Bueno se que es revelación, pero me gusta el título porque en una caricatura lo escuches y pos dije, porque no? Y bueno, eh aquí jajaja.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
—¿Quieres ser mi novio, deku? —.La pregunta llegó tan directa y sincera que por un momento hizo dudar a Izuku, quien se separó del abrazo y miro la pizza que aún se veía que estaba caliente porque despedía vapor.
Katsuki al ver esa reacción, no supo porque sintió cierto temor eh incluso rechazo, pero no dijo nada, solo se sentó en el sofá aun lado de Izuku y abrió la caja de pizza, la verdad tenía hambre y esa pizza se veía deliciosa.
El pecoso no dudo en ir a buscar un refresco y dos vasos para poder bajar la comida que estaban por devorar. En un intento de ganar algo de tiempo y ordenar sus ideas.
Cuando Katsuki vio el vaso de refresco que Izuku le extendía, lo agarro y con un suave gracias, siguió masticando su pizza de champiñones y jalapeños con bastante salsa picosa.
— Yo a los 15 años huí de casa, porque no soportaba que mi papá fuera tan estricto conmigo — Katsuki al empezar a escuchar eso, miro como Izuku se sentó a su lado — él decía que un joven decente y de elite como lo era yo, no podía vestir así, hablar así, comer así, beber así, ni salir a ningún lugar a divertirme, que debía guardar las apariencias para no ser señalado por mi mal comportamiento. Así que simplemente un día me aleje de Alemania y me vine a vivir a Japón, un lugar donde creí que mi papá no podía obligarme a no hacer eso o aquellos. Aquí conseguí un trabajo que me ayuda a pagar la renta de esta casa, también a pagar mi universidad y los libros que necesito para mi carrera —.
Katsuki había dejado de comer su rebanada de pizza y ahora su vista se centraba en las burbujas que había en el vaso de su refresco, dejando que Izuku siguiera hablando.
— Creí que aquí él no podría llegar y ordenarme nada, pero ¿Recuerdas el día que nos conocimos en aquel antro? —.
— Intento olvidarlo como no tienes ni idea — respondió Katsuki, logrando que Izuku se riera levemente.
— Bueno, ese día mi padre me había llamado para decirme que logro encontrar un buen candidato para que yo me casará —. Esas palabras lograron que Katsuki mirara a Izuku, quien desvió el rostro a un lado al no saber que cara poner. — Yo me negué y le dije a mi padre que no podía obligarme a nada, y menos comprometerme con alguien a quien no conocía. Pero él me dijo que eso ya estaba echo, así que en un arrebato de ira colgué y pensé que antes de ser amarrado a un ser que ni conozco, gozaría de mi sexualidad como nunca, que tendría sexo con quién yo quisiera y como quisiera, fue por ese motivo que en aquel antro deseé perder mi virginidad con alguien que yo quisiera, y bueno, una cosa llevo a la otra —.
—¿Comprometido? — al ver que Izuku asintió, Katsuki sintió algo de alivio al ver que él también podía poner las cartas sobre la mesa, ¿Que pasaría después? No sabía, pero de lo que si estaba seguro es que no podía perder esa oportunidad.
— Si vamos a dar este paso Kacchan, esto de ser novios, quiero que sepas ahora que aún es tiempo, de que estoy comprometido porque si los sentimientos crecen se que será duro si te enteras después —.
— También tengo algo que confesarte deku — esta vez fue el turno de Izuku de ver al rubio, quien veía el suelo — mi padre era un importante hombre de negocios, su astucia y perspicacia lograron que con el tiempo fuera un hombre muy poderoso, pero así como era de influyente, también tenía un corazón de pollo, y cuando su competencia supo de su debilidad, no dudaron en infiltrar gente a las empresas, esos hijos de perra se ganaron la confianza de mi padre solo para robarle información que fue dada a otros. Sin darnos cuenta en un abrir y cerrar de ojos, mi padre se fue a la quiebra y debiendo una enorme suma de dinero, una que si no paga en un par de semanas, irá a prisión por lo que le resta de vida —.
Izuku no podía creer todo lo que Katsuki estaba aguantando en ese momento, al parecer sus problemas eran pequeños a comparación con los del rubio.
— Así que mi papá le pidió ayuda a un viejo amigo, este acepto con la condición de que yo me case con su hija o hijo, ni siquiera se que mierda es, pero para ayudar a mi padre y para evitar que este pierda todo por lo que ha trabajado, me tengo que casar en un par de semanas —.
Con eso último, un silencio se hizo presente en la sala, dónde Izuku miraba sus piernas y Katsuki buscaba alguna mierda interesante en el suelo.
—¿Al menos sabes cómo es tu prometida? — Katsuki de inmediato nego.
— Cuando mis viejos me quisieron dar el nombre de quién sería mi suegro, yo me salí de mi casa y fuí a ese bar donde nos conocimos — de inmediato Izuku se rió suavemente al recordar el desastre que fueron los dos esa noche y no era para menos cuando tenían tal jodido compromiso encima —¿Y tú sabes el nombre del bastardo que será tu esposo? —.
— Antes de colgarle a mi padre, este solo me dijo que Misuro, no, eh Marito, no ese no, Murano, no creo que no, eh Mitoru, no eh Musuri, ¡Aaaah como me dijo que se llamaba su amigo! — en lo que Izuku intentaba recordar el nombre de su no suegro, Katsuki con más tranquilidad empezó a comer al sentir por primera vez en días un poco de alivio al haber dicho eso que lo tenía agobiado —¡Masaru! — pero aquel nombre recién salido de los labios de Izuku, hicieron que se le atorara el pedazo de pizza que acababa de tragar —¡Si, él amigo de papá de llama Masaru y su esposa Mitsuki! —. Dijo feliz el pecoso por recordar bien los nombres de sus no suegros, ignorando el echo de que Katsuki se estaba golpeando el pecho en un intento de bajar ese pedazo de masa que se resistía a hacerlo, hasta que bebió rápidamente un poco de refresco.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Wooooo, aquí está la relevación! Kyaaaaa los trapitos al sol! Jejejeje vamos a ver qué hace Katsuki ahora con la recién información de saber que Izuku es su jodido prometido.
ESTÁS LEYENDO
MI JODIDO COMPROMISO
De TodoLa amabilidad se paga de muchas maneras, unas de manera buena y otras no tantas, al menos eso lo sabe Masaru Bakugou, quien por confiar en sus empleados de hace muchos años, estos le pagaron de una manera horrible. Le robaron una gran cantidad de di...