Capitulo 15

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Hoy es miércoles. Son las 12 del mediodía y apenas me estoy levantando. Ya me había olvidado de lo mucho que me gusta esto. Dormir sin alarma, sin pensar en que al otro día tengo que entregar un trabajo o tengo un examen. Me estoy acostumbrando otra vez y creo que ve a ser difícil el lunes cuando tenga que volver a la rutina.

Quedé con Agus y Flor para ir a caminar esta tarde. Hace mucho que no hacemos una salida nosotras tres solas. Necesitamos hablar de todo. Chismes, cosas personales, y hasta chicos, si es necesario.

Terminamos de comer y salgo un rato al patio. Pienso en llamar a Peyton, pero Agus me gana y ella me llama primero.

-¡Hola Agus! ¿Como estás?

-Hola Estefi, muy bien. A la que no se que le pasa es a Flor.

-¿Por qué? ¿Se pelearon?

-¿Qué? No nada que ver. Pasa que me llamó recién para avisar que no va a salir con nosotras hoy.

-¿El qué? Pero si ella organizó esto.

-Lo se. Pero me dijo eso.

-Bueno, ella sabrá. Hablemos con ella en otro momento.

-Vale. Paso por tu casa a las tres ¿Te parece?

-Claro. Te espero.

-Adios.

Agus pasa a la hora que habíamos acordado. Vamos al puerto. Entre la calle y la vereda, hay una senda diseñada especialmente para la gente que sale hacer deporte. A si, no estaban a los que van por la vereda ni a los autos. A si que, vamos por allí.

Vamos comentando lo raro que es que Flor halla abandonado. Normalmente, ella es la deportista del grupo. A demás, ka que organizó la salida.

Caminamos na hora y media y nos da hambre, entonces vamos a un bar que esta cerca de la escuela. Hacen la mejor comida del mundo. Íbamos a ir al restaurante del tío de Peyton, Mycol, pero nos acordamos de que solo abre de noche los días de semana y por la mañana para desayunar.

Cuando llegamos nos quedamos paralizadas, con la boca abierta. Flor y Axel están sentados del otro lado de la entrada. Justo al lado de la ventana mas grande y con la mejor vista al río. Axel nos ve y nos hace una seña para que nos sentemos con ellos. Dudamos, están en una cita, va a ser un poco incómodo tanto para ellos como para nosotros a si que, solo nos acercamos a saludar.

-A si que, por esto no viniste con nosotras a caminar-. Dice Agus. Ellos se ríen, mientras que yo le pego por debajo de la mesa en el pie.

-Ya, no molestes-. Le dice Axel, en forma de broma.

-Lo siento chicas. Pero, paso a último momento-. Explica Flor.

-No te disculpes- le digo -Esto es genial. Vamos a sentarnos por allá, dejemoslos solos-. Agrego mirando a Agus.

-Ok. Tu sientate y yo pido.

Agus vuelve con dos licuados enormes y un trozo de pastel para cada una. ¿Salimos a caminar y esto es lo que comemos?

-¡Agus!- exclamo. Pero ni muy fuerte, no quiero que me escuche el bar entero.

-¡¿Qué?!- señalo la comida. -Tenemos hambre ¿no?

-Si, pero... ¿Salir a caminar y comer esto? Eso no de resultado.

-Ya, vale, devolveré las tortas-. Dice y se levanta en dirección al mostrador. Iba a detenerla, detesto devolver la comida, pero considero que no es buena idea comer tan pesado después de hacer ejercicio y menos en la merienda.

Vuelvo la mirada hacia Flor y Axel, se están divirtiendo.

-Es increíble ¿no?- dice Agus cuando vuelve.

-De hecho, si... después de la última vez...- Flor estuvo de novia con el capitán del equipo de handball, Chris, y le rompió el corazón. Ella, juro nunca volver a enamorarse en la secundaria.

-No puedo creer que halla roto su promesa-. Sigue Flor.

-No me digas que se lo has creído. Eso es increíble.

-¿Qué? ¿A caso tu no?

-Ni en broma. Somos adolescentes Agus, es imposible no enamorarse en la secundaria, a demás, ¿Qué tiene de malo? Se está conociendo y fueron al baile juntos.

-Tienes razón. ¿Y a ti qué tal te va con Peyton?

-Exelente, pero...- tengo que contarle lo de Facu.

-¿Pero qué? No me digas que no es tu tipo-. Interrumpe durante mi pausa.

-No, nada de eso. Pasó que volvió a aparecer Facu-. Abre los ojos como platos y se ahoga con el batido.

-¿Qué? Cuéntame todo ya-. Dice tosiendo.

-Vale. Fue el día de la inauguración del restaurante. Estábamos bailando, Peyton y yo, y el decidió ir a buscar algo de beber. Entonces llegó Facu y me pidió de ir a hablar afuera. Me hizo una escena de celos sobre por qué, habíamos terminado nuestra amistad y por qué había dejado de hablarle desde que fi a Hawaii.

-¿No fue justamente por eso?

-Si, pero me planteó también que no lo había llamado, ni mandado mensajes, ni había hablado con el cuando regresamos a clase. A demás...

-Sigue, no hasgas esas pausas me ponen nerviosa-. Me apura.

-Vale, vale. Me dijo que durante el tiempo que fuimos amigos, sintió algo mas por mi, que después de lo del beso quería algo mas serio, pero no se animaba a decírmelo, entonces le solté que por qué lo había ocultado y que si me lo hubiese pedido le habría dicho que... si.

-¿Qué?

-Tal como lo has escuchado. El problema es que Peyton escuchó. No se desde que parte pero esto último, si.

-¿Se pelearon? Ah, con razón estuvo tan raro esa semana...

-Si, pero ahora lo arreglamos.

-Ah, o sea que...

-Si, somos novios oficiales.

Agus aplaude de alegría y grita con una voz insoportable. Trato de calmarla, puesto que todo el mundo se ha volteado a vernos, incluso Flor y Axel, que se están riendo.

Nos quedamos en silencio unas minutos y vemos que los chicos se van. Juntos. De la mano.

-Debemos hablar de inmediato con esa chica-. Dice Agus.

-Puede que si. Quiero que me cuente todo.

Nos vamos. Llego a casa cerca de la hora de cenar, a si que me doy una ducha rápida y bajo a comer. Caigo rendida en mi cama. Estoy quedando dormida cuando suena mi teléfono. Es Peyton.

-Hola, ¿Cómo has estado?

-Bien, creí que te había pasado algo, no me llamaste en todo el día.

-Perdón, es que salimos a caminar con Agus.

-Oh. Bueno, te deseo buenas noches. Mañana nos vemos ¿Vale?

-Claro. Que descanses.

-Tu igual.

Hablar con el antes de dormir es hermoso. Me dan ganas de ver una película, pero se que no aguantaré hasta el final,  a si que, tomo mi libro y me quedo dormida, justo a la mitad de la historia.

El chico nuevoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora