Fuck the Gallaghers (Shameless)

Capítulo 37: Reformas

Cuando desperté en la mañana, Storm no estaba y su ropa tampoco. Había dejado un plato de desayuno para mi y había doblado mi ropa. Tras vestirme y comer cogí mi móvil para ver si tenía alguna llamada, pero estaba sin batería. Miré asustada hacia la puerta cuando llamaron y tras meditarlo, caminé como una gata hasta ver por la mirilla. Suspiré con tranquilidad y abrí la puerta, dando paso a Rey y Lucy.

—Hola, chicos. Gracias por venir, dadme un minuto y estoy.—dije yendo hacia la cocina para fregar los platos.

—Pues a mi no me parece una casa tan horrible.—dijo una voz desconocida. Me giré para verlos y pude darme cuenta de que mis amigos no tenían buena cara.

Ambos parecían frustrados y hartos de algo, y supuse que ese algo era el chico que les acompañaba.

—¿Y este quién es?—dije confundida.

—Hola, me llamo Brian, a partir de ahora vas a verme muy seguido.—dijo sonriente.

—Es el hijo que han adoptado Roman y tu novio.—dijo Lucy con ironía. 

—Oh, ¿tú eres la novia de Ares? Ya quería conocerte—dijo riendo—. Te imaginaba más guapa.—dijo frunciendo el ceño, su sinceridad me hizo sonreír.

—¿Nos vamos?—dijo Rey exasperado. Asentí y tras mirar al chico, salimos de mi piso para caminar al coche de Lucy, donde Roman esperaba junto a Jason.

—¿Alguien puede explicármelo?—dije confundida.

—¡Roman y Ares trajeron a este crío chapero que encontraron cuando fueron a buscar a tu hermano!—dijo Jason molesto.

—¿Chapero?—dije mirando al chico, él asintió orgulloso—. Ares no me dijo nada sobre ti.—

—Pensó que no le aceptaría si te decía que me había adoptado.—dijo divertido.

—No te hemos adoptado, sólo te trajimos para que estuvieras unos días, luego volverás con tu familia.—dijo Roman.

—¿Dónde se está quedando?—dije.

—En mi casa.—dijeron Lucy y Jason enfadados.

—Aunque esta noche, debe quedarse contigo. Lo iba a dejar con Ares, pero se reúne con unos tipos para no se qué de música.—dijo Roman.

—Vale, sí, puede quedarse conmigo.—dije confundida. No entendía nada, pero Ares me lo explicaría más tarde. Miré al chico y éste me miraba sonriente.

—Hemos llegado.—dijo Roman parando el coche.

—Jason, ¿tú vienes?—dijo Lucy a su hermano.

—No, tengo cosas que aclarar con mi prometido.—dijo.

—Vale, nos vemos lue... ¡¿Espera qué?!—gritó su hermana. Chillé de alegría mientras Rey reía. El chico, Brian, nos miró confundido.

—No entiendo por qué tanta alegría.—dijo Brian.

—Me lo pidió anoche. Nos casaremos el mismo día que tus padres, Raina. Hemos hablado con ellos y vamos a compartir los gastos.—dijo Jason sonriente.

—Dios mío, chicos, me alegro muchísimo por vosotros, de verdad.—les dije sonriente.

—¿Se lo has contado a papá y mamá?—dijo Lucy confundida.

—Roman habló con ellos antes de declararse, no estaban muy contentos al principio, pero saben que nos queremos y que Roman es perfecto para mi.—dijo Jason.