aunque no me quieras

capitulo 3

Effie me peinaba mientras lloraba y mi madre por otro lado hacía lo mismo caminando de un lado a otro sabía que estaba desesperada.

―lo lamento mucho niña Krisna si yo pudiera hacer algo por usted ―murmuró Effie para que los dos hombres que estaban afuera cuidando que no me escapara no la escucharan―. No dude que lo haría.

Sonreí tristemente

―lo sé perfectamente Effie―tome su mano para besarla―. No te preocupes por mí solo me puedes hacer un favor.

Ella se inclinó para estar a mi altura

―como no niña Krisna.

―si vuelve Axel si tienes esa oportunidad dile que fue lo que pasó aquí―mis ojos se cristalizaron―. Dile que lo estaré esperando.

Ella asintió

―le prometo que le daré su mensaje niña―me quito un mechón de cabello que caía por mi rostro cubriéndome un ojo―. Sir Axel sabrá lo que sucedió aquí le doy mi palabra.

Baje junto a mi madre y a Effie sentía que me estaba muriendo por dentro cuando llegue al final de la escalera estaba mi padre con una sonrisa esperándome.

―te ves hermosa―me dijo―. Tu prometido te está esperando cariño.

Mi madre limpiándose las lágrimas miró al hombre que hace poco era mi padre.

―ya basta con esto bruce―le suplico―. Si quieres castigar a alguien que sea a mí déjala que se vaya yo me quedaré.

La miré sorprendida porque jamás la dejaría sola con él y mucho menos sabiendo de lo que es capaz.

―la decisión está tomada Meribeth.

Cuando iba a salir no pude avanzar y me detuve.

Lo mire

―no lo haré―le dije retrocediendo.

Dos hombres me tomaron de los brazos para que no me pudiera escapar aunque ellos no estuvieran no tenía oportunidad de escapar a ningún lado al menos no con éxito.

―por el bien de tu madre te casaras―me dijo en un tono frío―. Si intentas hacer cualquier tontería lo pagará Meribeth y todo será por nada porque te casara aunque tenga que llevarte arrastras.

Negué la cabeza cuando sentí que alguien me tomaba de la cintura llevándome hacia afuera donde me esperaba el hombre que sería mi marido.

― ¡Suéltame! ¡Suéltame te ordeno que me sueltes! ―Le gritaba mientras intentaba patearlo.

Cuando el hombre me soltó con brusquedad y estaba segura que me iba a caer sentí una mano grande que tomó de la mía evitando mi vergonzosa caída. Levante la cabeza para mirar aquel que me había tomado de la mano. Era un hombre grande de ojos cafés claro que me miraba con curiosidad me sentía tan pequeña y débil a su lado que no supe qué decir.

―estás bien―me pregunto como si estuviera preocupado por mí pero sus ojos me decían lo contrario―. Sabes quién soy verdad.

Trague saliva

―por desgracia sí―le respondí con un tono brusco―. No me casaré contigo me oyes.

Él sonrió débilmente

―creo que eso no depende de ti verdad―me miro.

Mi padre llegó a nuestro lado.

―que comience la ceremonia ―anunció.

Mi padre me miró tomándome del brazo acercándome más al hombre mire a mi alrededor en busca de mi madre pero encontré a Effie llorando en una esquina tenía ganas de salir corriendo al parecer bruce me conocía tan bien que de la nada se me acercó.