Fuck the Gallaghers (Shameless)

Capítulo 2: ¡Gallagher!

Aporreé varias veces la puerta de los Gallagher hasta que una cara bastante conocida para mi abrió.

—¿Raina?—preguntó confundido.

—Hola, zanahorio.—dije empujándolo hacia un lado para entrar.

—Sí, claro, pasa.—dijo irónico mientras cerraba.

—¡Frank Gallagher!—grité molesta.

—No grites Fiona, estoy aquí.—dijo una voz adormilada desde la cocina.

Me acerqué hasta allí con el zanahorio siguiéndome. Miré hacia la lavadora para ver a Frank tumbado sobre ésta con tan solo unos calzoncillos puestos.

—No soy Fiona, capullo. Despierta.—dije molesta mientras me cruzaba de brazos. Frank abrió un ojo para mirarme.

—¿Raina?—preguntó confundido alzándose con sus brazos.

—La misma. Dame el puto dinero que le debes a mi padre, Gallagher.—dije molesta.

—Espera, ¿le debes dinero a Spitzer?—preguntó el zanahorio confundido.

—No, no, bueno, no exactamente—dijo mientras se sentaba en la lavadora y se rascaba la cabeza—. Le debo unos dólares nada más.—

—¿Cuántos son unos dólares, Frank?—dijo Ian molesto.

—Unos mil.—dije haciendo que Ian me mirase sorprendido.

—¿¡Mil?!—preguntó mirando molesto a Frank—. ¿Qué coño has comprado, Frank?—

—Es un negocio. Verás le compré unas tablas a Spitzer para venderlas más baratas pero luego resultó que los clientes no las querían porque eran amigos de Spitzer y no querían hacerle ese feo.—dijo tan tranquilo.

—¿¡Que hiciste qué?!—preguntó Ian molesto. Mi enfado era más grande que el suyo y para demostrarlo no dudé en acercarme a Frank y darle un puñetazo tumbándolo de nuevo en la lavadora—¡Raina!—dijo Ian acercándose a mi para alejarme del Gallagher mayor.

—¡Quiero mi dinero esta noche, Gallagher!—grité molesta señalando a Frank.

—¡Te lo daremos, te lo daremos! Ahora, ¿puedes irte, por favor?—dijo Ian desesperado.

—Esta noche, Gallagher—dije señalándolo con un dedo antes de alejarme—. Dile a Carl que he vuelto.—dije antes de cerrar la puerta de la casa molesta.

Cogí el autobús para volver a casa. El ruido en el garaje me hizo ir hasta él. Ares lijaba una tabla mientras mi padre pintaba otra. Se quitó la mascarilla al verme.

—¿Dónde demonios estabas?—preguntó mi padre mirándome junto a Ares.

—Tus llaves, Ares—dije dejándolas en la mesa mientras él asentía—. Con los Milkovich, ya te lo dije.—le dije a mi padre mientras me ponía el mono.

—Tu turno empezó hace horas.—dijo molesto.

—Estaba trabajando—Spitzer levantó una ceja—. Fui a pedirle el dinero a los Gallagher, nos lo darán esta noche sin falta.—

—¿Qué? Te dije que ya se lo había pedido a Frank, pero su lavadora—

—Su lavadora está perfectamente, Spitzer. Acabo de comprobarlo.—dije mientras me recogía el pelo.

—Raina, los casos de dinero pendiente son mi asunto.—dijo molesto mientras yo cogía una tabla.

—Pues entonces ve a pedir el dinero a los demás y no vuelvas hasta traerlo todo.—dije sin mirarlo.