Mejor Amigo ©

Capítulo 36

Realmente el cuerpo de Sebastián estaba muy débil, su piel pálida y su respiración muy ligera.

Y es que él llevaba varios días comiendo poco, a veces dormían sin comer, ¿Razón? Unos chicos se habían encargado de recordar su pasado, un pasado que creía enterrado.

Luna ingresaba al cuarto en donde tenían atrapado al débil chico.

—Te veo bastante pálido, y no soy tan mala, sigues siendo de mi sangre; te traje comida, y no aceptaré un "no" como respuesta—

Sebastián tenía sus dudas, pero decidio aceptar el plato de comida.

—¿En qué momento cambiaste, Luna? Tú antes no eras así—

—El amor cambiAla, ¿No?——

—Pero a ti cambió para mal; recuerdo que nosotros eramos felices en las reuniones familiares, eramos los primos inseparables, ¿Recuerdas cuando hicimos la broma del ratón falso en la fiesta de nuestra abuela?—

Luna río al recordar eso.

—Claro que recuerdo, todos gritando como locos por el Supuesto ratón; ¿Recuerdas cuando le cambiamos el shampoo a tu hermano por colorante?—

—Esa estuvo buena, eramos los mejores primps, ¿Qué nos cambió?—

—Yo.....supongo que enamorarse de la misma persona nunca es buena idea—

—Luna....¿Realmente te gusta?—

Luna miró a su primo y luego bajó la mirada.

—Dime la verdad....—

—No....Nunca me gustó él, pero mis padres....—

—¿Qué tiene que ver mis tios?—

—Ellos trabajan para el jefe de los narcos y me obligan a acostarme con él....y....querían que yo estuviera con Daniel, los padres de tu novio tienen mucho dinero y los mios están detrás de ese dinero, ellos supucieron que si yo salgo con el heredero de toda esa fortuna, ellos estarían "nadando" en más plata—

—¿Tus padres son consientes que Daniel tiene 3 hermanos, y de que la herencia no solo le corresponde a él sino que también a sus hermanos?—

—A mis padres sólo les importa el dinero, lo demás para ellos no es importante; ¿Por qué crees que mi papá y tu mamá no se llevan bien? Son hermanos, pero son totalmente distintos—

La noche llego en la gran ciudad de Nueva York, y grupo de personas se preparaban para ir a una misión bastante peligrosa.

—¿No me dejarán a mi aquí sólo verdad?—

Valeria y Samantha se miraron seriamente entre ellas; Samantha suspiro pesadamente y luego habló.

—Vendrás con nosotros, pero te quedarás en el helicóptero dónde estarás sano y salvo, ¿Me entendiste?—

—De acuerdo, entiendo—

"Está loca si creé que me quedaré ahí" Pensó Daniel.

—Y pobre de ti dónde salgas del helicóptero—

—¿Desde cuándo conoces a este fastidio, Valeria?—

Samantha golpeó la cabeza del ojimiel.

—Fastidio tú, a mi me respetas—

El helicóptero volaba por el vuelo oscuro. Valeria miraba con unos binoculares hacía bajo mientras que Samantha vigilaba la computadora donde se mostraba la ubicación de Sebastián.

Daniel estaba en su celular mirando las fotos que tenía con el menor, desde que eran amigos hasta ser novios.

—Valeria, la computadora dice que estamos cerca—