Capítulo 17

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Capítulo 17: La necesidad de una madre


—Durante la presentación... Yo... También me sentí así —confiesa, su forma de hablar es un poco tosca, como si el alcohol que ha tomado ya le hubiese hecho bastante efecto—. Mientras bailabas... Me sentí... —se arrepiente un poco de lo que va a decir—. Lo siento si sueno un poco loco... Pero... Me sentí cálido. ¿Sabes? Como si... Como aquella sensación de volver al hogar luego de muchísimo tiempo sin estar ahí...

Jimin escucha esas palabras y sus ojos no tardan en llenarse de lágrimas, porque Yoongi siempre se sintió así para él. Como un hogar. Cálido, siempre cálido. Y cuando la persona delante de él cierra sus ojos mientras se le inclina más cerca, más y más cerca, él no sabe qué hacer.

Observa los labios del otro, tentadores, pero se queda en blanco mirándolos, mientras las lágrimas continúan recorriéndole el rostro y se replantea la existencia misma en tan sólo esos segundos. "¿Qué diablos debería hacer?", es lo que se pregunta una y otra vez, en aquel corto período de tiempo que para él transcurre en absoluta cámara lenta. Los ojos cerrados del otro es como si le dieran algunos segundos para pensar un poco más, pero se da cuenta que ya es tarde cuando éstos se abren en un ceño fruncido y se reclinan hacia atrás.

—Oh dios mío, ¿qué estaba haciendo? —se pregunta Yoongi, más para sí mismo, levantándose del asiento con dificultad y no atreviéndose a mirarlo—. Lo siento, lo siento de verdad —Y en esa torpeza, se pierde entre la gente.

Jimin se entera minutos más tarde, cuando regresa con el resto, que en verdad, el rubio había regresado a su casa. Y odia, realmente odia, el imaginarse a Yoongi vulnerable arrepintiéndose de lo que intentó hacer esta noche. Y se ve que en su rostro, se podía ver aquel gesto de preocupación, porque su mejor amigo no tarda en arrastrarlo lejos del resto, específicamente hacia la barra, y preguntarle qué había ocurrido.

—Creo que... Yoongi... Yoongi intentó... —titubea, Taehyung le mira con los ojos bien abiertos en expectación—. Intentó besarme... —expresa en voz baja, no queriendo que el resto escuche. Ante la confesión, se esconde detrás de su vaso de alcohol, siendo sorprendido por el grito que pega segundos después su acompañante.

—¿¡Yoongi intentó besarte!? —Rápidamente lo golpea para que hable bajo—. ¡¿Intentó besarte!? —pregunta ahora en voz baja. Park asiente con la cabeza—. ¡No puedo creerlo! ¿Te das cuenta de lo que eso significa? ¡Es como si... Como si...!

—¿Como si...?

—¡Como si ustedes estuvieran, algo así como, conectados por el destino! —expresa, Jimin le mira como si estuviera loco—. De verdad, yo no creía en las almas gemelas, ¿pero no crees que tal vez Yoongi y tú sean la prueba viva de que existen?

—¡Wow! —intenta calmarlo, no queriendo hacerse ideas erróneas en su cabeza—. No, no hay forma. Somos dos seres humanos que en un pasado, conectamos perfecto, y es completamente normal que al volver a vernos, eso vuelva a pasar. Tenemos personalidades compatibles. Esa es la respuesta. ¿Pero almas gemelas...? No. No hay forma.

—¿No hay forma o no quieres creértelo? Ahora que lo pienso, ¿por qué rayos no lo besaste de vuelta?

Silencio. Jimin juega con el líquido de su vaso sin atreverse a dar ninguna respuesta. Taehyung lo mira de manera insistente. 

—No lo sé —dice con simpleza, queriéndose sacar la pregunta de encima. Pero su mejor amigo no tiene pensado dejar el tema ahí.

—¿No lo sé? Cuando lo tuviste enfrente, esperando porque lo beses, ¿qué fue lo que se te pasó por la cabeza para no hacerlo?

Una vez más [YOONMIN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora