El chico nuevo

Capitulo 14

Me despierto cuando el sol comienza a darme en los ojos. Miro la hora: 6.00am. ¿Desde cuándo me despierto a esta hora? Miro a mi alrededor y veo que Agus, Maca, Sebas y Axel, están despiertos.

Me uno a ellos y vemos juntos el amanecer.

Peyton,Malvina, Flor, Mati y Lauti se despiertan una hora mas tarde. Desayunamos todos juntos y luego nos vamos.

El día pasa rápido. Me quedo en casa, con mis padres y mi abuela. Son las ocho de la noche y recibimos una llamada de Santi. Dice que por fin llegó, que el vuelo fue largo y agotador y que mañana a primera hora comenzaran a entrenar nuevamente.

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Mi abuela me llama mas temprano de lo que tenía pensado levantarme. Ya había preparado el desayuno. Bajo, y me encuentro con mis padres sentados también en la mesa.

-¿Ustedes no debían hacer reposo?- les digo casi regañandolos.

-Acabamos de volver del médico y nos dijo que ya podemos andar. Inclusive, esta tarde van a sacarme el cuello ortopédico-. Explica mi madre.

-Crei que debías usarlo al menos un mes-. Eso era lo que el medico me había dicho.

-Pues si. A si era. Pero me realizaron una placa y me dijeron que ya había sanado. Es increíble que halla sido tan rápido, pero de todos modos ya no hay riesgo. Y tampoco me duele.

-Ah. Y a ti papá, ¿Debes seguir con el yeso?

-Si, al menos por esta semana. Pero no es tan molesto. Un punto a favor es no ir a trabajar-. Nos hechamos a reír.

Terminamos de desayunar y subo a sacrme el pijama y vestirme. Veo que tengo una llamada de Peyton. ¿A esta hora? ¿Habrá pasado algo? Lo llamo.

-Hola, Peyton, ¿Está todo bien? Acabo de ver tu llamada y por la hora me preocupé.

-Hola hermosa. No, no te preocupes no paso nada. Recibí una llamada de la profe de Arte y dice que le encantaría que participemos de la feria de arte de la ciudad.

-¡¿De verdad?! ¿Y qué le dijiste?- me emociona la idea de que la gente vea lo que hago. Y lo lleno de preguntas al respecto. Ignorando el hecho de que me llamo la atención de que me halla llamado hermosa.

-Le dije que nos encantaría. Pero...

-¡¿Pero qué?!- lo interrumpo.

-La feria es este domingo y debemos realizar al menos 8 pinturas para que sea interesante.

-¡¿8 pinturas? ¿Está loca?! Solo tenemos cuatro días...

-Lo se, pero nos esforzamos... además, podemos trabajar juntos. Esperaba que vinieras a mi casa y...

-De acuerdo. Nos vemos esta tarde en tu casa.

-Aquí te espero.

Cuelgo el teléfono e inmediatamente entro en internet en busca de inspiración. Imprimo algunas imágenes. Traté de que sean lo más fáciles posible, puesto que tenemos poco tiempo y que nos valla bien, no significa que seamos profesionales.

Por la tarde, voy a casa de Peyton, tal como habíamos quedado.

-¿Te parece que pintemos en el patio? Necesitamos espacio y tengo una mesa lo suficientemente grande, o al menos lo parece-. Dice cuando entro en su casa.

-De hecho, creo que es mejor-. Le digo y aseinte con la cabeza.

Preparamos todo y empezamos. La tarde es hermosa, y es perfecta para pintar.