_____ se quedó petrificada. Ni siquiera opuso resistencia cuando Zayn la sacó del vehículo y se dirigió con ella hacia la pista de aterrizaje.
-No puede ser. No puede estar casado -exclamó ella aturdida-. Yo soy la única esposa de Lars.
-Su boda fue una farsa -replicó él con frialdad-. El sacerdote era falso. Y, lo más importante, usted, señorita Linden... es una farsante.
Al llegar al pie de las escalerillas, Zayn la obligó a subir al avión y a entrar en la cabina, donde fueron recibidos por el comandante y el copiloto. Los guardaespaldas se dirigieron a los asientos de la parte de atrás.
-Estamos listos para el despegue cuando usted lo ordene, señor -dijo el comandante muy respetuosamente.
Una azafata rubia se hizo cargo del chaquetón de Zayn, mientras otra azafata pelirroja le ofrecía unas bebidas que llevaba en una bandeja de plata. _____ oyó el sonido estruendoso de la puerta del avión cerrándose herméticamente. Zayn dio las gracias a las dos azafatas, tomó una copa de champán de la bandeja y se acomodó en el amplio sillón de cuero blanco situado en la primera fila del avión.
-¿No quiere usted una copa de champán, señorita Linden? -dijo con indiferencia, volviéndose hacia _____.
Al ver que no respondía, le dirigió una sonrisa irónica y dio al comandante la orden de despegar. El comandante y el copiloto entraron en la cabina de control dispuestos a ultimar los preparativos, y las azafatas se dirigieron a los asientos posteriores del avión. _____ observó al extraño. Hacía apenas una hora, ella también estaba tomando champán en el lujoso salón del castillo de su marido, durante la fiesta de su boda. Lars la había estado mirando todo el rato con una sonrisa cariñosa. ¿Cómo podía ser posible que todo hubiera sido una mentira? No, no podía ser cierto.
-Está usted muy equivocado con Lars -le dijo _____-. Él nunca cometería...
-¿Bigamia?
-¡No use esa palabra tan horrible, por favor!
-Tiene razón -replicó él con frialdad, apurando la copa-. No se puede hablar de bigamia, dado que la boda con usted fue sólo una farsa de principio a fin.
-¡Se equivoca!
-¿Usted cree? ¿Firmó usted algún documento? -preguntó él al tiempo que observaba la reacción de _____, que por primera vez se daba cuenta de que en efecto no había firmado ningún documento, ningún acta matrimonial, ningún impreso, nada.
-Växborg hacía años que no ponía el pie en Suecia. Ninguno de sus amigos de aquí sabía nada de su primer matrimonio. El sacerdote que celebró la ceremonia era un simple actor en paro de Estocolmo.
-No es posible -dijo ella.
_____ recordó entonces que el sacerdote le había parecido demasiado joven y apuesto, como un galán de culebrones de la pequeña pantalla. Había llegado incluso a la ingenua conclusión de que todos los suecos debían ser tan rubios y atractivos como Lars. ¿Era posible que hubiera algo de verdad en todo aquello?
-¡No! -exclamó _____ rotundamente-. ¡Lars no se habría acercado a mí aquel día en el café de San Francisco si hubiera estado casado!
-¿Está segura?
-¡Sí! ¡Él no sería capaz de hacer una cosa así! El matrimonio es algo para toda la vida. La fidelidad y el amor son la base de todo.
-¿Quién le ha dicho eso, princesa? -preguntó él con sorna.
-No necesito que me lo diga nadie -replicó ella-. Mis padres llevan casados cuarenta años y mis abuelos lo estuvieron sesenta, hasta que mi abuelo murió. Todos mis hermanos están casados excepto uno. Y todos son muy felices.
Zayn la observó durante unos segundos y luego pulsó el botón del intercomunicador. Cuando la azafata llegó, le entregó su copa vacía.
-Whisky con hielo -le dijo secamente, y luego añadió dirigiéndose a _____ y mirando el anillo de brillantes que llevaba en la mano izquierda
-Veo que el matrimonio significa mucho para usted. Tanto, que no tuvo ningún reparo en jurar en falso para conseguir llevar eso en el dedo.
Estaba muy equivocado. A _____ no le importaban nada las joyas, sino sólo lo que simbolizaban.
-¡Nunca habría salido con Lars si hubiera sabido que estaba casado!
-Todo se puede comprar en este mundo. Todas las personas tienen su precio. Y es evidente -añadió él, mirando con desprecio su anillo y su traje de novia- cuál ha sido el suyo.
"El encaje lo han hecho a mano unas monjas de Francia" -le había dicho Lars muy orgulloso el día que se lo regaló. Y se había reído cuando ella le había manifestado su deseo de llevar el humilde vestido de novia que había usado su madre en los años sesenta cuando se casó en una sencilla ceremonia en su ciudad natal de California.
"Voy a ocuparme de todo, cariño" -había añadido Lars-. "quiero que todo sea maravilloso ese día y... ¡Vete preparándote para la luna de miel!"
_____ alejó aquel pensamiento de su mente y suspiró.
-Está muy equivocado -dijo ella-Debe confundirme con otra persona o...«O me está mintiendo», pensó ella, pero no tuvo valor para decirlo al ver su terrible mirada.
Zayn se levantó y se acercó a ella. Sus ojos parecían carbones encendidos. _____ trató de mantener la calma y lo miró desafiante.
-Växborg no tiene dinero -afirmó él muy serio-Todo el dinero proviene de la herencia de su esposa, cuya madre era millonaria. Todo eso que lleva usted encima ha sido comprado con el dinero de su esposa -añadió tocando con gesto de repugnancia un extremo de su vestido.
-No le creo una palabra. Si Lars fuera tan malvado como dice, su esposa se habría divorciado de él.
-No puede -contestó él apretando los dientes-. Tuvo un accidente y ahora está en coma. Aunque no creo que a usted eso le preocupe mucho.
Su tono no dejaba lugar a dudas. Consideraba a _____ una mujer ambiciosa y sin escrúpulos. ¡Ella, que había tenido que trabajar en dos sitios a la vez para poder pagarse la universidad y ayudar a sus padres a salir adelante desde que había quebrado el negocio familiar...!Los motores se pusieron a rugir de forma ensordecedora cuando el avión comenzó a ganar velocidad, preparándose para el despegue. _____ estuvo a punto de caerse al suelo.
-Siéntese -le dijo él.
Ella, sin hacerle caso, se apoyó muy arrogante con una mano en el techo de la cabina.
-No se atreva a decirme lo que tengo que hacer -replicó ella.
-Siéntese, le digo -gritó él como si fuera una orden.
Sintió entonces que le flaqueaban las piernas y se dejó caer de golpe en el asiento. El avión aceleró por la pista iniciando el despegue y él se sentó a su lado.
Ella se agarró a los brazos del asiento mientras él sacaba tranquilamente su ordenador portátil. Una vez en el aire, _____ miró por la ventanilla. Todo lo que se podía ver era un cielo oscuro y una masa de nubes levemente iluminadas por la luz de la luna. Nadie podía ayudarla. Estaba sola. Respiró hondamente tratando de controlar el pánico.
-¿Adónde me lleva?