𝐏𝐮𝐳𝐳𝐥𝐞 𝐩𝐢𝐞𝐜𝐞 | "La pieza restante de mi rompecabezas incompleto".
Los puzles tienen piezas fundamentales que son necesarias para que sean completados.
Las personas son similares, los pilares en su vida se interpretan como piezas que, si s...
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Yoon llegó corriendo hasta la esquina del campo en la que estaban sentadas sus amigas, feliz y alzando su teléfono con una sonrisa de oreja a oreja.
—¡Tengo su número! —Te lo podríamos haber dado nosotras, pero te has ido corriendo.
—No, es mucho mejor pedírselo. Así sabrá que le intereso, pero no de una forma intensa. En caso de escribirle directamente, sabría que le he pedido discretamente su número a alguien, y podría parecer que estoy desesperada —explicó la alta, añadiéndole un tono sabio a su voz. —Vaya... —Sumin sonó impresionada—. ¿Cómo sabes tanto? —Es un don. —sonrió—. Ahora le escribiré y empezaremos a hablar, entonces alguna de las dos dirá algo como "¡Oh! Qué tontas, hablando por mensaje cuando estamos tan cerca", y la otra se acercará. —Me das miedo... —Hayoung se alejó mirándola con terror, Yoon le sonrió dulce y guiñó un ojo.
...
—¡Falta! —gritó un alumno que hacía de árbitro.
Hayoung alzó la cabeza. No le interesaba el fútbol, pero quería saber qué había pasado, encontrándose con Jungwon sentado en el suelo y muchos de su equipo rodeándolo.
—¡Hey! ¡Le han dado un balonazo a Jungwon! —exclamó, acercándose a la pista y abriéndose paso entre los compañeros que le rodeaban. —¿Quién ha sido? —preguntó Yoon, siguiendo a su amiga con enfado.
—No lo sé bien, no me he fijado, solo estaba mirando a Jungwon.
A Hayoung le dio un profesor una bolsa de hielo, la cual ella apoyó con delicadeza en la mejilla del chico.
—Yo la sujeto.
—¿Estás bien? ¿Estás mareado? ¿Te duele la cabeza? —Hayoung estaba, claramente, preocupada por el chico.
—Estoy bien —respondió Jungwon, sin apenas poder hablar, ya que todo un lado de su cara estaba hinchado y, ahora, congelado.
La pelinegra miró al árbitro y al profesor de educación física, quienes estaba junto a HuiJun, cerca de ellos.
—Oh, vamos, ¿esperas que me crea que ha sido un accidente? Jun, has pateado ma pelota en dirección a su cara. —Venga, profesor, no se enfade. Todo el mundo tiene un mal día —reprochó HuiJun, desganado—. Se me ha escapado, no pretendía darle ahí.
—¿Dónde pretendías darle? —Hayoung percibió que el árbitro rodaba los ojos preguntando irónicamente. —En el estómago. —rio.
