Beside You Juliantina g!p adapt

Capitulo 39

Juliana no sabía si llorar, si gritar o tirarse al piso y quedarse allí todo el día, mientras olvidaba todo lo que había escuchado salir de las bocas de Valentina y Eva.

"Lo siento Juls, tus padres murieron en el accidente que tuviste junto a ellos, no se pudo hacer nada para salvarlos"

"Estuviste dos meses en coma y durante ese tiempo entraste en una especie de dimensión desconocida y viviste una vida diferente a la que tenías hasta antes del accidente"

"Ninguno de los recuerdos que tienes son verdaderos"

"Perdiste la memoria y no sabemos si la recuperaras"

Hace unas horas le habían dado de alta y después de las miradas de compasión que había recibido de personas desconocidas en el hospital, Valentina finalmente la había llevado a su casa, "Vamos a casa" le había dicho.

Las piernas le temblaban, sentía que en cualquier momento le iban a flaquear y se caería.

Se sentía extraña, miraba detenidamente el interior de la casa, los muebles, las paredes de color blanco y naranja, los adornos, pero todo era desconocido para ella.

Fijo su mirada en los cuadros que adornaban las paredes.

Había fotos de ella, de Valentina, de las dos juntas abrazadas, en lo que parecía su graduación, de ellas junto a Lucia, Javier, Verónica, Lucy, Dany, con dos chicas que no conocía, Eva, los padres de Valentina y por último sus padres.

Macario y Lupe se veían tan felices y por lo poco que Valentina le había contado de ellos, no tenían nada que ver con los padres que ella recordaba.

Se sentía frustrada, maldecía no poder recordar su verdadera vida, maldecía el hecho de que los únicos recuerdos que tenia de sus padres eran de una vida que nunca había tenido, recordaba a unos padres despreocupados a quienes solo les importaba su trabajo.

Una lágrima traicionera rodaba por su mejilla, no entendía que había hecho para merecer algo así, negó con la cabeza intentando olvidar su dolor pero no podía, todo seguía allí atormentándola, su mirada esta vez se posó en una especie de "altar" se acercó a él y un nudo se formó en su garganta apenas vio las fotos que habían encima de él.

Miro su mano y allí se encontraba un hermoso anillo, regreso su mirada a las fotos y no pudo evitar descomponerse, eran fotos de ella y Valentina del día de su boda y se veían muy felices, empezó a marearse y grandes punzadas taladraban su cabeza.

"Te amo Juliana, sé que he cometido muchos errores a lo largo de mi corta vida -sonrió divertida- pero ahora soy una nueva Valentina gracias a ti, has sido mi luz al final del túnel, has llenado mi vida de felicidad, por lo que sería una idiota si no quisiera pasar el resto de mi vida contigo, sé que somos muy jóvenes para casarnos, pero quiero que aceptes este anillo -sacaba un anillo de uno de sus bolsillo y se lo mostraba a la morena que estaba con la boca abierta- no es un gran anillo, pero te prometo que cuando gane suficiente dinero, pondré un gran diamante en tu dedo como tú te lo mereces -la voz se le quebraba- quiero que aceptes este anillo como una promesa de mi amor, como una promesa de una vida a tu lado Juls, porque quiero cuidarte, amarte, despertarme todas la mañana y lo primero que vea sea tu rostro, quiero que seas la mamá de Gabriel y la madre de los demás hijos que tengamos ¿Qué me dices Juls? ¿Quieres?...

-Di que si! -Juliana oía los gritos de Mariana que estaba unos metros más allá junto Dany, nadie se había percatado en qué momento habían llegado.

-Juls?...

-¡Carvajal! -escucharon un grito, todos se giraron y vieron como Javier se acercaba lentamente a ellas, la ojiazul rápidamente se levantó y se colocó frente a la morena.