Hechicero Supremo

Capitulo 34

¿Alguna vez habían necesitado organizar con sus múltiples prometidas y novia las fechas razonables para casarse? Harry lo había hecho y no había resultado bien para nadie.

Entre las chicas discutiendo quien iría después, Hermione negándose a casarse hasta ser adulta legalmente y la mayoría no queriéndose casar hasta que Hermione se casara con él por orden de jerarquía (al parecer Luna fue la primera por ser su protegida y Fleur porque eran tradicional de que en un harem hubiera al menos una veela involucrada, Hermione debió casarse antes con él por ser su mejor amiga desde sus once años), Sirius burlándose de la situación mientras Remus decidía ser más discreto con su diversión y regañar a su prometido con falsas amenazas, los otros adultos se habían unido al disturbio cuando Xenophilius junto a Sirius habían formado un club de apuestas acerca de quien sería la siguiente.

Fue al final que se decidió por sorteo, el sombrero seleccionador de Hogwarts se había ofrecido a ser el recipiente para sostener y revolver los papeles simplemente para mantener la tradición muggle que quería Hermione, los papeles tenían diferentes edades de Harry a quien se le había quitado el derecho a elegir luego de que todas lo amotinaron con ayuda forzada de Neville, su mejor amigo fue extorsionado por Susan de todas las prometidas de Harry y el rubio cenizo nunca quiso hablar acerca de con que lo amenazó, y la mirada burlista de Snape por ver al hijo de su némesis ser sudyugado por tantas mujeres a pesar de haber vencido a Voldemort.

Harry se consoló con el hecho de que Snape estaba más solo que un perro callejero y por eso no conocía lo que una mujer o mas bien dicho un grupo de mujeres podían hacerle a su prometido cuando están enojadas, el pelinegro ya había tenido mucho con Hermione y Luna enojadas y era un rotundo no para hacerlas enojar de nuevo lo que incluía hacer enojar a las otras.

A pesar de que dejó que sus prometidas y novias se arreglaran decidiendo fechas para asegurarse de que todas las fechas estuvieran lo suficientemente espaciadas unas de las otras, eso no evitó que Harry se luciera en sus propuestas de matrimonio y por supuesto que no iba a dejar que ninguna de sus compañeras se sintiera menospreciada porque no se había tomado el tiempo para hacerlo.

De hecho esas propuestas serían contadas a sus hijos en el futuro y Harry estaba decidido a ponerle a sus futuros hijas e hijos en ley una bandera de propuesta demasiado alta.

Luna había sido la primera y fue en un lugar con un significado para el, pero ella había decidido que su propuesta había sido tan romántica y significativa considerando que eran viajeros en el tiempo y aquella habitación tenia significados ocultos que ninguno salvo Hermione se enteraría.

Fleur había sido en un columpio en un lugar apartado a la luz de las estrellas luego de haber ido a cenar al mismo restaurante al que Harry la había llevado a su primera cita.

Hermione había recibido dos confesiones realmente, la primera había sido en el baño en la que había sido atacada por el troll cuando tenían once y doce años respectivamente, en donde Harry le había pedido ser su novia de una manera algo patética, pero sentimental. La segunda fue para pedirle matrimonio y le había regalado una biblioteca que después se conocería como la Biblioteca del águila dorada, cuyo nombre hacia analogía hacia la antigua casa de Hermione con la que debió estar en Hogwarts, después de todo aquel castillo había sido importante en su juventud.

Parvati había recibido un salón de baile, uno en el que se celebrarían los eventos más importantes de la corona entre ellos las bodas de sus hijos y sus descendientes como tradición familiar.