Había pasado una semana desde la discusión con su sobrina, y a pesar de que al menos sí se hablaban, el ambiente seguía tenso. La adolescente se acercó a disculparse varias veces con Ochaco, pero ella solo fingía una sonrisa y le indicaba que estaba bien. Naomi sabía que no estaba bien, sabía que había actuado de forma impulsiva y su psicóloga le había instado a que buscara el momento para sentarse frente a su tutora, su familia y hablaran al respecto. Pero la Uraraka menor no sabía cómo hacerlo.
Durante esa semana, prácticamente fingían que nada había pasado, y eso solo empeoraba el problema. Todoroki también comenzaba a mostrarse hastiado por el asunto, aunque también trataba de pasarlo por alto. Si seguían así, todo se iría al demonio nuevamente.
Fue por ello, que, tras no soportarlo más, al salir de la escuela no fue directo a casa como Ochaco se lo había ordenado. Sí la llamó para indicarle que estaba de salida, pero se desvió hacia el canal donde su tía trabajaba, y como muchos también la conocían, pudo acceder sin problema alguno.
Recorrió esos pasillos a paso lento, dándose cuenta que siempre algo estaba cambiando. Varias veces Ochaco tuvo que llevarla después de la escuela cuando recién se había mudado con ella, pero con el pasar del tiempo y al ver que poco a poco la menor iba recuperándose, le dio su confianza para que fuera directo a casa.
Se detuvo frente a un portón con el número 2 escrito en grande. La luz roja indicaba que estaban en grabaciones, pero siendo la terca y curiosa quinceañera que era, se acercó de todos modos a ver qué se estaba llevando a cabo ahí. Con mucho cuidado, empujó una puerta que estaba en la orilla e ingresó, procurando mantener todo el silencio posible.
A lo lejos notó que era el set para esa serie de época que grababan: en escena estaba Camie Utsushimi, la había visto un par de veces en persona, pero más que nada la reconocía por sus roles secundarios en un par de películas. Quedó de piedra al ver con quien compartía escena: nadie más y nadie menos que Katsuki Bakugo. Ese infame actor que sus tíos habían dicho era lo más insoportable de la vida, pero que aún así era reconocido por llevar a cabo varios papeles con un profesionalismo envidiable. Era increíble verlo meterse por completo en la piel de un personaje, que, según lo que pudo captar, era alguien más bien humilde y al parecer el interés romántico del personaje de Camie. Volvió a Tierra cuando la voz del director se alzó con un "¡corte!", dejando justo a ambos actores a punto de dar un beso.
—Al fin —masculló el rubio, alejándose rápidamente de su compañera quien reía—. ¿Qué?
—No creo que sea tan desagradable trabajar conmigo, Kacchan.
—Eres un jodido grano en el culo, Utsushimi.
—¡Ah, ah! Te equivocas, mi querido compañero, ya no soy Utsushimi, recuérdalo.
Ambos actores se movían entre los distintos asistentes, camarógrafos, tramoyas, etc., hacia la salida. Camie aún cojeaba, por lo que su avance era más lento.
—Compadezco al imbécil que decidió casarse contigo.
—Seiji es un hombre maravilloso que me ama y me acepta como soy, pesado —le sacó la lengua—. Algún día tú hallarás esa estabilidad y te acordarás de lo que te digo.
El rubio resopló, siguiendo su camino. Lamentablemente, Naomi no había alcanzado a huir, por lo que ambos adultos se quedaron de pie frente a una nerviosa adolescente de cabello rojo y ojos achocolatados. La forma de ellos le hizo acordar a alguien al joven actor.
—¿Y tú, mocosa?
—Oh, creo que te he visto antes, ¿no? —añadió Camie, mirándola curiosa.
![](https://img.wattpad.com/cover/269952726-288-k103830.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Bajo Los Focos
FanfictionPara Ochaco Uraraka, una joven maquilladora de un canal de televisión balancear una familia, un trabajo y su vida personal era algo que creía que comenzaba a dominar de a poco... ...Pero no contaba con que la promesa actoral, Katsuki Bakugo, llegara...