Capitulo 32

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Valentina no sabía que decir, lo único que escuchaba eran los gritos lejanos de su hermana "Te dije que te cuidaras Valentina!", "En que mierda estabas pensando!" "Habla maldita sea!" mientras Mariana cargaba a su hijo recién descubierto en sus brazos.

Una vez más leyó la carta que Lucia la había dejado en el bolso con las cosas del bebe:

"Lo siento Valentina, seguramente te estarás preguntando porque te dejé al bebe pero la respuesta es obvia, es tu hijo Valentina, Gabriel es tu hijo, lamento no habértelo dicho cuando me lo preguntaste, pero tenía miedo de que mi hermano te hiciera daño, él está mal de la cabeza y se volvió loco cuando se enteró de mi embarazo, me juró que mataría al padre de mi bebe, por eso te lo oculté.

Creí que iba a poder con esto pero no puedo, no puedo hacerme cargo de él, soy demasiado joven para una responsabilidad tan grande, él no será feliz conmigo, yo no puedo darle el amor ni todo lo que necesita, por esa razón he decidido dejártelo, sé que tú lo harás feliz, lo cuidaras y le darás mucho amor, yo me iré muy lejos, donde mi hermano no me encuentre, espero y me sepas perdonar Valentina, cuida a mi bebe y se feliz. Lucia"

Más lagrimas empezaron a rodar por sus mejillas y arrugó la carta casi al punto de romperla.

-Valentina! -sintió como su hermana se sentó a un lado de ella.

-Todo esto es mi culpa! -se lamentaba- perdí a Juliana y ahora esto!... -estaba quebrada- no debí hacerle caso a Lucia, debí haberme cuidado ¡fui una maldita estúpida!...

-Ya Valentina tranquila!... -Eva ya se había tranquilizado, veía tanto dolor en su hermana, que no tenía caso agobiarla con más reclamos.

-¿Que voy hacer? -la ojiazul miraba a su hermana tratando de encontrar respuestas a varias preguntas que cruzaban por su cabeza.

-Pues lo correcto Valentina, le darás tu apellido a ese bebe que no tiene la culpa de tus errores ni los de su otra madre, es tu hijo, es igualito a ti, no puedes abandonarlo, no lo voy a permitir, yo estoy contigo, tienes todo mi apoyo...

-También puedes contar conmigo -le aseguró Mariana- Además me agrada la idea de tener un sobrinito... -sonreía viendo al pequeño Gabriel que dormía plácidamente en sus brazos.

-Gracias!... -Valentina sonreía por primera vez después de todo lo que había pasado con Juliana y Lucia.

Fijó su mirada en el pequeño Gabriel, que era igual a ella, piel blanca, ojos azules, cabello castaño, era una copia exacta de ella, se veía tan frágil y tan ajeno a todo lo que pasaba a su alrededor y no podía creer que esa cosita tan pequeña fuera parte de ella.

Y ahí lo supo, supo que haría lo que fuera por hacerlo feliz, Lucia pudo haberlo abandonado, pero ella no, ella le daría amor y todo lo que pudiera.

-Mi hijo!...

Al otro día...

-¿Estás segura que puedes quedarte con él? -la ojiazul le preguntaba a su hermana mientras le daba un sorbo a su jugo.

-Si no te preocupes, en el hospital me deben algunos días y los solicité para poderme quedarme con este precioso!... -le daba un beso a su sobrino.

- Ok... -suspiró acercándose a su hijo dándole un beso en la frente- Te quiero!...

- Recupera a tu chica Valen...

- Me dejo de llamar Valentina Carvajal si no lo hago -dijo decidida.

En el colegio...

Juliana entraba al colegio rápidamente y al primero que se encontraba era Javier Camacho, recostado en su casillero.

Beside You Juliantina g!p adaptDonde viven las historias. Descúbrelo ahora