17.- Bailemos.

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Lisa ama bailar.

Jennie ama ver como Lisa se expresa a través del movimiento.

Jennie Kim ama pintar.

Lalisa Manoban ama ver como Jennie se expresa a través de la pintura.

Vas a quedarte.

Porque te juro que esta vez voy a cuidarte.

A nuestra historia le hace falta una segunda parte.

Aunque nos digan que eso nunca sale bien.

La bailarina se encontraba en aquel escenario, mismo que había sido su acompañante todo ese tiempo. Sus pies descalzos y sus ojos cerrados formaban una imagen majestuosa para la artista quien con libreta en mano la observaba realizando lentos trazos suaves.

Jennie ladeo su cabeza con una pequeña sonrisa adornando su rostro, Lisa tenía su cabello anaranjado agarrado en una cola de caballo alta. Su abdomen era visible, y Kim no podía negar que el plasmarlos en su dibujo era algo realmente tentador, amaba cada ángulo de aquella tailandesa.

Jennie simplemente amaba a su musa.

Lisa sentía cada melodía de la canción, aunque en realidad no conocía lo que decía, solamente había visto la traducción una vez y fue la primera vez que la interpretó. Pero podía sentir el dolor en la voz de la cantante, el amor, la desesperación porque sabes que perderás a alguien importante, y la perseverancia.

Vas a quedarte.

Y haré de todo para volver a enamorarte.

Yo tengo miedo porque nunca pude reemplazarte.

Y si lo intentas te prometo que está vez...

Vas a quedarte.

Kim apreciaba la elección de la canción, si, la melodía era suave, la combinación entre la guitarra y el piano la hacían una melodía realmente agradable, y tener a la bailarina interpretándola aún mejor. Su corazón dolía al punto de querer frenar todo y subir al escenario para refugiarse en los brazos de la tailandesa quien tenía unas pequeñas lágrimas cayendo por sus ojos.

Vas a quedarte.

Porque, aunque sé que te perdí, yo iré a buscarte.

Y se que no podré dormir hasta encontrarte.

Le prometí a mi corazón volverte a ver.

Vas a quedarte.

La nota alta de la interprete de aquella canción resonó por el teatro causando un temblor en el sistema nervioso de Jennie quien entreabrió sus labios, la canción aumentaba el volumen dejando en claro el dolor de la artista, y Lisa, lo interpretaba a la perfección.

Las últimas letras y melodía hicieron que la artista sintiera un galope en su corazón.

Lisa se dejaba caer en el suelo, sus rodillas produjeron un sonido seco. Sus ojos grises se conectaron con los de Jennie, el dolor era visible en ellos. Jadeos salían de sus labios y algunas gotas de sudor caían por su frente.

Era una imagen demasiado sexy, para la artista.

—¿Qué tal si llevamos nuestro sentir al arte? —pregunto de la nada Jennie.

Forelsket || JenlisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora