero-hizo una caricia en mi mejilla, traté de mostrarme calma.
Pasó lo que temí que pasara, Hakim tiró de mi brazo y me llevó a su habitación, entonces me desnudó, sentí un tremendo rechazo, quería escaparme pero sabía que no tenía escapatoria, era un "momento apasionado" o que me maltrate, maltrate a mi bebé.
Se me formó un nudo en el estómago al salir de la habitación, corrí al baño por las nauseas.
Eugenia entró después de tocar la puerta.
-¿Estas bien La?-me miró preocupada, asentí con la cabeza no muy segura- yo también a veces siento nauseas después de.. Te entiendo, tengo el mismo rechazo, todas sentimos el mismo rechazo.. Yo me siento sucia..
-Yo.. Yo también.. Fue horrible Chinita, fue horrible no recorrer un cuerpo que no sea el de Peter, lo extraño-la voz se me quebró y los ojos se me llenaron de lágrimas- no pasó ni un día y ya lo extraño, extraño a mi hija, a sus hermanitos, los extraño
Eugenia se quedó consolándome con un abrazo.Antes de bajar las escaleras para ser presentada como una de las esposas de Hakim saqué del escondite el celular, tenía mensajes de Peter, entonces lo llamé, me encerré en el vestidor.
-Hola..-lo saludé haciéndome la fuerte.
-Chiquita...-su voz se quebró- acá estamos haciendo todo lo posible para que lo metan preso a ese hijo de puta.. ¿Como las está tratando?
-Bien.. Está feliz de estar en otro país-me quedé pensando en lo que había pasado hace unas horas, dudé si contárselo o no- por ahora todo bien, solo tuve que mentir y decirle a Hakim que nuestro hijo es su hijo
Noté tristeza en los ojos de Peter.
-Ey.. Tranquila, ya vamos a poder gritar al viento que ese es nuestro bebé-trató de animarme.
-Yo.. Yo tengo que ir a la fiesta de bienvenida, Hakim va a darle la bienvenida a sus nuevos futuros clientes, gente influyente-suspiré- me tengo que ir Pit, cuidate
-Vos cuidate chiquita, tene mucho cuidado La-me lo pidió y asentí con la cabeza.
Corté la llamada y escondí nuevamente el celular.
Bajé las escaleras junto a mis amigas, acto seguido nuestro esposo nuevamente los exhibió como si fuéramos sus trofeos, todos se quedaron maravillados con nosotras.
Hakim les contó a los invitados que lo nuestro había sido amor a primera vista, tan lejano es todo eso, o es ciego o no quiere ver queremos, tal vez muy en el fondo lo sabe, ya no sé.
Las chicas me buscaron con la mirada desde a lo lejos, Hakim siguió presumiéndome a una pareja.
-Ella es Mariana, juntos vamos a tener un varón-les contó "la buena nueva", él puso su mano en mi panza y molesta di un paso hacia atrás, él me fulminó mal con la mirada.
-Me siento mal, necesito ir al baño-me safé del agarre de Hakim, me escapé de la escena amorosa que él se había armado.
Por suerte la nueva casa también había un jardín, quería ponerme a llorar ahí pero me encontré con que había alguien fumando.
-¿Estas bien?-se quedó mirándome, yo estaba al borde de mandar a todos a la mierda y llorar- soy David, un director de series y películas español, ¿vos tampoco sos de acá no?
Negué con la cabeza.
-Yo soy Mariana, y quiero desaparecerme de este lugar, quiero volver a mi argentina-me puse a hablar acerca de varias cosas pero David se me quedó mirando fascinado.
-¿Alguien te dijo que sos muy linda?-elevó sus cejas.
-Conmigo te equivocaste, la erraste mal, soy esposa de Hakim y no estoy enamorada de él, mi amor está en Argentina, en Buenos Aires-suspiré-perdón por estar contándote mis problemas, mejor.. Mejor vuelvo a la fiesta
-Esperá, solo te dije que sos linda, no pretendo que seas mi novia-se rió, después se volvió serio- podes confiarme tus cosas, sé escuchar
-¿Gracias?-no supe que responderla- vuelvo a la fiesta-suspiré y di media vuelta para desaparecerme.
¿Qué había sido eso?
Fui hasta donde estaban las chicas y juntas nos quedamos contemplando a las personas que nos contemplaban como si fuéramos rarezas, se reían, nos ojeaban mucho.
-Estoy harta de todo-me quejé.
-Estamos-me corrigió Gimena coincidiendo.
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Cielo verde y salvador
Fanfiction¿Quién no envidian esas relaciones que son desinteresadas y hermosas para atesorar toda la vida? Peter era mi mejor amigo hasta que cumplí los 18 años, ambos vivíamos en un barrio muy humilde, nos cuidábamos el uno al otro hasta que pasó algo que nu...