🌬Lo Que El Viento Me Trajo

Cap 26. Pagina en blanco.

⚠️#Nota: Este capitulo es continuacion del capítulo anterior por lo tanto es algo que toma lugar en un suceso del pasado.⚠️

Kageyama estaba en las últimas había bebido demasiado, muy apenas y podía ponerse de pie, la pelea con Atsumu le dolía, ellos casi nunca peleaban, rara vez lo hacían, pero cuando lo hacían ponían todo pies arriba, ambos tenían un temperamento de los mil demonios y con eso lograban herirse.

-Señor disculpe, gusta que llame a alguien que venga por usted.

-No, no es necesario, de todos modos gracias.

Kageyama se levantaba de la barra donde solo estaba el, no supo el que momento el tiempo voló pero ahora todo estaba fuera de lo normal, no se sentía bien, se tomó la cabeza por que sentía que en cualquier momento se la caería de tan pesado que se sentía, ahora caminaba a duras penas hacia afuera, quería encontrar un taxi e ir a casa, el chico que anteriormente coqueteaba con el, estaba fumando afuera.

-Puedo llevarte a tu casa si quieres.

-eres muy amable, pero no.

-Eres difícil de roer,  tienes novio?

-Novio? Yo no tengo esa clase de cosas.

-Entonces no se por que te aprietas tanto.

-Que te importe mierda.

Kageyama contestó, muy apenas podía hablar y sostener la mirada, aquella sustancia hacia efecto en su cuerpo aunque el no lo supiera, y también estaba triste, quería decir que si tenía novio, quería gritarles a todos sobre el y Atusmu, y eso era lo que más dolía, aunque Atsumu tenía razón, hacer su relación oficial significaría que todos pusieran sus ojos en el, y también sería duro para los dos, tal vez así era como debía ser, que importaba ponerle una etiqueta a su relación con que ambos pudieran estar juntos.

Sonrio y tecleo un numero en su teléfono, pero nadie contestaba, quería ver a Atsumu y arreglar las cosas, no le gustaba pelear de esa manera con el, le gustaba más cuando ambos tomaban una ducha y desayunaban juntos después de una noche de pasión, los besos y caricias entre risas no faltaban.

Pronto paso un taxi, Tobio lo tomo como pudo, había pensando ir  a su casa pero se arrepintió y termino dando la dirección de los Miya, añoraba su calor y eso era todo lo que podría estar bien.

Alguien tocaba la puerta, el Miya aún seguía despierto, acababa de llegar de una reunión de trabajo que se convirtió en un festín de bebida, no había bebido demasiado aún así, podía sentirse mareado, pero en vez de dormir prefirió beber algo más en casa.

-Quien podría ser a esta hora?

Se levantó del sofá dejando su copa en la mesa y abrió la puerta esperando a que tal vez fuera su hermano, total aún no llegaba y tal vez no lo haría. Sus ojos se abrieron como platos, era Kageyama, estaba en el suelo esperando a que alguien abriera, tan pronto como Tobio lo vio se puso de pie y lo abrazo.

-Quiero estar contigo amor, yo siento todo lo que dije, no me importa como sea.

-Ka..geyama.. espera estas muy borracho.

-Estoy borracho por ti, no soporto estar así contigo.

Kageyama beso los labios del otro, mientras este lo sostenía por la cintura evitando que se cayera, el sabor a licor en sus labios era dulce y eso a Osamu le comenzaba a gustar, pero estaba en shock, Tobio se avalanzaba sobre el por que pensó que era Atsumu, debía estar demasiado tomado para hacerlo, los múltiples movimientos de Tobio, arrastraban a Osamu adentro de su hogar, como pudo cerro la puerta, pero su deseo le traicionaba, Tobio era hermoso y su fino cuerpo seducirian a cualquiera, el Miya posó su mano por debajo de la camisa del pelinegro, su piel era suave además de que era muy delgado.