¿La villana ha cambiado? [I]

Familia de guerreros

Pov: Myoui Mina. 

Fue difícil. Aceptar esta nueva realidad fue más complicado de lo que había pensado; los primeros días fingí estar enferma para no ver a las personas, me sentía agobiada, pérdida, casi sofocada por estar viviendo en esta realidad. En más de una ocasión escuche detrás de la puerta como las personas hablaban de mi, al parecer ninguno de ellos parecía creer que me levantaria, y probablemente hubiese cumplido sus expectativas sino fuese por el hecho de que tenía que salir de aquí junto a mi mejor amigo.

Luego de aceptar que tendría que vivir con esta nueva identidad, hice una exhaustiva búsqueda para saber quién era realmente Myoui Mina; no quería parecer una extraña, pero era difícil comportarme como la antigua dueña cuando nadie me decía cómo era la chica. A lo largo de los días me vi en la obligación de llamar a Matt por el nombre de Hyunjin, ya que aun no me había asegurado de que realmente era él, así que no podía arriesgarme a estar equivocada: me estaba aferrando a la mínima esperando de que realmente fuese mi mejor amigo. Eunwoo se encargó de explicarme cómo funcionaba este mundo, hice todo lo posible para no parecer muy interesada en el tema, no deseaba llamar la atención innecesaria ni que los médicos me revisaran, así que de vez en cuando escuchaba las conversaciones para comprender con mayor claridad sus costumbres. 

La información que pude rescatar alrededor de las primeras semanas de mi llegada fue que estaba en el siglo XVI más específicamente en el año 1520, y que era la hija de un noble, pero no de cualquier noble sino del mismísimo Duque y mano derecha del Rey, o sea, era una niña rica con mucho poder. Eunwoo me explicó que los nobles eran divididos por estatus social, por lo general se podía subir de estatus mediante recompensas que eran hechas por el mismo Rey o por dinero, según él, había más probabilidades de conseguir subir tu rango social a través del dinero que por acciones honorables. En este mundo, el noble de menor prestigio era el Barón, luego de este seguía el Vizconde, luego de él continuaba el Conde, después el Marqués, siguiente el Duque, y finalmente el Rey, por ende el padre de este cuerpo por el simple hecho de ser el Duque tenía el mayor poder entre los demás de la nobleza-por así decirlo, podrías mirarlos en menos-. También me comentó que el simple hecho de ser la única hija del Duque era intocable, por cual, si quería podría lastimar a las personas y saldría impune a menos que la persona que hubiese atacado fuera uno de los hijos del Rey o el mismo Rey, pero que hasta en esos casos había una gran probabilidad de que no me pasara nada, luego de escuchar su explicación comprendí por qué los sirvientes temblaban cuando pasaba cerca de ellos, esta es solo una suposición mía, pero al parecer la dueña de este cuerpo era una bastarda con sus trabajadores, o sea, una abusiva que miraba a los sirvientes como si no fueran personas, y quién peor lo pasó definitivamente debió ser Sana, mi sirvienta personal.  

Sana era una chica guapísima, pero tenía cicatrices tantos en sus brazos como en su rostro, no he querido indagar mucho en el tema, pero por como reacciona cada vez que la miro sé que esas cicatrices debieron ser realizadas por este cuerpo. Maldita cabrona, como pudiste lastimarla, pensé mientras que seguía viendo como Sana ordenaba mi ropa. Ah sí, en temas de ropa, al parecer esta Mina era fanática de los corsés y los vestidos, estoy casi segura que tengo la suficiente ropa para vestir a una ciudad por completo, pero bueno, supongo que son gastos estúpidos de gente rica. 

La primera vez que me puse un corsés sentí que mi aliento había quedado atrapado en mi garganta mientras que mis pobres costillas a penas estaban soportando la presión, sinceramente, no sé cómo las mujeres de esta época pueden vivir y comer con esa cosa puesta, porque después de esa desagradable experiencia me negué rotundamente a usar uno nuevo otra vez: estaba demasiado acostumbrada a mi ropa militar, y no deseaba experimentar algo distinto ya que no iba a estar por mucho tiempo en este mundo. En un principio pensé que mis nuevos padres estarían en desacuerdo ya que se supone que el corsés es la parte fundamental en la vestimenta de las damas, mi madre, la gran Duquesa quien se veía que era fanática de la belleza fue la primera en estar de acuerdo, así que no me lo esperaba; al parecer los padres de esta Mina realmente la aman mucho, eso me da un poco de envidia, pero bueno, no hay mucho que pueda hacer al respecto.