Izuku veía todo el desorden que su amiga tenía en aquella habitación con la excusa de que no encontraba algo en especial. Tanto que sin darse cuenta lo estaba poniendo más nervioso.
--Creo que es mala idea que yo te acompañe, Ochako -- la castaña dejo de botar la ropa al suelo y girar la cabeza para ver a su amigo pecoso, quien estaba sentado en la orilla de la cama mientras veía sus propias manos.
--Vamos Izu, será divertido -- intento animarlo, pero al verlo decaído, soltó un suspiro antes de acercarse a él y sentarse a su lado.
Importandole poco que la toalla que cubría su cuerpo se abriera un poco en la parte de enfrente y se subiera un poco más en la parte de abajo. Una vista que para todos sería muy sensual y hasta tentadora. Pero al ser ambos tan amigos y el haberse vistos ya desnudos en varias ocasiones, no significaba nada para ninguno de los dos.
--Es que no quiero incomodar, además el te llamo a ti para invitarte, siento que sería un mal tercio si voy --. Ochako sonrió de lado antes de pasar su brazo derecho por los hombros de su amigo.
--Dudo que eso pase, ¿Sabes por qué? -- al ver que Izuku negó, continuó -- cuando le dije que si podía invitar a un amigo, me pregunto si era el mismo de aquella vez y al decirle que si, casi grita de alegría --.
--¿En serio? -- realmente Izuku no podía creer lo que su amiga le estaba diciendo.
--Si, así que vamos a arreglarnos y hacer que todos los del antro envidien a Kiri por la suerte que tiene de estar con nosotros dos --. Esas palabras animaron a Izuku logrando que sonriera más ampliamente.
--Entonces me voy a arreglar -- pero antes de levantarse de la cama, Ochako lo detuvo del brazo. --¿Pasa algo? --.
-- Al antro que vamos a ir, no es como el de la vez anterior. Este antro es de disfraces -- aviso antes de que Izuku preguntará más. --Asi que -- camino hasta su armario y entre sus cosas sacó una pequeña caja blanca. --Te tendrás que poner esto --.
Izuku agarró la caja y la abrió con curiosidad imaginando que clase de disfraz cabia en algo tan pequeño, hasta que se sonrojo al ver que era.
-- Ochako, jamás te pense tan pervertida -- soltó al alzar el pequeño pedazo de tela.
-- La verdad lo compre cuando cumplí un mes con Tenya, pero me di cuenta que era muy puritano para cosas así, por eso mejor lo guarde --.
--Si claro, solo para esto y no para tirarse a Momo -- soltó con desdén al recordar al peliazul y lo que hizo con la azabache.
-- Como sea, en fin está nuevo así que puedes ocuparlo con libertad --. Izuku asintió y empezó a ver como se colocaba hasta que vio lo que era una cola verde esponjosa.
--¿Y esto? -- pregunto al alzar aquella colita y notar que tenia una punta metálica. Ochako sonrió con perversión.
--Esto es algo llamado plug y se mete aquí -- susurro al acercar su mano al trasero de su amigo y tantear donde debía ir. Logrando que Izuku soltara un pequeño brinco ante el tacto de su amiga.
--¿E-Eh? -- Se sonrojo levemente y volvió a mirar lo que era un juguete sexual.
--Vamos, ponte el traje y yo te enseño como se coloca --. Izuku asintió y empezó a desvestirse en el cuarto de su amiga, mientras ella seguía buscando en su ropero algo especial que ponerse.
Hasta que encontró lo que hace mucho tiempo había comprado y ocupó sólo una vez. Aunque no recordaba con quien.
--¡Izu, lo encontré! -- grito animada y hasta feliz, pero al girar la cabeza y ver a su amigo no pudo evitar reírse de él.
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MI JODIDO COMPROMISO
DiversosLa amabilidad se paga de muchas maneras, unas de manera buena y otras no tantas, al menos eso lo sabe Masaru Bakugou, quien por confiar en sus empleados de hace muchos años, estos le pagaron de una manera horrible. Le robaron una gran cantidad de di...